La clave (Pedri González) [Parte 1]

XXI. La vuelta

POV Pedri

Levanté a Valentina y comprobé que estuviera bien cogida a mí para salir. El camarero me hizo una señal para que fuésemos por la puerta trasera del restaurante. Salimos y en la puerta había un guardia de seguridad y nos esperaba ya nuestro conductor.

-Buenas noches, dile a Marc que muchas gracias por todo. Mañana vendré a verle.

El hombre asintió con la cabeza y hicimos el intento de entrar en el coche. Valentina parecía mareada y me asusté un poco.

-¿Estás bien, vecinita?

-Sí Pedri, estoy genial.

-Venga, sube primero. Te ayudo.

Valentina lo volvió a intentar y cerré la puerta, yo fui al otro lado y accedí por la otra puerta. Le pedí al conductor que nos llevara a casa pero que no fuera muy rápido.

-¿Habías bebido alguna vez vino?

-Solo una vez.

-Valentina podrías haberlo dicho. Ven anda.

Se abrazó a mí y le besé en la frente. Notaba sus braguitas en el bolsillo de mi pantalón. Quería que fuese una noche especial, pero no que fuera todo tan precipitado. Valentina se quedó medio dormida de camino a casa. Saqué el móvil y consulté los mensajes. Fer y las chicas habían salido a cenar y a tomar algo. Supongo que aún no habrían vuelto. Valentina se movió y guardé el móvil.

-Pedri no me apetece ir a casa. No quiero que mis padres me vean así.

Yo tampoco quería que se fuese, pero había que buscar alguna buena excusa.

-¿Y qué les vas a decir a tus padres, vecinita?

-No puedo pensar en algo ahora mismo.

Se apretó más a mí y me puso cara de pena. Sabía que tenía que actuar yo.

-Vale, cuando lleguemos a casa, le llamó a tu madre desde allí y le digo que te has quedado dormida, que en cuanto despiertes irás a casa.

Así lo hicimos. Subimos a mi habitación tras comprobar que no había nadie. Valentina se quedó en mi cama y yo bajé.

-Buenas noches, Camila. Soy Pedri, el vecino.

-Ciao Pedri, ¿Ha ocurrido algo?

-Tranquila, Valentina se ha quedado durmiendo en el sofá y no quería que os preocupaseis. ¿Os importa que se quede aquí hasta que se despierte? Luego la acompaño a casa.

Su madre titubeó un momento.

-Vale, Pedri. Si luego la acompañas, no importa. Gracias por avisar. Mañana te llamaré para darte más detalles sobre la visita de Chiara. Seguramente nos tengas que ayudar, el día 3 llega a Barcelona, pero tendremos que ir a por ella al aeropuerto.

-Sin ningún problema, mañana hablamos. Pasen buena noche.

La madre de Valentina se despidió y colgué el teléfono. De un momento a otro, la noche se había arreglado y yo solo quería disfrutar del tiempo asolas con Valentina.

POV Valentina

Me encantaba la habitación del vecino. Tenía buen gusto para la decoración. Antes de acostarme en la cama vi que en la cómoda que había a la parte derecha de la habitación tenía unas fotografías. No recordaba haberlas visto antes. Tuve que acercarme para verlas bien. En la primera, era Pedri de pequeño con una camisa naranja y un balón de futbol. En la segunda, con su hermano Fer en un campo de fútbol. En la tercera, lo vi con una camiseta azul y granate y un balón de fútbol. Esta última fotografía parecía más reciente. Vi que no venía así que inspeccioné el primer cajón de la cómoda para ver qué había. Estaba la misma camiseta que llevaba en la última foto y la saqué del cajón. Cuando la vi por detrás llevaba su nombre sin número. Me giré para devolverla al cajón y antes de que pudiese hacerlo me abrazó por detrás.