Capítulo 40

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-¡Al fin! ¡Han llegado!

Sonreí un poco apenada por llamar la atención de esta forma pero me causaba gracia.

-Lo siento, tuvimos un inconveniente -Hunter responde guiñándome un ojo con complicidad.

Me sonrojé y aparté la mirada pero Tesha corre a abrazarme efusivamente, yo reaccioné luego de pocos segundos y le devolví el abrazo.

-Tesha, lo siento... -dije murmurando avergonzada, ella se separa para verme.

-¿De qué hablas? No te disculpes, no tienes porqué hacerlo -respondió sonriendo.

Ambas volvimos a abrazarnos una vez más hasta que mi atención se dirigió hacia los amigos de Hungría de Hunter, ellos estaban sentados en una mesa junto a Zack y ahora Hunter que les estaba contando algo.

-Ellos también quisieron venir -comenta Tesha al ver lo que yo.

Yo solo asentí en respuesta, ambas nos acercamos a aquella mesa; iba a sentarme junto a Tesha cuando Hunter agarra mi mano y me jala hasta sentarme en sus piernas por sorpresa. Lo miré sorprendida pero él me sonríe y mira a sus amigos.

-Lo que les estaba diciendo es que, Zaira es mi novia -habla sorpresivamente.

Todos abren los ojos de par en par pero Tesha chilla emocionada y salta en su lugar.

-¡Por fin! Felicidades -dice ella.

-Sí, que alegría por ustedes -le sigue Zack.

-Wau, felicidades amigo -comentan Viktor y Aurél, aunque un poco decepcionados por creer que tenían oportunidad alguna conmigo después de la fiesta a la que fuimos.

-Sí -Áron sonríe y asiente estando de acuerdo con los demás.

-Eso es sorprendente, nunca creí vivir para ver esto -habla Imara sonriendo en burla hacia Hunter quien la fulmina mientras el resto ríe-. Pero, me alegra que fueras tú, Zaira.

Le sonreí un poco y asentí en respuesta.

-Entonces festejemos, ¿qué tal una fiesta de piscina? -propone Viktor.

-Me agrada la idea.

-Yo voy.

-Yo igual.

-Estupendo -sonríen todos.

-Puede ser en mi casa, si quieren -mencioné captando la atención de todos quienes estuvieron de acuerdo conmigo.

-Está bien, pero primero... vayamos a comprar algo -dice Tesha.

-Me agrada -hablamos Imara y yo a la vez.

Nos levantamos todos y nos fuimos hacia las tiendas, nosotras nos probamos ropa que los chicos calificaban, aunque siempre nos ponían la calificación más alta. A pesar de todo y convivir con Imara... me divertía con ella. Creo que hasta podemos llegar a ser amigas.

-Bueno, ¿nos vamos? -pregunta ella luego de haber pagado por varios conjuntos.

Nosotros asentimos y salimos de la última tienda a la que habíamos entrado, yo estaba caminando junto a las chicas cuando siento a Hunter abrazarme por los hombros y acercarse a mi oído.

-¿No prefieres hacer una última parada allí? -murmura en mi oído y apunta hacia una tienda de a un lado.

La sex shop. Me reí un poco y me sonrojé a la vez pero luego lo miré.

-¿Qué? ¿Quieres amarrarme a la cama?

-Hm, mejor no lo digas porque lo haría... -sonríe y se acerca de nuevo a mi oído-. Tenerte desnuda e indefensa, solo para mí... rogándome para que te folle como te gusta. Con solo imaginarlo estoy comenzando a querer hacerlo realidad.

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