Inefable.© [Namjin]

Culpa

La noche fue horrible y solo ha podido llorar como un idiota porque es lo que es en primer lugar y no tiene manera de defenderse, sin embargo a primera hora de la mañana parte rumbo a casa del chiquillo al que ha lastimado y se prepara realmente de corazón para disculparse, planeando ser claro en sus intenciones, y rogarle que lo perdone porque jamás quiso herirlo ni hacerle de menos aún con sus muchas diferencias encima.

Jungkook es quien le abre la puerta, y Jin en serio agradece que le deje pasar ya que al parecer este sospecha los problemas que tuvo con su amigo, así que no pierde el tiempo y va directo a su habitación, con las manos vacías pues aunque quiso comprarle algo como gesto de arrepentimiento no lo hizo para no crear un mal entendido que solo le dificulte recuperarlo.

Nervioso como se encuentra, con el corazón doliéndole demasiado: toca la puerta donde Namjoon reside, pero todo le duele más cuando tiene que esperar que le abra, y definitivamente se hunde y los hombros le tiemblan: cuando puede ver el daño que ha hecho pues Namjoon no le recibe como ya muchas veces lo ha hecho. Lluce descuidado, seguramente al pasar mal la noche a causa de su error, y como apenas se ha duchado, y su cuerpo está tan pálido, resintiendo el malestar que le provocó, con bolsas oscuras bajo sus ojos y la mirada cansada por pensar en haber sido usado cuando él solo ha ofrecido lo mejor.

Es un tonto, Jin en serio lo arruinó.

—Lo siento tanto, amor..—susurra bajito, con las lágrimas estancadas en los ojos ya que además tiene que soportar como Namjoon le observa, avergonzado y sin saber cómo reaccionar, sin embargo no deseando permanecer de ese modo ya que intenta arreglarlo y se acerca a sus brazos, buscando darle un poco de confort.—Fui un imbécil, lo siento tanto—repite sollozando como si no hubiese cometido un error, como si no fuera él quien arruinó las cosas, no obstante Namjoon es tan bueno que, le rodea la cintura dándole un poco de calor.

Cómo si lo mereciera, como si fuera digno de sentir recibir lo que tanto anheló.

—Ya está..—lo escucha susurrar, y la calidez que da a su pecho se siente tan especial que solo le hace llorar más.—Respira, hyung. No pasa nada, tranquilo.

Seokjin lo abraza aún más fuerte antes de apartarse solo un poco para mirarlo a los ojos incapaz de dejar de llorar porque solo es un maldito hijo de puta que le causa problemas cuando el chico apenas ha dejado de ser adolescente y no debería cargar con esta mierda encima.

—Eres tan especial y yo un idiota..—le acaricia la mejilla, intentando recompensar que lo trató tan mal por encontrarse atrapado en la culpa que todo lo sucedido le provoca.—No debí hacerlo, no lo merecías.

Namjoon se encoge de hombros, aún avergonzado por haber sido tratado de esa forma, pero dándole oportunidad de que explique porque mierda lo hizo en primer lugar.

—Me gustaría que no vuelva a pasar si me lo preguntas, y además que me digas que te hice para que pienses así de mi.

El mayor asiente, tomando su mano para guiarlo a la cama donde tras que lo ve sentarse, se sube en su regazo buscando más calor, y se prepara para intentar contarle un poco porque está tan jodido y porque cometió ese fatal error que solo los lastimó, sin embargo no sabiendo si podrá decirle toda la verdad.

—He tenido malos días y no quería hablar de ello—comienza bajito, intentando dejar de llorar porque no lo quiere manipular al mostrarse tan débil.—Y tenerte a mi lado siempre es un placer, por lo que quería permanecer así, en silencio.

Namjoon asiente, aún avergonzado pero no tan reacio como para correrlo del lugar, aunque no evita mencionar.

—Eso es muy cruel porque me invitaste a pasar la noche contigo, luz. No puedes actuar así si quieres estar conmigo, porque no soy un juguete al que puedes ponerle baterías y apagarlo cuando te aburras de él.

Tiene toda la jodida boca llena de razón.

—Lo sé..—no piensa discutir ninguno de sus puntos porque sabe que tiene la razón.—Y no quería callarte como un niño, simplemente no deseaba continuar con la conversación. Aunque reconozco que fui muy brusco y no debí hablarte así.

Namjoon agradece que sepa aceptar sus errores y se disculpe, no obstante es inevitable no sentirse resentido ante la situación, además sospecha que, falta algo más que no desea contar.

—¿Por qué te alteraste de ese modo?.

El abogado se queda quieto en su lugar, de pronto sabiendo que, ya no puede ocultarlo más, pero con el miedo en el pecho de que, todo le salga mal, siendo esa una situación que creyó desaparecía si la podía ignorar.

La culpa siendo tan fuerte en él, que no sabe como lo arreglará.

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Juro que cuando lleguemos a los 100M lanzo un súper mega maratón aquí.