Niebla

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Seokjin recuerda como desde el primer momento en que terminó esa relación fue víctima de constantes gritos, e incluso golpes por parte de Baekhyun, quien, siempre resintió su renuncia, y quiso volver a su lado, siendo por supuesto rechazado desde que se atrevió a sobrepasar los límites de su paciencia.

El acoso sin embargo llegó a ser más reprobable cuando se atrevió a intentar abusar sexualmente de él, aprovechando la sumisión de Jin para recordarle el poder sexual que alguna vez tuvo en su relación, no contando con que el de cabellos oscuros se defendiera con todas sus fuerzas porque ya no deseaba tenerlo cerca. Recuerda incluso haber llegado hasta el punto en que corrió de su propia casa llamando al equipo de seguridad de inmediato porque el incidente al que casi fue sometido era demasiado.

Los intentos de abusarlo continuaron a lo largo de los años al menos unas tres veces, y Jin resiente que se haya atrevido a tanto. Tiene, en serio muchas ocasiones y experiencias con Baekhyun para denunciarlo, además de pruebas para hacerlo, no obstante..

—No quiero llegar a esas instancias, Nam—admite frente a su ahora novio, no deseando causar más conflictos de los que ha tenido.

Namjoon por otro lado no parece estar de acuerdo.

—¿Por qué no?.  Te ha acosado por tantos años, y te ha lastimado de muchas maneras como para que no tenga que pagar por ello.

El mayor se muerde el labio nervioso, aunque ha dejado de llorar, y es que todo con Baekhyun es tan complicado que no ve como es que llegaron aquí si el chico pudo fácilmente continuar su vida, ejercer la carrera que afortunadamente pudo terminar, y olvidarse de lo que tenían, sin embargo prefirió atormentarlo.

—No quiero causarle más daño del que ya le hice al crear una especie de obsesión con él. Porque le quería, ¿entiendes?.

El menor de los Kim es afortunadamente muy maduro como para ofenderse ante la evidencia de que entre ellos hubo cariño, quizá amor, y pregunta:

—¿Crees que debes guardarle respeto a una relación que él no respetó?.

Es tonto pero es exactamente lo que Jin siente, y es que ya arruinó tanto las cosas que, no desea joderlo más.

—Es un hombre muy brillante en otros aspectos, y trabaja en asuntos penales. No quiero arruinar su carrera con una denuncia. Sé lo difícil que es construir una reputación en un ambiente tan duro como el Derecho, y además..—no quiere meter asuntos socioeconómicos en esto pero debe.—.. no posee tanto dinero como yo por lo que, le costaría muchísimo recuperarse. Soy abogado como él, nos graduamos al mismo tiempo, y me pongo en su lugar ya que: si alguien me denuncia acabaría mi carrera, solo que, podría sustentarme de otras maneras e incluso gracias a contactos volvería a ejercer, pero alguien como él, que apenas se ha hecho un hueco en este mundo: no.

Es un jodido imbécil con un corazón blando, y demasiado noble como para merecer esto. Namjoon suspira enternecido porque tampoco puede culparlo, y al contrario, agradece que a pesar de la vida que ha llevado, y los maltratos que recibió en la misma; no sea un hombre lleno de rencor, aunque tampoco le parece que no actúe cuando ve que tan grave es la situación.

—Escucha cielo.. tú mismo me has dicho que el dinero no tiene que ser problema para ninguna situación—le recuerda con suavidad, intentando que sea neutral en este asunto.—Ni tampoco debe intervenir, ni en lo bueno, ni en lo malo, así que no importa su condición social y que apenas ejerce su profesión porque debes ponerle un alto.

Es un punto de vista realmente razonable, y Jin parece comprender la realidad, sobre todo viniendo de un chico que se adaptó a esas reglas que al fin y al cabo son realistas.

—Sé que tienes razón—admite cabizbajo.—Solo que Baekhyun fue tan importante en mi vida, y sé cuánto se esforzó para graduarse que, no quiero lastimarlo.

—¿Y él a ti si puede?—manteniendo el margen de la situación el pequeño espera que comprenda.—No puedes tener misericordia con alguien que te hace daño, hyung.

Este asiente avergonzado, ya que pese a todo sabe que tiene razón.

—Lo entiendo..—ahora le ha quedado más claro que debe poner fin a esa situación.—Y no sería mi culpa sino las consecuencias de sus acciones.

Namjoon le regala una sonrisa, satisfecho con que comprenda.

—Por supuesto, y nadie tiene derecho a lastimar a otra persona sin tener que pagarlo.

El mayor no puede estar más orgulloso con que este sea un problema de pareja y su chiquillo le haya ayudado a ver la claridad para salir de él, haciéndose parte de su vida, así como manteniendo siempre su bienestar como prioridad.

Sonríe, acariciando su mandíbula con adoración.

—Cuándo te volviste tan maduro, ¿eh?.

El más chico se ríe, encogiéndose de hombros tímido antes de contestar.

—He aprendido de ti.

—Y por eso es que me gusta tenerte cerca—Seokjin le besa, decidiendo que por ahora deberían continuar su viaje.—Te prometo resolver esto cuando volvamos a Seúl, pero por ahora sigamos disfrutando de nuestras pequeñas vacaciones ¿si?.

Namjoon no tiene deseos de otra cosa, así que asiente, y decide también dejar pasar el tema de momento, antes de poder resolverlo, aunque no olvidando que es importante y que debe cuidarlo.

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Por la noche entonces, con el fin de distraerlo le ha pedido que lo lleve a una discoteca, invitándole a bailar casi toda la noche, y logrando que tome algunas cuantas cervezas. Resultando Jin un bebedor casi experto y además capaz de soportar no solo la ebriedad encima sino también las múltiples horas en la pista de baile dónde se olvida de sus títulos y estatus para vestir jeans casuales, y una camiseta blanca mientras mueve las caderas al ritmo de la música.

Es un espectáculo realmente hermoso y Namjoon disfruta como nunca ser el único capaz de hacerlo sonreír así, y brindarle la seguridad que merece.

Lo distrae hasta altas horas de la madrugada dónde el cansancio es demasiado y Seokjin ha bailado y bebido tanto que se ríe de todo estando jodidamente borracho, hasta terminar buscando un taxi en medio de un ambiente cargado de felicidad, con bromas pasadas de tono entre ambos, y el menor siendo el más cuerdo para lograr que lleguen a salvo al hotel.

A la mañana siguiente y antes de volver a Seúl: lo único que saben es que, él terminó durmiendo en el piso, y Seokjin en el sofá, ambos sin llegar a la habitación, y aunque tienen una notable resaca encima, solo pueden sonreír al verse porque realmente lograron que el momento fuese mejor.

Y lo más importante es que Jin ha tomado una decisión, por fin aclarando esa niebla en su mente, y borrando de su pecho la misericordia hacia un ser que jamás lo mereció.

***

¡NO OLVIDES VOTAR!.

Una víctima jamás es culpable del abuso que sufrió, ni mucho menos de los miedos y la niebla que este le dejó, ya que el acoso y la intimidación al que fueron sometidos/as les oprime al momento de hablar o tomar una decisión, y esto crea dudas cuando además su agresor es una persona cercana, así que espero sean razonables o por lo menos empáticos y no dejen comentarios groseros hacia el personaje porque los borraré.

Inefable.© [Namjin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora