Inefable.© [Namjin]

Ya sabía

Volver a Seúl después de lo sucedido es difícil, sobre todo ahora que Seokjin tiene clara la situación y está organizando todo para poder hacer algo contra ello, y aunque Namjoon no entiende de asuntos legales sabe que empezó con una orden de alejamiento, impuesta no por él, ya que no puede representarse a si mismo, sino por su amigo Jung, quien será el mediador en todo. Además le orgullece que el mayor por fin pondrá punto a este asunto con una denuncia por el intento de abuso, y el acoso al que fue sometido, ya que esto asegurará su seguridad a futuro.

Comprende los motivos para no haberlo hecho antes, debido a los traumas de haber pasado por algo así, aunque le resulta difícil ya que es tan poderoso, y tiene tanto dinero que, tiene una notable ventaja encima. Además tonto no es ya que muchos de los maltratos que sufrió sucedieron fuera de su apartamento, y tiene absolutamente todo grabado por las cámaras de seguridad, lo que sirve fácilmente como pruebas ante un sistema que obviamente se las pedirá.

Confía tanto en él, que es justamente eso lo que le hace no perder los estribos cuando se encuentra estacionando la motocicleta fuera de su casa y un hombre extraño se acerca a molestarlo.

—¡Pero si eres un niño!—lo escucha reír, como si de alguna manera subestimara el motivo de que tanto le hace atractivo.

Namjoon sin embargo no ha captado quien es, a pesar de las malas vibras que siente al tenerlo cerca.—¿Perdona?—gira hacia él, no reconociendo ese cabello castaño, o esos ojos azules, junto a su porte alto y delgado.

El hombre de traje, ríe de nuevo, dejando claro que no es ningún amigo, y que evidentemente tiene muchas cosas contra él.

—Siempre supe que le gustaban los pobretones, pero contigo sobrepasó el límite. ¿Cuánto le cobras?. No debes tener más de diecinueve años.

Las emociones que cursan su pecho, y los pensamientos en su mente son demasiadas como para que Namjoon las describa, y su primer instinto al saber quién es, es lanzarse sobre él y partirle la cara por todo el daño que le hizo a su novio, no obstante si algo ha aprendido al estar con el abogado es inteligencia emocional, y sabe que arruinaría todo si actúa como probablemente sea predecible.

Es imposible sin embargo pedirle calma, así que no puede contenerse a apretar la mandíbula con rabia, y cruzarse de brazos ahora que comprende lo que sucede.

—Claro, ya entiendo—le habla con ironía.—Tú eres el resentido que no acepta un no por respuesta, y no comprende que lo botaron.

Baekhyun no parece ser tan inteligente como alguna vez creyó ya que se da el lujo de perder la paciencia y responder con rabia, por supuesto dejando ver lo psicóticamente celoso que se encuentra al saber que está con Jin.

—No eres más que un puto de quien seguramente se aburrirá en cualquier momento.

—Quizá—se encoge de hombros sin permitir que eso le afecte.—Se que puede mandarme a la mierda cuando quiera, ¿Pero que crees?. Ni aún así se decidiría por ti.

Baekhyun niega, molesto ante su soberbia, creyéndolo un ser vulgar y sin importancia como para que pueda actuar de esa forma.

—Por favor, solo eres uno más de sus caprichos. No lo conoces como yo lo hago, y seguramente estás con él por su dinero.

—¿Lo dices por mi bronceado?—lleva puesta una camisa manga corta que deja ver su piel traslúcida después de haber tomado sol en Daecheon.—Estuvimos de vacaciones hace unos días en la playa, efectivamente gastando su dinero.

Al abogado le arden los ojos de furia, y pierde la paciencia lanzándose sobre él, mientras lo maldice.

Es un maldito cobarde, acostumbrado a someter con violencia a los más pequeños, no obstante Namjoon no es débil para soportar su mierda así que esquiva el golpe, y lo somete contra la pared, conteniéndose de no molerlo a golpes porque no quiere ser impulsivo y entorpecer los planes que Seokjin está realizando.

—Escucha, pequeña mierda—le advierte sin embargo.—No estoy dispuesto a tolerar tus estupideces, o a permitir que sigas dañando a Jin porque no está solo ¿me oyes?.

El intruso que seguramente planeó buscarlo para amedrentarlo niega, intentando librarse de su agarre.

—Solo eres un puto al que ha contratado para que caliente su cama.

—Ya sabía, pero eso no impide que voy a partirte cada hueso del cuerpo si no te alejas de él, ¿Entiendes?—cuidando no hacerle un daño que pueda tener consecuencias lo avienta al piso.—Y más te vale que te largues o yo mismo me encargaré de desaparecerte. Estás advertido.

No le da opción a contestar cuando está alejándose del lugar, porque no se rebajará a su nivel, ni entorpecerá la lucha que Jin está empezando a hacer, no importa cuánto lo provoque o cuánto tenga que controlarse porque sabe que al final pagará lo que hizo, y si no, él se encargará de destruirlo con sus propias manos.

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