Inefable.© [Namjin]

Respuestas

Namjoon cuida de él después de haberlo llevado a la cama cuando se han recuperado, y de traerle otra copa de vino para que se refresque, mientras él acuna la mejilla en su pecho, abrazado a su cuerpo después de un momento de placer tan exquisito donde la lujuria predominó y su amante sobrepasó las expectativas al ser cada vez mejor cuando les toque, sin embargo quizá, estar así se siente mejor, tan a gusto y agotados después de perderse horas en sus cuerpos.

Jin está borracho y no por el vino sino por sentirse tan especial, y tan consentido.

—¿Tienes sueño, hyung?—el más chico le pregunta, sin embargo niega, suspirando quedito antes de contestar.

—Estoy cansado pero no quiero dormir aún.

Las manos de Namjoon le acarician la espalda, a pleno miércoles sintiéndose relajado, como si los problemas y ocupaciones de la semana no importaran, más atento a ese hombre que a otra cosa, y molestandolo un poco más para captar su atención ya que, sabe que lo merece después de ser tan complaciente y dispuesto con él.

—¿Puedo preguntarte algo?.

El mayor asiente, no queriendo negarle nada, aunque sin saber que podría querer si todo parece claro entre ambos, no obstante la curiosidad de su chiquillo parece ser grande, y va buscando respuestas un poco inquietantes que no sabe como tomará.

—Me sorprende como te derrites..—lo escucha decir.—Es increíble la manera en que te dejas dominar aún cuando eres mayor, y sobre todo tan poderoso.

Lo hace sonreír, sembrándole también curiosidad, así que alza la cabeza hacia él, para observarlo de frente, encontrando sus ojitos claros inquietos.

—¿Que es lo que quieres preguntar, chiquillo travieso?—le dice, haciendo que Namjoon ría bajito, acariciando su cuello con dulzura, y sintiéndose pese a todo merecedor de una respuesta.

No obstante parece pensarlo, como si buscara la manera de entender que es lo que sucede, o cuál es el misterio que rodea la vida del abogado, lo cual es muy gracioso y sin tanto drama ya que, Jin pese a su edad solo quiere disfrutar de buen sexo, y incluso ya ha salido con hombres mayores que él para lograrlo. Esto porque, no cree que la edad importe al momento de tener una relación estable, siempre y cuando no sobrepase los límites, ya que eso si sería reprobable.

—Me causa curiosidad como es que llegaste a esto. ¿Los contratos son reales para ti o solo es un chiste?.

Lo ve con ternura, sintiendo piedad hacia él que, jamás se metió en cosas de este estilo, sin embargo está dispuesto a conocer de que van y como funcionan para poder permanecer juntos, lo cual agradece en demasía, así que no tiene problemas en contarle un poco respecto a sus dudas.

—En realidad si es como un chiste de abogados, a menos para mí—sube una mano a su mandíbula, acariciando su piel morena con la dulzura que merece antes de continuar.—Pero si me lo tomo en serio aunque no lo creas. Sobre todo respecto al orden que da a mi vida porque no tengo tiempo para un hombre que no sepa lo que deseo, o que no respete mi tiempo y espacio.

Namjoon asiente, analizando bien la información antes de volver a preguntar.

—¿Solo has salido con hombres a base de contratos?.

El mayor de bueno asiente, recordando las pocas relaciones que ha sostenido y que han sido buenas gracias a esto.

—Lo prefiero porque me brinda estabilidad. Ponemos nuestras reglas, sabemos lo que queremos, lo disfrutamos y al momento de ya no estar satisfechos lo dejamos.

De nuevo lo ve asentir, guardando sus respuestas como tesoro valioso para aprender de ello, así que espera paciente a saber que más desea, haciendo que el más  chico se sienta cómodo con la conversación.

—¿Cómo iniciaste?.

Esa es una historia bastante graciosa si debe aceptar, así que se ríe antes de contarla. —Cuando era estudiante salí con un abogado con el que tomé algunas clases. Ambos peleabamos mucho, éramos unos chicos estúpidos, sin embargo queríamos estar juntos y obtener lo que deseábamos del otro, así que hice el chiste de firmar un contrato donde aceptaba las reglas de la relación y bueno, con el tiempo aprendí a hacer lo mismo solo que cambiando los roles porque aunque soy quien manda me gusta ser dominado.

—Ya veo..

Namjoon se ha quedado pensando en ese viejo amante sin embargo comprende que fue quizá cuando Jin era aún adolecente así que no le da importancia y toma todo como es, algo evidentemente de abogados, una broma interna entre ambos, y aunque se muere por preguntar lo obvio, siente que todavía no es tiempo para revelar una de sus intenciones así que se da por satisfecho, a menos de momento.

Jin entonces le sonríe, acariciando otra vez su mejilla.

—¿Mi pequeño Nam ya preguntó todo lo que quería saber?—su tono meloso lo hace reír, y toma su mentón para darle un beso fugaz, agradeciendo que haya contestado las torpes dudas que un mortal siente hacia la vida sexual que los abogados disfrutan.

—Por ahora me conformo con eso, pero quizá luego quiera más detalles del caso.

El mayor se ríe, enredando las manos en su cuello, sintiendo su piel hipersensible después de lo vivido, no obstante disfrutando la cercanía que le ofrece su chiquillo.

—Te digo todo lo que quieras si continúas así de lindo..

Namjoon simplemente le sonríe antes de besarlo, guardándose la duda más grande dentro, pues no cree aún estar listo para escucharlo, o que Jin quiera decirlo, ya que a pesar de todo quiere preguntarle si dentro de todo: se ha enamorado, o planea alguna vez hacerlo, con o sin él.

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