22

4K 482 38
                                    

Si fuese sólo un demonio cualquiera no estaría así de preocupado, incluso si fuera alguno de sus otras lunas tampoco estaría preocupado, pero se trataba específicamente de la tercera luna superior, supuestamente el más leal de sus subordinados, el único que no posee la maldición y por lo tanto puede hablar con libertad sobre el y no repercutirían en él los efectos en la maldición.
Muzan recién caía en cuenta de lo grave que era dejar a Akaza con vida, si él decidía hablar de más entonces todo se vendría abajo.

si él se alía con los cazadores de demonios seguramente revelará mucha información valiosa — murmuró el demonio mayor, que no dejaba de pensar en la estupidez que había cometido.

Existía la alta posibilidad de que Akaza fuera asesinado por ellos tan pronto pusiera un pie en la organización ¿Pero si el humano que ayudó a Akaza a concebir le ayuda a acercarse sin problemas? Le parecía muy irreal que eso sucediera, no creía que él tuviera una voluntad tan fuerte como para convivir demasiado tiempo con un humano sin tener deseos de devorarlo, pero nada es imposible y desde que conoció a ese niño de aretes de hanafuda aprendió que tenía que esperar lo en impensable, y eso es que ahora se empeñaría no sólo en capturar al chico de aretes, sino que también tenía que investigar hacia dónde es que se fue la tercera luna, dar con él y matarlo antes de que hable.

Reemplazarlo era algo que nunca creyó que iba a tener que hacer, prácticamente le dio toda su confianza y una pequeña ventaja por encima de los demás a pesar de su posición, y así es como fue recompensado, pero ya no estaba dispuesto a cometer el mismo error dos veces.
Si había algo que le sobraba eran candidatos para ser la tercera luna, así que aunque la pérdida de Akaza le dejaba mal sabor de boca, tenía que apresurarse y buscar a alguien que lo reemplace, y esta vez tendría especial cuidado y no habría ninguna preferencia sobre ninguno, no quería ser traicionado otra vez.

¿Quería verme maestro? — Kokushibo se presentó ante Muzan.

¿Qué tal está el niño que era cazador y convertiste en demonio hace poco? — preguntó con interés, como precaución y esconder su identidad ahora llevaba su forma femenina.

progresa muy rápido maestro ¿Necesita algo de él? — preguntó la primera luna.

es correcto, necesito hablar con él y también requiero la presencia de Daki y Gyutaro — respondió el azabache, su mirada se ensombreció.

Kokushibo comprendió instantáneamente de qué se trataba, ya que después de todo estaba al tanto de lo que había ocurrido, tanto él como las otras lunas superiores y varios otros demonios inferiores que corrieron la voz ya estaban al tanto de la situación de Akaza.

Muzan apretó sus puños, por primera vez tendría que cambiar la formación de sus lunas y re incorporar a una nueva, jamás hubiera adivinado que tendría que reemplazar a la tercera luna después de que le juró lealtad absoluta.

Pero esto es lo que gano por confiar demasiado — para Muzan esto significaba una llamada de advertencia, si el más leal de todas fue capaz de traicionarlo, entonces nada detenía a los demás de intentar hacerlo también.

Después de un rato Daki y Gyutaro se presentaron ante él, con ellos estaba un chico de cabello negro y joyas ropas parecía andas de un cazador pero él era un demonio, su apariencia nada humana lo delataba.

¿Ordenó vernos maestro? — Daki era la más entusiasmada de los otros dos presentes.

creo que ya están al tanto de lo que ocurrió con la tercera luna, y como los mandé a llamar imagino que ya incluyen qué es lo que quiero — comenzó a hablar con tranquilidad.

Gyutaro y Kaigaku estaban muy tensos ante la presencia imponente de Kibutsuji, mientras Daki estaba realmente fascinada aunque también le guardaba un profundo respeto, pero su emoción en esos momentos era tan evidente el aroma a ciruelas inundó el lugar en el que estaban, Gyutaro reconocía ese aroma tan dulce que era capaz de empalagar la nariz de cualquiera, su hermana realmente estaba emocionada.
Muzan como cualquier alfa sintió el aroma de esa omega, sin embargo le fue completamente indiferente ya que él seguía reacio ante la idea de intentar otra vez conseguir un heredero usando a un omega demonio, no desde que lo intentó por primera vez con la única persona que nunca iba a olvidar.

a lo que voy es que, he decidido que Daki y Gyutaro ocupada en el puesto que anteriormente ocupaba Akaza, y tú niño — señaló a Kaigaku — felicidades, a partir de ahora eres la sexta luna superior — finalizó esbozando una sonrisa tenue.

Los tres presentes estaban intentando procesar lo que acababa de decir, cuando de pronto, al mismo tiempo sintieron un fuerte pinchazo en su cuello acompañados de la sensación de ser inyectados por un líquido extraño.

sus puestos son suyos, si primero sobreviven a esta gran cantidad de mi sangre — y después de terminar de hablar, miró como los tres se retorcía en el suelo de dolor.

Ahora el puesto de Akaza estaba nuevamente ocupado y un nuevo integrante se sumaba a las doce lunas demoníacas, a partir de ahora tenía que ser extremadamente cuidadoso, estar encima de sus doce lunas en todo momento para asegurarse de que nunca se irían de su lado.

------------------------------------

Entonces en ese momento Hakuji despertó al sentir un fuerte dolor en sus ojos, tan pero tan insoportable que sus propias lagrimas caían mezcladas con sangre.
Kyojuro escuchó sus gritos y temiendo que la vida de su hijo corriera peligro, irrumpió en la habitación de Hakuji, sólo para encontrarlo ahora hincado en el suelo mientras se sostenía la cara y la sangre caía manchando el tatami.

¡Hakuji! ¿Qué sucede? — preguntó al intentar acercarse con cautela.

Por suerte Senjuro había salido de compras y su padre seguramente había ido a comprar alcohol, por lo tanto estaban solos y Hakuji era libre de mantener su forma demoniaca en la casa.
Hakuji apartó sus manos ensangrentadas y miró hacia Kyojuro, y entonces miró algo impactante en sus ojos.

¡Esto es...! — Kyojuro se quedó sin palabras.

¡Kyo-Kyojuro...!

𝓑𝓮 𝓜𝔂 𝓐𝓵𝓹𝓱𝓪 - 𝓴𝓲𝓶𝓮𝓽𝓼𝓾 𝓷𝓸 𝔂𝓪𝓲𝓫𝓪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora