Capitulo 8

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Karlam

SOMBRA

Lo bueno de ser solo una sombra es que puedes estar en cualquier lado y sin que nadie sea consciente de tu presencia y ser el mejor espía profesional, como ahora, la cueva se inunda de ecos que ejercen los pasos de la persona que entra; viejos enemigos, viejas cuentas que saldar, ese es mi lema.

Como siempre camina con la soberbia que nadie sabe de dónde la sacó, siempre con el mentón en alto y las manos en la espalda, sus ojos de gato dorados brillando en la oscuridad. Como lo detesto, se adentra en está fría cueva en busca de lo que yo necesito. Me muevo más rápido que él y discretamente me pongo en una posición perfecta para ver el interior de la cueva y de lo que está apunto de pasar.

El interior es tal como lo recuerdo, una cueva circular con un pequeño estanque circular; colgadas en la pared hay diez esculturas a su alrededor las cuales se iluminan de un color específico, todas están talladas de acuerdo con la persona de la que fueron creadas, me da alegría que la mía siga con sus colores y características intactas, seis de esas se iluminan haciéndome sonreír. Fue un magnífico plan de mi parte con un resultado digno, valió la pena todo lo que he sacrificado y mi recompensa ha llegado.

El gato humano se adentra en la cueva y los espíritus de las esculturas cobran vida pudiendo mover solo la parte de la cintura para arriba. Me encanta que mis propios poderes no pueden ser detectados por otros, ha pasado mucho tiempo que he permanecido en las sombras y al mismo tiempo la era de la oscuridad también se acerca más rápido de lo que creí.

-Uslar ¿Qué novedades tienes? – la cueva se llena de un eco femenino dulce, me asquea tanto escucharlo. La estatua de color morado se mueve al hablar.

-Los siete están a salvo en la isla – dice el hombre gato.

-¿Cómo es posible que así de rápido la hallarán? – reclama la estatua naranja.

-Tuve que dejarlos en la isla – reconoce el gato.

-¡Uslar tenían la misión de encontrar la isla solos! – grita el naranja.

-¡Ellos solos se complican la vida! ¡Una de ellos es la que no tiene el control sobre su poder, al tener la joya ancestral incompleta solo causa caos! ¡Es la que me complica todo! – le devuelve el grito Uslar. - ¡Casi muere y tuve que apartarla dos veces!

-¡Eso es lo que pasa por dejarle el encargo a Uslar! – reclama la estatua turquesa.

-¡¿Disculpa?! ¡Me recuerdas quién está vivo y quien es solo un espíritu andante! – se defiende Uslar.

-¡Uuuuh! Tiene un punto – se burla de la voz femenina morada.

-¿Qué haremos? – pregunta la voz de la estatua verde.

-¡Hay que enviarles a Karlam! ¿Puedo enviárselos? – propone la estatua del café.

-¡Están locos! ¡No saben ni defenderse de unos monos! ¡¿Cómo van a enviarles a Karlam?! Propongan eso cuando al menos uno se haya transformado – interesante información que recibo, me da mucha gracia que aun nadie note de mi presencia.

-A este paso nunca se transformarán, es mejor provocar que ellos mismos saquen a la luz su poder – opina suavemente la voz de la estatua verde.

-Llevarles a Karlam es muerte segura – sigue en su punto el terco el Uslar. - ¡Me he sacrificado tanto como para tener que volver a iniciar una búsqueda! ¡Tiempo no hay! Y lo saben.

-No pueden morir a manos de Karlam – se burla la estatua turquesa.

-Una de ellos si puede. No pienso arriesgar nada, ¡Y más cuando no tienen ni una idea de cómo me costó traerlos aquí! Además, dos de los siete comienzan a sospechar que esto estuvo planeado y tarde o temprano el teatro de retenerlos aquí se caerá – Uslar es la mejor persona para obtener información.

Los 7 Ancestrales. Náufragos I. Completo ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora