"Voces Nocturnas". •McLennon•

XVI

Tomé un chorro de agua y lo escupí, dejé mi cepillo en su lugar y salí del baño con la toalla bien atada a mi cintura. Cuando estuve en el cuarto ví a Cynthia acomodando su cabello rubio recién teñido.

-Buenos días, mi amor. -Ella vino a mi con una sonrisa muy contagiosa y me dió dos besos. Sacudió mi cabello húmedo y agarró mi mejilla.

-¿Amanecimos muy felices hoy, eh?

-Es que hoy es tarde de chicas, iré a pasear con Jane y Astrid.

-Ah, suerte cariño.

Camine hacia mi closet y saqué una camisa guinda de vestir, una corbata negra, un boxer, calcetines y un pantalón negro de vestir.

-Deberías juntarte con Paul.

Me quedé callado y rápido dejé la ropa en la cama.

-No creo cariño, tengo mucho que hacer, debo ir al trabajo y renovar mi licencia.

-¿Se enojaron o algo así?

Ella se vio al espejo mientras acomodaba su vestido negro que llegaba hasta las rodillas.

-¿Con Paul?, No, no. -Agarré la plancha para ropa y acomodé mis prendas de vestir.

-Cuando volvieron del taller estaban muy callado, supuse que habían discutido.

-No, no. Para nada. -Al finalizar la camisa comencé con el pantalón. -Por cierto, ¿A dónde irán?

-De compras y pasaremos a tomar un café, vendré aquí como a las seis de la tarde, ¿Está bien?

-Si, mi amor.

Dejé la plancha a un lado y tomé mi traje.

-Ten mucho cuidado, ¿Bien?

-Si, tranquilo, Jane vendrá por mi y luego iremos por Astrid.

-Me la saludas, hace meses sin verla.

Se escuchó la bocina de un auto, Cyn se asomó a la ventana y saludo, seguramente a Jane.

-Ya llegó por mi. -Vino hacia mí y se despidió con un beso y sin esperarmelo me dió una nalgada y salió del cuarto en medio de risitas.

-Esa mujer.

Con una sonrisita caminé hasta la ventana y ví como Cyn subía al auto de la pelirroja.

Cuando volteé al otro lado ví mi reflejo en el espejo y comencé a inspeccionar mi cuerpo.

-Me hace falta algo de ejercicio. -Sujete mi barriga con mi mano derecha ya que la otra tenía mi ropa y suspiré. -Mierda... será muy incómodo ver a James hoy.

Ví el reloj que cada que daba una hora nueva hacia "Tac", ya eran las doce, debía apresurarme.

°°°

-Llegaste tarde otra vez.

George dejo su periódico a un lado y se cruzó de brazos.

-El maldito tráfico que no me dejaba avanzar.

Desajuste mi corbata y abrí solo dos botones de mi camisa.

-Tuve que tomar la ruta larga para poder darte el honor de verme hoy.

-Oh, que humilde viene usted Buddy Holly.

Se volvió al pequeño escritorio que teníamos y dejó los papeles que debía ordenar delante de mi.

-Ya hice la contaduría, solo ordena las fechas y haz un horario con los invitados que tendrás. -Dejó una pluma negra delante de mi y volvió al perchero dónde agarró su suéter. -Hoy vino este sujeto, Asher.