Broken Pieces ❥ muke

61 ❥ her

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HER
[ella]

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Despertó sintiendo un cosquilleo en su frente, que hizo que su ceño se frunciera y no pudiera evitar recordar al viejo gato que se metía por la ventana de su habitación cuando tenía quince.

Solo que esta vez, no fue la cola del peludo animal lo que lo despertó, sino un suave tacto en su rostro y apartando pequeños cabellos de este. Eran unos ojos verdes viéndolo en el momento que abrió los suyos, con una leve sonrisa bajo ellos.

No era el gato de la vecina de su anterior casa, era algo casi parecido, pero mejor.

—¿Dormiste bien? —preguntó, viendo los tatuados dedos de Michael enrollar un pequeño rizo para luego dejar caer delicadamente contra su frente y apartarlo.

—Sí, lo hice —respondió él, más concentrado en arreglar su cabello y los rizos desordenados que se formaban al levantarse —. Aunque, no pude evitar despertarme temprano. Necesitaba-... asegurarme que estuvieras aquí.

No pudo evitar sentir algo de tristeza ante las palabras de su novio, pero no lo demostró. Lo único que hizo fue dejar un corto beso en su nariz y disfrutar de la pequeña sonrisa que se posaba en sus labios ante su acción.

—Aquí estoy, no me he ido y no me iré —respondió. Para este punto, realmente no le importana cuantas veces tendría que decirlo, lo haría hasta que Michael pudiera creerle, sin importar cuánto tiempo tomara.

—Está bien —murmuró él, y aunque no sonara demasiado convencido de sus palabras, esperaba que estuviera haciendo el intento de creer en ellas.

—¿Cómo se siente tu piel? ¿Sigue sensible? —preguntó, pasando su dedo indice cuidadosamente por la piel del hombro de su novio. Él soltó un pequeño suspiro al sentir su tacto, para luego negar.

—Algo, pero no tanto como ayer.

—Aplicaré más crema después del desayuno —prometió, besando el mentón de Michael —. ¿Hay algo en especial que quieras que te prepare o prefieres que vaya por tu café favorito al-

—Quédate —pidió él, sujetándolo de la muñeca —. Solo... hay algo que- que necesito decirte primero.

Notó el cuerpo de Michael enderesarse levemente en la cama, hasta que su espalda descansó contra el respaldar para que pudiera juntar las piernas contra su pecho y tomar esta posición "a prueba de personas" que siempre utilizana cuando se sentía vulnerable.

Tomó asiento a su lado, sin estar seguro si ahora mismo tenía permitido otorgarle su tacto. Michael parecía demasiado concentrado en las siguientes palabras que diría, con una expresión pensativa y las manos sujetando con fuerza el agarre alrededor de sus piernas.

—No tienes que hacerlo si-

—Se llamaba Alexa —dijo él, mirando hacia cualquier parte menos en su dirección —. Mi mamá la contrató solo porque parecía la mejor opción en ese momento. Ella no tenía experiencia como representante, ni un gran currículum, pero era... mejor que nada. Yo solo tenía como diecisiete y realmente no tenía idea de cómo las cosas funcionaban para las "celebridades", pero tampoco era algo que me importase.

—De acuerdo —dijo lentamente, mirando hacia el perfil de su novio y cómo parecía costarle seguir con la historia —. Puedes tomarte tu tiempo, bebe. Estaré aquí, escuchándote.