Broken Pieces ❥ muke

54 ❥ reflection

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REFLECTION
[reflejo]

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Eran pasadas la medianoche, por lo que podía escuchar a la perfección el suave golpeteo del granizo de la nieve contra su ventana.

Era casi relajante.

Solo que, ahora mismo, no se sentía de esa manera.

Sus ojos no eran capaces de dejar se ver el reflejo de su desnudo cuerpo en el espejo de su delante. Era la misma imagen que lo llevaba atormentado por demasiados años y no era capaz de quitar de su cabeza.

Su sentido común le gritaba que despertara a Luke antes de cometer otro error del que se arrepentiría, pero la voz en su cabeza solo resaltaba el hecho de que subió una talla de pantalón y el temor de que eso hubiera afectado más de lo que era capaz de darse cuenta. Tenía miedo porque cada día que pasaba se alejaba más de su meta.

Jamás sería perfecto.

Puede que, para este punto, sea algo que ya hubiera aceptado, pero de todas formas, dolía.

Odiaba que las voces en su cabeza hayan tenido razón.

—¿Mike? —escuchó decir a una suave y soñolienta voz por el otro lado de la puerta. Su mirada fue hacia ella, casi sintiendo tanto alivio como culpa —. ¿Estás ahí?

—Sí —respondió en voz baja —. ¿No tienes que trabajar mañana? —preguntó, llevando la mirada hacia su reflejo nuevamente.

—Tú también —dijo él, a lo que blanqueó los ojos —. Vuelve —pidió su novio en un susurro, casi como si estuviese rogándoselo.

—¿Quieres entrar?

Escuchó un sonido en afirmación del otro lado de la puerta, para que luego la perilla estuviese siendo girada y el cuerpo de Luke se viera en el reflejo del espejo.

Él vestía esa vieja camiseta de su banda favorita que robó de su armario y solo ropa interior. Usaba la misma camiseta que vistió luego de que llegaron de hacer las compras en el supermercado y fueron demasiado flojos como para guardar en las alacenas.

Notó como los ojos azules de Luke veían la ropa a sus pies, mientras las cejas arriba de ellos se fruncían, hasta ver su imagen en el reflejo del espejo. Él avanzó lentamente, casi con temor, para luego pasar cuidadosamente las manos por su cintura y hacer que un pequeño escalofrío se sintiera por su cuerpo.

Podía sentir los suaves labios de su novio contra su hombro, para que luego sus brazos estuvieran rodeándolo por la cintura, sujetándolo con más fuerza contra su cuerpo y provocando un débil suspiro escapara de sus labios.

—Eres tan hermoso —murmuró él contra su piel. Siempre lo decía, pero era tan difícil creerlo —. Jamás te mentiría —dijo Luke, como si hubiera leído su mente. Para este punto no le sorprendería que fuera capaz de eso.

—¿Por qué no puedo ver lo que tú ves? —preguntó en voz baja. Luke lo miró por el reflejo, con algo de tristeza en sus ojos azules, para que segundos después sus cejas se levantaran como si una idea hubiera pasado por su cabeza.

—Espérame aquí, ¿está bien? —dijo él, soltando levemente su agarre. Asintió algo confundido, para luego perder el calor corporal que su novio le estuvo proporcionando —. No tardaré —agregó, para besar su mejilla y salir por la puerta del baño.

Luke volvió a los pocos segundos, cuando sentía algo de frío filtrarse por su cuerpo y la necesidad de cubrirlo. Pero, una parte suya, sabía que estaba bien. Luke estaba aquí, no había razón para no estarlo.