Mi pequeño y estúpido plan.
Layla.
Reparo mi atuendo frente al espejo, el vestido rojo corto con escote en V que tanto prende a Daniel.
Me retoco el labial rojo por última vez peinando mi cabello, me ha crecido, ya me llega hasta la cintura, está negro completo con un brillo que lo hace lucir cuando lo muevo.
Me he preparado para este gran día desde hace algunas semanas, Clara vendrá hoy a la Academia y solo falta una media hora para que esté aquí con la insoportable de su madre.
Salgo al pasillo buscando el ascensor pero me escondo detrás de una columna de cemento al ver a Lanz y algunos estudiantes de primer año entrar en el.
Desisto de esa idea ya que no quiero que nadie me vea en estas fachas en la academia, la mayoría del personal está entrenando en el campo y Anastasia salió a un encargo de Daniel, mi momento perfecto.
Subo por las escaleras intentando que los tacones negros de seis centímetros no causen mucho ruido a la hora de pisar.
Sostengo la carpeta con la ubicación de los lugares donde estuvo Amisha, Daniel me la pidió hace días pero no la había terminado.
Llego al pasillo y me escondo detrás de la pared cuando Esteban sale de la oficina de Daniel cogiendo el ascensor.
Doy un paso al frente cuando abro la puerta de madera pulimentada.
El olor a Chanel me llega hasta acá, huele a Daniel, lo busco sentado en su escritorio vestido con un camuflado que le aprieta marcandole los músculos. Extrañé verlo, oler su perfume, tocarlo... Y sobre todo cabalgarlo, pero tengo dignidad.
–Buenas tardes.
Levanta la cara dejando de lado el iPad que sostenía, sus ojos recorren todo mi cuerpo prendiendolo en llamas, de repente siento que la ropa me estorba, el aire es muy poco y el espacio que nos separa demasiado.
–Ya tengo todo el informe. —le muestro la carpeta y la recibe.
Me vuelve a reparar poniéndose serio y camino por la oficina mientras el me sigue con los ojos.
–Amisha estuvo en varias tiendas de armas también visitó una residencia en Polonia, se sospecha que fue a ver a uno de los aliados de su padre...
Daniel no deja de observarme y eso me hace festejar para mis adentros, lo estoy consiguiendo, sabía que no fallaría.
–Cameron volvió a Rusia para mantenernos informados de todo y según su llamada esta mañana, Amisha volvió a Rusia acompañada de una mujer y un hombre que desconocemos.
Se pasa la mano por el rostro y ojea los papeles rápidamente.
–Ya di la orden de que los Drones se desplegarán por la mayor parte de Rusia para poder localizarlos, no sabemos dónde se esconden y no podemos confiar en nadie ya que... ¿Me está escuchando?
–La verdad no, ni me interesa hacerlo.
Me acerco sentándome en la esquina del escritorio levantando una pierna, trae una camisa blanca lo cual lo convierte en un blanco mucho más fácil.
–Deberia de hacerlo esto es importante.
–No puedo con ese jodido vestido que me dan deseos de follarte con el y ese labial rojo el cual muero por regarte.
Sonrío con picardía acariciándole el torso.
–Hazlo entonces.
–¿Crees que caeré en tu juego? Tal vez con el estúpido de Gambino funcionó pero conmigo lo dudo mucho.
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Placer Y Obsesión (Libro 1)
SonstigesLayla se traslada de Hawaii a Witko finalizada sus vacaciones con sus mejores amigas prácticamente sus hermanas. En su incorporación al trabajo en la Academia Pembrook, una Academia que recluta y prepara soldados para la disposición del FBI y la CIA...