A la deriva.
Daniel.
Me aventuro a la Academia, es lunes por la mañana y Lanz me sacó de la cama a las seis porque hay un reporte desde Rusia.
El Lexus rechina las gomas cuando tomo una curva apresurado, no hay prisa pero la lentitud no es lo mío.
El fin de semana no estuvo para nada mal, me la pasé follando con la exención de que tuve que bailar con Layla en una puta fiesta de disfraces, la única parte buena fue que cogimos en el baño del local.
Llego al estacionamiento y Layla está saliendo de su Porsche, se ajusta la chaqueta de lana blanca y toma su mochila, la veo caminar moviendo las caderas hacia los lados y me embeleso con sus movimientos.
No puedo negar que dormir dos noches con ella fue placentero, como también el exquisito sexo que me brindó, me estoy volviendo adicto a ese cuerpo esculpido por los mismos dioses y a esos labios suaves y jugosos que me succionan la verga.
Salgo del Lexus caminando en su dirección y aminoro el paso al ver a Adrik llegar en su furgoneta gris, se baja saludando a Layla con dos besos en las mejillas.
Desde el incidente en la cafetería evito cruzarme con el para no partirle la cara, camina al lado de Layla quien ríe con algo que él le dice.
Avanzo a grandes zancadas pasándole por el lado a ambos, Adrik me llama y lo ignoro, siento como camina apresurado hacia mí y me detengo conteniendo las ganas de hacerle sangrar la nariz.
–¿Que quieres?
–Necesito hablar contigo, es algo importante. —tomo aire.
–No me hagas perder el tiempo o lo lamentarás.
Me adelanto iendo a los casilleros para luego cambiarme de ropa.
Subo a mi oficina y Anastacia me pasa los informes, abajo escucho los trotes y las órdenes que da Layla al grupo de segundo año, ya que ese fue el que se le asignó.
Adrik llega y toca la puerta, trae una carpeta negra en sus manos y toma asiento frente a mi.
–Habla rápido. —demando.
–Cameron comunicó desde Rusia que los Gambinos se movieron, ya no se encuentran ahí, intenté rastrearlos pero los perdí.
–Menuda pérdida de tiempo me estás dando, ¿Quieres que te expulse? —lo encaro.
–Claro que no, no es mi culpa... Bueno no estoy aquí para excusarme, la cosa es que tres de mis Drones fueron hackeados, ¿Como? Ni yo mismo lo sé, pero la cosa es que ya hay demasiadas personas infiltradas, están prestando todo un ejercito y no creo que sea para correr una maratón.
–¿Eso es todo lo que me tienes? Quiero nombres de los implicados, o al menos una referencia de quienes puedan ser.
–En Rusia tienen comprados a casi todas las personas de poder, uno de ellos es Alij Romano, es un empresario famoso, tiene una empresa de autos y dos de armas, ha sido acusado varias veces de tráfico de armas y trata de blancas pero nunca a sido confirmado.
–Necesito que despláces tus Drons al norte de Rusia, Escocia y Suecia y que Cameron se quede donde está.
–Entendido.
Sale de mí oficina y me llevo los dedos a la sien con el dolor punzante que me da.
Anastasia entra a mi oficina con una taza de té y una sonrisa radiante en su rostro, no se puede negar que de vez en cuando le he mirado el culo a mi secretaria.
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Placer Y Obsesión (Libro 1)
AléatoireLayla se traslada de Hawaii a Witko finalizada sus vacaciones con sus mejores amigas prácticamente sus hermanas. En su incorporación al trabajo en la Academia Pembrook, una Academia que recluta y prepara soldados para la disposición del FBI y la CIA...