Febrero pasó, llego Marzo y llegó Abril. Fue la ausencia más larga que pude haber soportado.
Cuando terminó Febrero me llegó la notificación del Banco, el deposito mensual que siempre recibía llegó.
Supe entonces que estaba ahí, por alguna parte, haciendo algo, que yo solo era su contrato.
Entonces me dedique a salir, comencé a tomar clases de pintura, crochet, tomaba a mi sobrina los fines de semana y nos quedabamos en casa cocinando y viendo peliculas, incluso comencé a olvidar su ausencia.
Todo volvía a sentirse como antes, solo yo, en ésta casa llena de ventanas, con plantas verdes que comencé a comprar para decorar, las había por todos lados, escaleras, barandales, en la sala y cocina; grandes y pequeñas, colgaban o se sentaban en algún lado de la casa. Las plantas ahora me hacían compañía y me gustaba, coloqué un comlumpio en el patio y comencé a poner flores en el jardín. Era otra casa, ahora era mi casa y la soledad ya no era mi enemiga, no me molestaba y me dejaba ser yo misma cuando bailaba o cantaba o me sentaba en silencio en el columpio mientras esperaba que saliera la luna. Incluso compré un columpio con forma de hamaca, esos hechos de macramé; lo colgué en la sala junto a la ventana y se sentía hermoso estar ahí, junto a la soledad que ahora me acompañaba.
Whatsapp:
Hermana-"harás otra fiesta de cumpleaños para Andrew?
Julia- "no creo que éste año haremos una, ha estado muy ocupado"
Hermana -"se iran de viaje?"
Julia- "lo dudo mucho"
Hermana -"estan bien?"
Julia - "creo que sí"
"si hacemos algo te mando mensaje"
Talvez ahora es momento de escribirle? Con temor busqué entre mis mensajes y ahí estaba su nombre, ni siquera había revisado nuestros mensajes, o abierto para ver su último "visto", pero talvez así, tendría una respuesta.
Julia - "vendrás la próxima semana?"
Andrew -"En linea"
Miró mi mensaje y se desconectó. Es temprano tal vez está ocupado en Jueves a las 3:27pm
No supe más los siguientes días, ni un mensaje o llamada. Pero era como antes, antes de su cumpleaños, antes de dormir juntos, antes...
*** Domingo***
Son las 10:11 am, no me quiero levantar, no quiero saber nada, aunque es un día muy bonito como para desperdiciarlo. Me levanto para ir al baño, abro la regadera y tomo un baño de agua fría.
--oh! lo lamento, traía los auriculares puestos... pensé que no estaba... yo...-- ahí estaba Andrew, tartamudeando, quitandose los audifonos y dándose la vuelta para no mirarme mientras enjuagaba el jabón de mi cuerpo.
-- ¿Puedes esperar afuera? -- fue lo único que dije sin pensar.
Espere, talvez se habría ido, así que me tomé mi tiempo y terminé de bañarme. Con más tranquilidad me sequé, puse crema y puse ropa limpia. Nada especial, solo saldría a caminar, talvez me sentaría en alguna cafeteria a ver pasar el día, no estaba segura.
Al salir a la habitación no esperaba encontrar nada, así que no estaba sorprendida de no verlo en la cama, o en el sillón junto a la ventana. Tomé mis cosas y salí de la casa.
Caminé por la calle, cuando me vino a la mente su imagen, recordé que yo estaba viendo de frente a la regadera así que me vio de lado, ¿será esa la primera vez que me vé desnuda? Creo que sí. Pero que importa.
8:15pm Bueno, sí que la he pasado todo el día afuera, creo que ya puedo regresar.
Antes de entrar a casa, por un momento quise que al abrir estuviera ahí, pero qué sentido tendría si no me mira, si no hablamos?
Al abrir la puerta la cocina está vacia pero unavez adentro, una luz en la sala deja ver que ahí esta él, con ropa deportiva, descansando, mirando la televisión como si no tuviera prisa, como si fuese a quedarse.
Pero lo dejo ser, de todas formas cuando quise hacerle ver que no podía ignorarme en la misma casa por largo tiempo, hizo todo para demostrarme que podía hacer eso y más, como si yo lo hubiera retado.
Así que camino a las escaleras en silencio.
--¿Has cenado?-- me pregunta sin mirarme.
¿Qué le pasa?, ahora quiere hablarme!? Pero no puedo si no sentir un cuchillo clavandose en mi pecho pero es el estomago el que me duele.
Trato de ignorarlo, pero me he detenido, no camino, tan asombrada me siento?
-- ¿Has cenado?-- ahora se ha dado la vuelta y me mirá la espalda.
-- Ya he cenado-- subo las escaleras. Cierro la puerta de mi habitación.
Siento otro cuchillo en el pecho pero por alguna razón el dolor lo siento en el estomago, ¿quiero llorar? ¿estoy enojada? Pero no quiero, no me dejo y el dolor del estomago se extiende comopunzadas en todo mi cuerpo, como si agujeros negros aparecieran para comerme viva.
Más tarde escucho las pisadas en el pasillo, una sombra se para frente a mi puerta, pero apago las luces y me meto a la cama.
Se ha ido a la otra habitación. Cierra la puerta.
"Ojala se vaya" es todo lo que pienso y cierro los ojos.
10:17am Lunes
"Hoy es su cumpleaños, ¿seguirá en la casa? Espero que no."
Son casi las 11 de la mañana pero aún no me decido a salir, supongo que puedo estar aquí todo el día, sin comer?
Bueno, tengo que salir...
Nadie, de nuevo todo solo, creo que así es mejor.
Saco un poco de fruta del refrigerador, yogurt y granola.
Sentada en la sala, prendo la televisión y así pasa el medio día.
Cuando la puerta del garage se abre y salto del susto, ¿qué ha sido?
La puerta se cierra.
-- Lo siento, te asuste?-- ahí esta de nuevo, con su ropa deportiva, maleta de gimnasio y se dirige arriba.
Solo asiento con la cabeza, pues lo que más me sorprende es que me haya mirado a los ojos.
De nuevo el sentimiendo y el dolor de anoche, ahora se sienten más profundos, más dolorosos.
¿Va a quedarse? ¿Qué hace aquí? Debería de irse, pero bueno es su casa tambien.
Un rato despues lo escucho bajar las escaleras.
"Bien, creo que es la hora"
-- ¿Quieres salir a cenar? --
" De verdad esta pidiendome salir así como si nada?"
Lo miro, pero no puedo decir nada, los agujeros negros me estan comiendo de nuevo.
-- Son apenas las tres de la tarde.-- miré el reloj.
-- Bueno, no ahora, en la noche--
Estaba de pie entre la cocina y la sala, no tan lejos para no escucharlo, pero aún así pregunté de nuevo.
-- ¿A dónde? --
-- Vamos a ir al Moose and Roose, te gustan las costillas, ¿verdad? Ahí hay ...
-- ¿Vamos?-- Le interrumpí.
-- Sí... Cesar y un par de compañeros de la oficina.-- "silencio"
Bajé la mirada, miré mi plato y seguí comiendo.
-- Será a las 6, saldrémos a las 5:30, no bajes tarde.-- Subió las escaleras.
Supongo que esta aplicando el contrato.
"Otro cuchillo, otro agujero"
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El contrato.
Non-FictionJulia y Andrew se conocieron a través de una pagina de Internet en la que se encuentran los empresarios y millonarios, pero también las chicas y chicos que andan en busca de un "patrocinador" que les ayude en sus negocios o educación. Los empresari...