•I Love You Forever• |Bughead|

Capitulo 28 "Amor profundo"

Jughead fue a buscar a su hija para llevarla al jardín de niños. Después de que Jughead se llevó a la menor, Betty fue al hospital para ver el estado de su nuevo bebé. Otra vez con esa mezcla extraña de emociones que sintió con su primera hija. Cuando llegó su turno le hicieron los controles necesarios y un ultrasonido. Ella y la doctora miraban atentamente la pantalla.

- De acuerdo... usted tiene 7 semanas de embarazo- Informa la doctora pasando el transductor sobre el vientre de la rubia.

- Eso es bastante tiempo. Ese bebé se ve más grande de lo que pensé que sería- Responde Betty mirando la pantalla con una sonrisa.

- La felicito. Su bebé está en perfecto estado- Habla la doctora.

- Gracias. Eso es todo lo que importa- Contesta Betty mirando aquella pantalla con una gran sonrisa.

Al salir del hospital, Betty se fue en su auto hacia la empresa. Entró al edificio saludando a todos y entró al ascensor para subir a su oficina y Brett entró ahí con ella.

- Hola Elizabeth. Donde estabas?- Pregunta el.

- Y por qué te interesa?- Pregunta Betty sin nisiquiera mirarlo.

- Alguien está de un humor explosivo hoy. Que pasa Elizabeth? Problemas con tu esposo escritor?-

- Déjame en paz de una buena vez por favor!- Exclama Betty ya cansada.

- Cielos rubia... cálmate. Que está pasando contigo? Solo te hice una pregunta-

- Lo siento. Lo siento- Se disculpa Betty tomando aire para calmarse.

- Aún enojándote luces tan sexy...- Admite Brett guiñándole un ojo.

Betty lo ignoro por completo y cuando el ascensor se detuvo en el 6to piso ella salió y Brett caminaba detrás de ella hasta que ella entró a la oficina.

- Que quieres?- Pregunta Betty sentándose en su escritorio.

- No tengo que decírtelo preciosa- Responde el.

Betty tomó aire para no perder la cabeza y luego habló.

- Cuántas veces tengo que decirte que no?- Pregunta ella.

- Hasta que no escuche lo que quiero escuchar no me detendré-

- Brett... estoy con Jughead. Por eso no puedo andar contigo- Miente Betty.

- Buen punto linda. Pero no te librarás de mi tan fácilmente y voy a estar esperando el momento en el que Forsythe se descuide- Advierte Brett saliendo de aquella oficina.

Betty no le dio ni la más mínima importancia a las palabras de Brett y empezó a trabajar.

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Después de dejar a su hija en el colegio, Jughead fue a Pop's a escribir mientras se comía unas donas acompañadas de una malteada. Vio a su mejor amigo pelirrojo entrar a dicho lugar y le habló.

- Hey zanahoria- Lo saluda.

- Hermano- Responde Archie sentándose frente a él. - Escribiendo?-

Jughead asintió con la cabeza y después bajó la mirada.

- Oye... que pasó?- Le pregunta.

- No lo sé. Es que... estoy preocupado- Contesta el pelinegro.

- Por que?- Pregunta Archie.

- Es Betty. Es que... últimamente esta muy rara. Apenas me habla y se enoja conmigo con facilidad. Algo le pasa y no sé cómo puedo ayudarla-

- Y si simplemente está estresada?-

- Eso fue lo que ella me dijo pero no me convence. Archie... la conozco demasiado bien. No sabes cómo quisiera... quisiera estar con ella, abrazarla y decirle lo mucho que... lo mucho que la amo- Confiesa Jughead con tristeza.

- Jughead... por qué no regresas con ella?- Pregunta Archie.

- Es que no la merezco. Siempre que intento hacer las cosas bien termino lastimándola. Creo que ella está mucho mejor sin mi-

- Yo no creo que eso sea verdad amigo. Porque ella también te extraña y estoy seguro de que te necesita-

- Desde cuando sabes dar consejos sobre este tipo de cosas?- Pregunta Jughead divertido.

- Porque tengo esposa?- Responde Archie riendo.

- Idiota- Dice el pelinegro riendo.

- Hermano... tengo que volver a Riverdale High. Piensa en lo que te dije porque tú y Betty merece otra oportunidad- Se despide Archie poniéndose de pie.

- Adiós zanahoria- Se despide Jughead viendo a su mejor amigo salir de Pop's. Continuó escribiendo su nuevo libro pero las palabras de Archie daban vueltas en su cabeza.

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Betty terminó su trabajo y salió de la empresa despidiéndose de todos los empleados. Cuando salió del edificio y se dirigía a su auto se encontró con alguien que la hizo temblar de miedo y ponerse nerviosa.

- Hola Elizabeth. Vi tu auto estacionado frente a esta empresa. No sabía que trabajabas aquí- Dice Leonardo apoyado sobre el auto de Betty con los brazos cruzados.

- Tú... tú... qué quieres? Que... qué estás haciendo aquí?- Pregunta Betty temblando muy nerviosa. Ese hombre le da miedo.

- Eres tan bella... y tan dulce... no he podido sacarte de mi cabeza y vine a suplicarte que me des otra oportunidad- Pide Leonardo acercándose a ella.

- Yo... yo... tengo que... tengo que ir por mi hija a su colegio ahora- Responde ella.

- Pues será otro día muñequita- Dice Leonardo guiñándole un ojo.

Betty entró a su auto. Lo encendió y condujo muy nerviosa por su encuentro con ese hombre. Llegó al jardín de niños y bajó los los vidrios del auto para llamar a su hija.

- Addison! Ya nos vamos- Habla Betty desde adentro del auto.

- Ya voy!- Responde la niña despidiéndose de sus amigos para luego ir hacia su madre. Entró al auto muy contenta.

- Por que tan contenta mi vida?- Pregunta Betty empezando a conducir.

- Porque me gusta la escuela. A veces me ponen mucha tarea pero me gusta cuando nos dicen que vamos a dibujar- Responde la menor muy emocionada.

- Eres muy buena mi niña. Te llevaré al parque-

- Si mami! Eres la mejor mami del mundo- Chilla Addison.

Betty condujo hasta el parque. Bajó del auto junto a su pequeña y al llegar a los juegos infantiles del lugar, Verónica también estaba allá mirando a su hijo jugar en dichos juegos.

- Verónica!- La saluda Betty sentándose a su lado.

- Betty! Que gusto verte- Responde la pelinegra abrazándola.

- Hola tía Verónica. Mami voy a jugar- Avisa la niña.

- Adelante amor. Para eso te traje- Contesta Betty.

- Diviértete princesita. Mateo te espera- Agrega Verónica.

Addison fue a jugar con Mateo a los juegos infantiles del parque y Betty y Verónica miraban a sus hijos jugar.

De repente empezaron a salir lágrimas de los ojos de la rubia y la pelinegra la miró con preocupación.

- Betty... te encuentras bien? Que tienes? Por qué lloras?- Pregunta Verónica mirándola confundida.

- Verónica... yo... yo...-