Osano aún estaba algo mareado, sentado en la esquina de su cama. Pese a los mareos,se sentía mucho mejor. Diría que se siente algo mareado por todo el tiempo que pasó en cama. Tres días en proceso de desintoxicación.
Se paró con esfuerzo de ahí y levanto su celular del escritorio.
¡¿4:30 P.M?! ¡Es tardísimo! Perdió gran parte de su día. O quizás todo el día.
Con cuidado de no caerse,bajo por las escaleras sosteniéndose del barandal de estás mientras caminaba lentamente.
Su cabello estaba (con poco esfuerzo),atado en una coleta baja algo despeinado. Vestía ropa casual y unas sandalias.
Fue a la cocina mientras escuchaba en la sala a su prima pelinaranja gritar un par de cosas. Estaba acostumbrado a ello, aunque ahora estás enfermo lo irrita de sobremanera.
Se acercó a la nevera y la abrió,se giró a buscar un vaso para beber algo de agua: se encontraba sediento,todos esos medicamentos resecan su garganta o dejan un sabor amargo. En eso,siento a alguien entrar a la cocina detrás de él.
– Oh, Osano-kun,hola– saludo un pelinegro – Veo que lograste bajar ¿Te sientes mucho mejor?– pregunto mientras se acercaba al estante a buscar algo entre las gavetas.
Siempre le dijo a Osana cuánto apoyaba su sentir por Taro,pero si hubiera sido honesto le hubiera dicho que siempre siente ese algo extraño en él. No la cae mal, más tampoco bien,tiene sus sospechas.
Nisiquiera lo miro y respondió:
– Eh,si. Estoy bien,gra-gracias– Y se colocó el vaso de agua en sus labios.
– Yo tenía una pregunta,bueno tengo– corrigió – Esa muchacha que vino a visitarte hace poco... ¿Desde cuándo la conoces?–.
Osano sintió sus mejillas algo calientes de inmediato ¿Acaso insinuaba algo romántico entre ellos? Tan solo recordarla visitarlo... Lo hacía sentir eso en su pecho, felicidad.
– ¿P-para qué quieres saber?– preguntó.
– La he visto antes,estudiaba en Akademi ¿Te contó sobre su vida ahí? – pregunto aún más interesado. Movía sus manos un poco,nervioso.
– Si... – respondió dudoso.
Enrealidad si,si le había dicho que estudio ahí más no le dijo de sus experiencias ahí.
– ¿No te dijo como era ahí?– preguntó algo más inquieto.
– No se,no me importa– respondió hartó. Luego,se fue de ahí.
Taro Yamada estaba asustado. Siempre h sentido algo en Osana como de que esté no le cae bien aunque ahora es mucho más evidente ¿Ayano le habrá contado algo?
Pero,¿Qué tenía ella para contar?
Quizás le contó como ella fue rechazada por él. Aunque, enrealidad no es eso que le inquieta. Sino,los chismes que surgieron luego de ello. ¿Cuáles? Los que el mismísimo Taro se encargó de divulgar.
Solía recalcar lo rara que es,lo mucho que le sorprendió su declaración; su extraña y para nada llamativa apariencia y que al no estar en ningún club,no era interesante.
Desconoce si alguna vez llegó esto a sus oídos,si alguna vez con el famoso "info-kun" haya visto su estatus de reputación baja. Desconoce todo. Solo sabe que unos meses después del verano al volver a la escuela,ella ya no estaba. Se había cambiado de escuela.
Le contó a Osana sobre un rechazo que hizo a una chica sin embargo,jamás menciono su nombre u apariencia. Le daba vergüenza quedar mal con ella.
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𝐏𝐫𝐞𝐭𝐞𝐧𝐝𝐞𝐦𝐨𝐬 𝐏𝐫𝐞𝐭𝐞𝐧𝐝𝐞𝐫𝐭𝐞,𝐀𝐲𝐚𝐧𝐨 - Male Rivals.
Bí ẩn / Giật gânUn día más en la vida de la azabache, sentada bajo el cerezo con un sobre hecho trizas en sus manos. Tiene lágrimas que salen de sus brillantes ojos negros. Había sido rechazada por su primer amor. - Tranquila, Aya, encontrarás alguien mejor. El mun...