El Tritón y El Pescador [TodoBaku] +Omegaverse+

Una fiesta arruinada.

***
La stripper bailaba sensualmente, queriendo acortar la distancia con el alfa. Pero el bicolor no se lo permitía.

—Vamos, no seas tímido, cielo~

—No soy tímido, es sólo que no te quiero cerca.

La respuesta del alfa ofendió a la mujer, quien contraatacó diciendo:

—¿Por qué?—No entiendo tu rechazo, ¿no soy hermosa acaso?—Dijo guiñándole un ojo y moviendo sus caderas.

—No, de hecho, eres bastante vulgar.

Su comentario indignó a la omega, quien paró de bailar y también la música.

—¡¿Cómo te atreves a decirme eso?!—¡Yo soy considerada la stripper más hermosa de este local!

—Entonces aquí han de ser todas feas.

Sintiéndose humillada, gritó:

—¡Se acabó! ¡No pienso bailar para ti!

—Gracias, creí que no ibas a parar.—Dijo Shōto aliviado.

Ella apretó los puños y se fue enfadada de allí.

—¡Idiota!—Grito la mujer saliendo del cuarto privado.

Una vez que ya se hubo ido por completo, Todoroki miró a Hanta y a Denki con un notorio enfado en su rostro.

—¡¿Por qué me habéis traído a un sitio como este?!

Sus dos amigos agacharon la mirada avergonzados y dijeron a la vez:

—Lo sentimos.

Sin embargo, su respuesta no minimizó el enfado del alfa.

—¿Qué lo sentís?—Vosotros sabíais que estaba en contra de esto y aún así ignorasteis lo que dije.—Estoy muy disgustado, quiero ver a mi omega.

—De acuerdo, te llevaremos con él.—Dijo Sero.

Entonces, los cuatro salieron de allí en silencio pues el ambiente no estaba para bromas.

"Son unos idiotas. ¿Qué pretendían con esto? No entiendo a los humanos."—Pensó Momo, quien caminaba junto al extritón.

***

Tras un rato caminando, llegaron a casa de Mina y tocaron a la puerta.

>¿Quién es?

Respondió Kirishima.

—Somos nosotros, abre.—Dijo Shōto.

Al reconocer la voz, Eijirou abrió la puerta.

—¡Hola! ¿Qué tal la noche?—Habéis vuelto bastante temprano...

—Que te lo cuenten ellos.—Dijo señalando al de cabellos azabaches y al rubio con el mechón negro.—Yo voy a entrar a buscar a mi omega.

—Yo también pasaré, Kyoka está dentro.—Dijo Yaoyorozu.

El pelirrojo permitió que ambos alfas entrasen y luego miró a sus dos amigos.

—¿Qué habéis hecho esta vez?—Cuestionó cruzando los brazos y mirando con seriedad a los dos chicos.

—Nosotros...—Comenzó diciendo Kaminari.—La cagamos.

—Explícate.

—Eh... Pues... Contratamos a una stripper...

Eijirou no necesitó escuchar nada más.

—Sois unos idiotas.—¿Por qué lo habéis hecho?

En esta ocasión respondió Sero.

—Kirishima, nosotros no teníamos mala intención. Solamente queríamos gastarle un broma haciendo que se sintiera incómodo.

—¿Te das cuenta de lo mal que suena?—Se supone que una despedida de soltero es para pasarlo bien, no para fastidiar al novio.—Además, ¿no se os ha pasado por la mente cómo se va a sentir Bakugou cuando lo sepa? Pensaba que tú eras el inteligente de la relación pero veo que ninguno de los dos lo sois.

Después se hizo silencio hasta que el de ojos dorados habló de nuevo.

—Tienes toda la razón, ahora nos vamos a disculpar con...

Y entonces se escuchó el siguiente grito:

—¡¿Qué esos idiotas han contratado a una maldita stripper?!

Era la voz de Katsuki y se notaba a kilómetros que estaba muy enfadado.

—Ahora sí que estamos jodidos...—Dijo Hanta junto a su novio esperando a sufrir la furia de su amigo.

***
El rubio cenizo salió dispuesto a golpear a sus dos amigos.

—¡¿Cómo os habéis atrevido?!—Gritó poniéndose frente a ellos.

—Ba-Bakugou, ¡n-no lo hicimos con mala intención!—¡Lo juro!—Dijo Kaminari.

—¡Por favor, no nos pegues!—Suplicó Sero.

Mas sus súplicas no surtieron efecto y el omega acabó descargando su ira en ambos, les preguntó:

—¿Habéis aprendido la lección, basuras?—Cuestionó observándolos con odio.

—¡S-sí! ¡Perdónanos!—Dijeron.

—Tks, me lo pensaré.—Vámonos, Shōto.

El alfa se acercó a su prometido y les dirigió una mirada de disgusto a Hanta y a Denki.

—Sí, Mi Katsuki.—Dijo pasando uno de sus brazos por los hombros de su novio.

Entonces se alejaron de la casa de Mina. Kirishima, quien los había visto irse, suspiró y dirigió su mirada a los dos amigos que se encontraban en el suelo.

—¿Estáis bien? ¿Necesitáis ayuda?

El beta y el alfa se incorporaron fue Sero quien respondió:

—Pues... Estaría bien si me dejaras un hielo para ponerme en la frente.

—Eh... Vale, iré por un hielo para ti.—Luego miró al de ojos dorados.—¿Y tú no necesitas nada, Kaminari?

—U-un vaso de agua.

—De acuerdo, enseguida vuelvo.

El pelirrojo fue a la cocina y les llevó a cada uno lo que habían pedido.

—Espero que después de esto; os penséis las cosas dos veces antes de hacerlas.

—Sí, no volveremos a hacer algo así.—¿Verdad, Denki?

—Sí, jamás haremos algo parecido a esto.—Hemos aprendido la lección.

Cuando los novios se hubieron recuperado, preguntaron por sus amigas.

—Bakugou y yo dejamos a Jirou y a Ashido en la cama de ella.—Aunque no sé si seguirán dormidas.

Giró su cabeza y vio a Momo cargando en sus brazos a Kyoka.

—Yaoyorozu... ¿Puedes con ella? ¿Necesitas ayuda?

—No, no será necesario Kirishima-kun. Pero gracias por el ofrecimiento.—Aseguró esbozando una sonrisa amable.

—Como digas...

La alfa se despidió de todos ellos y se marchó con su novia. Los tres se quedaron solos y supieron que debían irse, mas no lo harían sin antes comprobar que la de cabello rosado se encontraba bien.

Afortunadamente ella estaba dormida en su cama, por lo que supieron que no tenían de qué preocuparse y se fueron a sus casa tras una noche arruinada por una estupidez.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!