Bebés.

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***
Durante el tiempo que Katsuki estuvo dormido, no se escuchó ni el sonido el sonido de una mosca.

"Qué lindo se ve. Podría estar mirándolo todo el día."—Pensó con una expresión que reflejaba lo enamorado que estaba de su esposo.

Minutos después, aparecieron dos enfermeras con los bebés en brazos  los cuáles lloraban debido a que tenían hambre.

Por supuesto, esto despertó inmediatamente al omega, quien no tardó en tenerlos en sus brazos para amamantarlos.

—Sí que tienen hambre, están succionando mis pezones con fuerza.—Comentó Katsuki.

—No te preocupes, es normal. Ellos necesitan mucha energía.—Le respondió una de las enfermeras.—Por cierto, no les toquen el cordón umbilical, ya se les caerá por sí solos.

—De acuerdo.—Contestaron los dos.

Las enfermeras se fueron y el matrimonio se quedó en la habitación con los bebés.

Shōto no dejaba de observar a sus pequeños, fijándose en que Kaito, el que nació primero; tenía un poco de pelo y éste se parecía al suyo.

En cambio el cabello de Asahi, se parecía al de Katsuki.

"Curioso. Me pregunto qué color de ojos tendrán."

Un rato después, los bebés ya estuvieron satisfechos.

—Por fin ya terminaron de comer.—Dijo el omega colocándose bien la bata de hospital para luego limpiar  las caras de sus hijos con cuidado.

—Desde luego con los pechos que tienes ellos no van a pasar hambre, estarán bien nutridos.—Dijo con tono coqueto.

—¡P-pervertido!—¡Ni creas que me los vas a tocar o algo así!

—¿No?—¿Por qué?

—Porque la leche es para los bebés.

—No hay problema, yo no quiero la leche. Quiero tocar tus pechos.

—¿Ah? ¿Y eso por qué?

—Pues... Para ayudarte con el peso, no sé, tal vez puedan llegar a dolerte y a lo mejor nuestros hijos en ese momento no tengan hambre.

El extritón lo miró con expresión suplicante y el rubio cenizo dijo:

—Pero no te referirás a tocarlos aquí y ahora, ¿verdad?

—No, me refiero a cuando volvamos a casa.

—Me lo pensaré.—Aunque sabes que me tendré que quedar unos días en el hospital, ¿cierto?

—Sí, ¿cuántos?

—No lo sé, los que diga el médico.—¿Podrías llamarlo?

—Sí, voy.

El alfa se levantó del taburete y fue a buscar al médico, con el cual volvió minutos más tarde.

—¿Qué tal? ¿Se encuentra bien?

—Sí pero, ¿qué hay de mis hijos? ¿Las pruebas salieron bien?

—Sí, muy bien. Son dos varones muy sanos.

Katsuki se sintió feliz al escuchar eso y le preguntó al doctor:

—¿Cuándo podré volver a casa con mis hijos?

—Mmm... Yo diría que en unos cuatro días, aunque depende de qué tan rápido se recupere lo suficiente como para no requerir atención médica.—¿Por qué lo pregunta? ¿Le urge volver a su casa?

—Sí, desearía estar allí.

—Es comprensible pero acaba de dar a luz, debe tener paciencia.

El omega sabía que el doctor tenía razón, así que no replicó.

—Doctor.—Dijo Shōto de repente para llamar la atención del beta.

—Diga, ¿tiene alguna duda?

—Sí, quería saber si puedo quedarme aquí con mis hijos y mi omega.

—Eh... ¿Tiene permiso en el trabajo?

El bicolor se quedó callado y serio durante unos segundos para responder:

—No, ¿hay que pedirlo?

Katsuki miró al idiota de su esposo y le regañó:

—¡Pues obvio!—¡¿Qué clase de pregunta estúpida es esa?!

Al gritar, los bebés comenzaron a llorar.

—Tks, mierda.—Se quejó tomando a Kaito a la vez que su marido tomaba a Asahi para calmarlo también.

El médico suspiró y le dio el siguiente consejo al de ojos rubí:

—Intente no alterarse tanto, sus hijos necesitan tranquilidad.

—Sí, sí, ya lo sé.

—Si no tienen nada más que decirme,  me retiro.—Tengo a más pacientes que atender.

Y como ninguno tenía nada que decirle, se marchó mientras los padres primerizos intentaban calmar a sus retoños. Objetivo que les costó bastante.

—Shōto, antes de decidir si quedarte aquí, llama al jefe o sino te despedirán si faltas injustificadamente.—Le dijo a la vez que depositaba a Kaito en una de las pequeñas cunas.

—Sí, voy a llamar a Hakamada en cuanto haya dejado a Asahi en la cuna.

—De acuerdo.

Entonces dejó al bebé y agarró su teléfono para contactar con el rubio.

"Espero que me dé permiso. Quiero estar con mi familia."—Pensó mirando a Katsuki y a los bebés.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!

El Tritón y El Pescador [TodoBaku] +Omegaverse+Donde viven las historias. Descúbrelo ahora