El Tritón y El Pescador [TodoBaku] +Omegaverse+

Tiempo entre hermanos.

***
Los dos hermanos Todoroki nadaban juntos y con extrema precaución, Touya no quería distraer mucho a Shōto mas necesitaba hablarle.

—Así que tu omega es un humano...

—Sí, ¿algún problema con eso?

El mayor sonrió.

—No, ninguno. Siempre supe terminarías siendo un rebelde como yo.

—¿A qué te refieres?

—Pues a que harías algo que enfadaría mucho a nuestro padre y me ha sorprendido que me hayas superado, porque no hay nada que odie más que a los humanos.

—Lo sé pero esto no lo hago por rebeldía, sino porque amo a Katsuki.

—No he insinuado lo contrario, te conozco y sé que no eres un tonto.—Ahora dejemos de hablar del viejo y cuéntame sobre tu omega.

—Está bien.—Él se llama Katsuki Bakugou, tiene diecisiete años y es pescador.

—¿Y cómo es físicamente?

—Su pelo es rubio y despeinado, tiene ojos de color rubí. Es musculoso; menos alto que yo, piel clara. Katsuki es el omega más hermoso de todos.

—Por lo dices él parece ser bastante atractivo y rubio, como a mí me gustan~

En ese momento el bicolor le miró molesto.

—No te atrevas, ¡Katsuki es mío, sólo mío!

—Ja, ja , ja.—Tranquilo, Shōto. No te lo quitaré, sabes que tengo a Hawks; ¿recuerdas?

—¿Hawks? No lo recuerdo.

—Tal vez no lo hayas recordado por el apodo pero su nombre es Keigo.

—Keigo...—Intentó hacer memoria y tras unos segundos, lo recordó.—Creo que ya sé quién es. Su apellido es Takami, ¿no?

—Era, ahora se apellida Todoroki.—Dijo orgulloso.

—¿Te casaste con él?

—Por supuesto.

—Felicidades.

—Gracias pero hay algo más que quiero decirte.

—¿El qué?

—Keigo y yo, seremos padres en breve.

El alfa más joven se mostró sorprendido.

—¿E-en serio?—Enhorabuena, hermano.

—Gracias, hermanito.— Aunque es una lástima que tal vez no los vayas a conocer...

—¿Por qué? ¿Acaso no vas a ir al mundo humano nunca para visitarme?

—Lo intentaré, sin embargo; no sé si será seguro para los niños.

—Ya veo...

Entonces se quedaron en silencio hasta llegar a una intersección.

—Vamos hacia la derecha, Shōto. Así llegarás en un día la pueblo.

—¿De verdad?

—Sí, tu camino será más corto si vas por aquí.

—No lo sabía, gracias por decirme.

El de ojos desiguales iba a seguir avanzando, sin embargo, notó que su hermano mayor había parado.

—¿No vienes, Touya?

—No, sólo puedo acompañarte hasta aquí. No quiero dejar a Keigo solo.

—De acuerdo, nos veremos algún día.

—Eso espero. Adiós y mucha suerte.

—Adiós, hermano.

Se despidieron con una sonrisa y Shōto continuó su camino.

"Espérame, Katsuki. Enseguida estaré contigo."

***
Katsuki y Kyoka se encontraban en el centro de terapia en el que estaba internado Masaru, los dos se aproximaron a recepción para preguntar por el adulto.

—Buenos días, ¿están permitidas las visitas a esta hora?—Preguntó Bakugou.

—Depende, ¿a quién queréis visitar?—Cuestionó la recepcionista.

—A Masaru Bakugou, es mi padre.

—Umm... Voy a comprobar que no tenga ninguna actividad ahora.

—De acuerdo.

Ambos esperaron mientras la mujer tecleaba en su ordenador.

—Tenéis suerte, está libre en estos momentos.—Sin embargo antes debo comprobar vuestras identidades.

En ese instante, mostraron sus carnets y le explicaron quienes eran para que supiera del parentesco o no, que tuvieran con el de cabello castaño.

—Él está en la habitación 47, segunda planta, al final del pasillo.

—Vale, gracias.

—De nada, chicos.

Los dos jóvenes se marcharon de allí y se dirigieron a la habitación de masaru.

***

A los pocos minutos llegaron a la habitación, llamando a la puerta antes de entrar.

>Adelante.

Katsuki abrió la puerta y saludaron al beta.

—¡Hola, Katsuki, Jirou!—¿Qué tal estáis?

—Bien, papá.—¿Cómo estás tú? ¿Te tratan bien aquí?

—Sí, estoy bien aquí. Hago bastantes actividades porque quieren mantenerme ocupado para que no piense demasiado en temas que puedan entristecerme.

—Eso es bueno, tu mente debe estar activa para no caer en la tristeza.

—Lo sé, hijo.—Por eso intento esforzarme.

El omega observó a su padre y sonrió feliz al notar a su padre de buen ánimo.

—Por cierto, Katsuki. ¿Dónde está Todoroki?

Katsuki se puso un poco triste y le dijo:

—Él se fue con unos guardias de su padre porque éste le buscaba, no tengo ni idea de cuándo volverá.

Masaru se sintió muy culpable, mas quiso arreglar la situación.

—Lo siento, Katsuki. No quise deprimirte.—Se disculpó tomando una de las manos del omega.

—No te preocupes, tú no lo sabías.

—Lo sé pero, de todos modos, yo creo que volverá por ti porque él te ama de verdad.—Créelo.—Dijo tomando la mano derecha de su hijo a la vez que lo miraba a los ojos.

—Yo también sé que volverá pero lo echo de menos...

—Es lógico, ahora estás unido a él.—Por ello debes ser fuerte y esperarlo, no decaigas.

—No lo haré, lo prometo.

La omega los observaba y sonreía al ver el fuerte vínculo que padre e hijo poseían.

"Definitivamente fue buena idea venir aquí."

Tras aquel emotivo momento; hablaron de otros temas más amenos. Ambos permanecerían cerca de una hora, instante en el que tuvieron que marcharse debido a las actividades de Masaru.

—Adiós, viejo.—Nos vemos.

—Adiós, hijo.

Kyoka también se despidió del padre de su amigo y se marchó junto al rubio cenizo.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!