El Tritón y El Pescador [TodoBaku] +Omegaverse+

Antes de la boda.

***
Shōto y Katsuki caminaban hacia su casa, cuando el omega comenzó a olisquear a su prometido.

—Katsuki, ¿por qué me estás oliendo?—Preguntó confundido.

—Estaba comprobando que no tuvieras impregnado el olor de esa zorra.—Dijo refiriéndose a la stripper.

—Supongo que habrás notado que no.

—Sí, no llevabas ningún olor desconocido. Bien hecho.—Dijo para darle un beso en la mejilla.

En ese momento, Todoroki lo frenó y lo agarró suavemente de la cintura, mirándolo directamente a los ojos para decirle:

—¿Y no crees que merezco un premio por haber sido un buen chico, Mi omega?

Bakugou esbozó una sonrisa traviesa y le respondió:

—Mmm... Ya veremos, lo pensaré.

—En tal caso, esperaré tu respuesta cuando lleguemos a casa.—Dijo dándole un beso.

Continuaron su recorrido en silencio hasta que llegaron a su hogar.

—¿Y cuál es tu decisión final, Katsuki? ¿Me premiarás por ser un buen esposo?—Cuestionó acercándolo a su cuerpo.

—Por supuesto~

Comenzaron a besarse apasionadamente, acariciándose mutuamente y empezando a quitarse la ropa.

—Espera, Shōto.—Vamos al dormitorio.

El bicolor no de opuso y el rubio cenizo lo tomó de la mano para llevarlo al cuarto.

—Siéntate en la cama, alfa.

—Como quieras pero... ¿Haremos el amor hoy?

—No, prefiero descansar y hacerlo en la noche de bodas.

—Ah... ¿Y entonces qué me vas a hacer?

—Ahora lo sabrás, siéntate.

—Ok.

Todoroki obedeció e hizo lo que su omega le había dicho.

A continuación, Bakugou se acercó a su amado y se puso de rodillas para empezar a desabrochar el pantalón del contrario. Luego le bajó la ropa interior y comenzó a lamer la virilidad de éste.

—Aah... Katsuki...—Gimió el alfa al poco de el de ojos rubí iniciase su tarea de darle placer.

El omega, por su parte, observaba a su prometido. Quién tenía el rostro sonrojado y no hacía otra cosa que jadear y gemir.

"Shōto es tan jodidamente sexy. Todavía no puedo creer que sea mío."—Pensó sin apartar su mirada de él.

—Ah... Aah... ¡Katsuki!—Gritó cuando su pareja se introdujo su miembro en la boca.

Bakugou cada vez se excitaba más, por lo que no pudo aguantar las ganas de masturbarse mientras le hacía sexo oral a su futuro marido.

"Demasiado excitante."-Pensó notando que, cada vez más, la respiración del de ojos desiguales se iba acelerando.

—Omega... Aaah... ¡Ah!

Era obvio que Todoroki no iba a durar mucho más, así que el omega se sacó pene de su alfa y lo masturbó, a la vez que se lo hacía así mismo, hasta que alcanzó el clímax.

—Katsuki... ¿Estás bien? ¿Ne-necesitas que te ayude?—Cuestionó a la vez que trataba de normalizar su respiración.

El rubio cenizo se fue levantando y le contestó:

—No es necesario, ya me he masturbado mientras te la estaba chupando.

—¿En serio?—No me di cuenta. Qué rabia.

—¿Rabia? ¿Por qué?—Preguntó sentándose junto a Shōto.

—Porque seguro que ha sido una imagen demasiado erótica y amo verte cuando estás sintiendo placer.

—Es igual, ya me verás así en otra ocasión.—Ahora vamos a dormir, tenemos que estar descansados para para mañana.

—¿Por qué? Si la boda no es mañana.

—No, pero tengo que ir a hacerme una revisión del embarazo para comprobar que todo está bien con el bebé.—Además de organizar el viaje de luna de miel.

—Vale, lo entiendo.

Seguidamente, se asearon y luego se pusieron el pijama. Quedándose dormidos mientras se abrazaban en la cama.

***
Era ya el día antes de la boda y se dirigían hacia el médico para hacer la revisión. Al entrar en la clínica, tuvieron que esperar unos minutos hasta que llamaron a Bakugou para pasar a la consulta.

—Buenos días, Bakugou.—¿Qué tal lleva el embarazo?

—Bastante bien, apenas sufro molestias.

—Me alegra oír eso, ahora vamos a comprobar el estado de los bebés.—Así que, levántese la camiseta, por favor.

El rubio cenizo lo hizo y el médico le empezó a extender una crema sobre su vientre antes de la ecografía. Acción que no agradó a Todoroki, quien sentía celos al ver a otro tocando a su omega.

"Tranquilo Shōto, lo hace porque es necesario. No porque quiera tocar a tu omega."—Pensó apretando los puños para intentar contenerse.

—Parece que está todo bien.—Dijo el médico mirando la ecografía.

Katsuki miraba también a la pantalla y, de repente, tuvo ganas de saber más de sus futuros hijos:

—¿Se puede saber ya el sexo de los bebés?

—Está de poco más de cuatro meses, así que pienso que podríamos intentarlo.

—De acuerdo.

En ese momento, el adulto hizo su mejor esfuerzo para intentar averiguar si los bebés eran niños, niñas o si cada uno tenía un sexo. Después de unos minutos pudo confirmar lo siguiente:

—Son dos varones, enhorabuena.

Entonces el rubio cenizo se volteó a ver a su prometido para hablarle:

—¿Has oído, Shōto? ¡Son dos niños!—¿Estás feliz?

El extritón sostuvo una de las manos de su amado para besarla y decirle:

—Por supuesto.

Se sonrieron con ternura por unos segundos y después el omega empezó a conversar con el médico.

—Doctor, ¿ya ha terminado?

—Sí, tome estos pañuelos para limpiarse.

El omega los tomó con la intención de limpiarse, mas su prometido insistió en hacerlo él.

—Déjame que me encargue.

Katsuki suspiró y le contestó:

—Está bien.

El alfa simplemente sonrió y empezó a limpiarlo cuidadosamente mientras que Bakugou lo miraba con cariño.

"Shōto será un gran padre."

Unos minutos más tarde había acabado de quitar aquella crema del vientre de su prometido; luego éste se puso bien la camiseta y se marcharon a una agencia de viajes para planear acerca de su destino, que sería Kioto.

Cuando lo hicieron, se dedicaron a intentar relajarse el resto del día antes de su gran día. El cual no dudaban que sería maravilloso.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!