Capítulo 49: Un partidillo

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VANESSA

-Dios mío, Vanessa -me dice Danna

Se acercó a mí y me dió un abrazo.

La mañana siguiente de mi discusión con Josh, los chicos se pasaron por mi cabaña. Le pedí a Dylan que no dijese nada, que yo quería contarlo personalmente. Fue el primero en enterarse, ya que cuando me fui con él, me preguntó qué me ocurría de camino a mi cabaña.

-Pobrecitos -dijo Irene

Comencé a llorar cuando recordé la escena de ayer. Todos se me echaron encima a darme un abrazo.

-¿Quién dijo la última palabra? -me preguntó Anthony- ¿Él?

Me quedé callada, y Cris me miró.

-Siendo como eres... -dijo Cristina

-¿Y que querías que haga? Vale que me he portado mal con él, pero eso no significa que me vaya a quedar atrás. Nadie me ha podido callar en mi vida, así que no va a venir un chico y me va a poner a sus pies.

-Ya vuelve la Vanessa de piedra de hace dos meses... -dijo Danna

-Siempre he sido así, no sé qué te sorprende

-Se sorprende porque Josh te cambió, Vanessa -dijo Dylan- Al principio eras dura, no te importaba lo que te digeran sobre tu forma de ser, tu pasabas olímpicamente, ¿o no recuerdas cuando Josh te pidió tus datos? Sin embargo empezaste a enamorarte de él, y cambiaste. Te volviste más tontorrona, más sensible... más como una chica.

Sonreí con tristeza.

-Me estáis dando a entender que cuando me conocisteis era una amargada -dije

Estallaron a carcajadas.

-Eso no es lo que estaba intentando decirte -rió Dylan

Me senté en mi cama, y puse las pierna como los indios. Cristina se sentó en el filo de mi cama.

-Quiero que seas sincera conmigo, pero sincera sin cabezonería -me pidió

-Está bien... -dije- ¿Que quieres saber?

-¿Sigues enamorada de Josh, cierto?

-No -contesté automáticamente.

Danna suspiró, y se sentó en el otro lado de mi cama, apoyando la rodilla en el colchón.

-Vanessa, deja a un lado tu orgullo y di la verdad -me dijo buscando mi mirada

Agaché la mirada, y comencé a juguetear con el cojín que tenía al lado.

-¿Tanto se me nota? -dije

Todos hicieron una media sonrisa.

-¿Por qué cometiste el error de dejarlo, Vanessa? -me preguntó Irene

-¡Pues porque piensa que le estoy gastando una broma! -salté- ¡Yo no juego con los sentimientos! Vale que a veces soy una perra con la gente... -me miraron con una ceja elevada- ¡Pero no hasta tal punto!

-Puedes intentar hablarlo con él

-No me quiere ni ver, Anthony, menos todavía hablarme -dije mirándolo- Además, es verlo, y se me hace un nudo en la garganta. No tengo las cosas claras en mi cabeza...

-Vane, no podéis acabar con algo tan bonito que el verano a hecho... -dijo Irene

-Si con el verano empieza, con el verano acaba -dije cruzándome de brazos- Me da igual las tonterías que ronden por mi corazón, no voy a volver a sufrir por amor.

Summer love Memories [Wattys 2015]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora