Summer love Memories [Wattys 2015]

Capítulo 34: ¡Tú ni te acerques!

VANESSA

Danna me dió un golpe en el brazo, bien disimulado.

-¿Qué me he perdido? -me susurró

Allí no le iba a contar nada, así que le sonreí, para darle una pista, y seguí mirando hacia delante.

Josh no me quería recordar como una cualquiera, como otra más en su lista. Cada día me da más razones para que me guste. Quién iba a decir que de odiarlo, me iba a enamorar... La vida da giros de 180 grados que no te esperas, pero que te acaban gustando.

Entramos en la Barbacana, que aún no estaba muy llena. Todos estarían cansadisimos del día de ayer. Fuimos a la mesa en la que siempre nos sentamos. Allí ya estaban sentados Anthony y Dylan. Tomamos asiento, y las chicas empezaron a hablar con ellos. Yo estaba medio dentro, medio fuera de la conversación. Me costaba concentrarme. Josh no estaba con nosotros, estaba con los demás monitores, concretamente hablando con PJ. No podía dejar de mirarlos. Corrijo: mirarlo.

Al cabo del rato, llegó Mia, y le dió un enorme abrazo a Josh. Maldita. Empecé a apretar mi puño derecho, haciendo que mis nudillos se pusieran blancos.

-¿Estás bien? -me preguntó Cristina

-Perfectamente -contesté

Volví a dirigir la mirada hacia ellos. Ahora ella se había metido en la conversación de PJ y Josh. Esta se cree la reina de aquí, o algo por el estilo. Quité la mirada de ellos, si no quería acabar con mis uñas clavadas en las palmas de las manos. Intenté meterme en la conversación que tenían mis amigos. Estaban hablando de sus anécdotas que han tenido en la playa. Con algunas no pude evitarme reír.

-¿Y qué querías que le hiciera? -dijo Danna

-No sé -respondió Dylan irónico- Algo más romántico que dejarle caer todos los batidos encima de la toalla

-Cuando una babea no hay salida más frecuente que cagarla -saltó Cristina

-¿Tan bueno estaba el vendedor? -pregunté

-No veas, Vane, ¡estaba para comérselo! -respondió Danna

Como ya estábamos todos, empezaron a servir el desayuno. Nos trajeron, como todas las mañanas, un par de jarras de leche, cereales o tostadas. Ví por el rabillo del ojo que alguien estaba retirando la silla que tenía a mi izquierda. Josh se sentó, y puso su plato con las tostadas en la mesa. Cogió la mantequilla y empezó a untarla.

-Sé que el desayuno de hoy no te está pareciendo tan glamuroso como el de ayer -dijo, mirándome por fin

Sonreí.

-Y dudo que igual de rico -dije, y le dí un bocado a mi tostada

Mientras comíamos, estuvimos hablando un poco.

-¿Pero que haces aquí? -dijo Mia, rodeándole el cuello con sus brazos por detrás- Deberías estar allí haciéndonos compañía -estaba hablando con un tono muy sensual. Vendida.

-Hoy desayuno aquí -dijo quitándose los brazos de Mia

-¿Y eso? -insistió

-Pues porque quiero estar acompañada de mi queridísima amiga Vanessa -contestó

Nada más escuchar esas palabras, el corazón se me aceleró. Prefería estar conmigo. Mia me lanzó una mirada asesina, y se fue. Respiré con tranquilidad.

-¿No te molestará mi compañía no? -dijo Josh

-Se puede aguantar -dije para chincharlo

Sonrió y bebió de su vaso de leche.