We fell In Love In October •Soongyu•

Capítulo 6: botas de plataforma

POV Hoshi:

  —¡Mingyu!—su amigo que se veía claramente extrangero se levantó y lo abrazó—te ves mucho mejor que cuando te dejé. Tenía tanto miedo de dejarte chico...
  —idiota soy mayor que tú.
  —como sea... ¿Quién es tu amigo?.
  —oh... Hoshi Kwon—me presenté ofreciéndole mi mano.
  —Hansol Vernon ¿conociste a Mingyu...?—su acento era muy marcado, intenté pensar en lo que habría podido decir después pero preferí buscar la ayuda de Mingyu.
  —sí, él se quedó sin amigos justo cuando yo necesitaba uno y aquí está ahora.
  —¿Hoshi?—sonrió.
  —es Soonyoung, Kwon Soonyoung pero así Mingyu me registró en el club de baile.
  —oh... entonces debes ser realmente especial ¿verdad Mingyu?.
  —cállate. ¿Dónde está tu fastidio?.
  —mi "fastidio" fue a buscar si en el carro trajo tenis, espero que los traiga porque yo no quiero darle los míos.
  —¡Nonnie!—una voz chillona, casi desesperante le gritó—¡mira esto! ¡¿Qué es?! ¡¿Qué les hiciste?!—Vernon miró los zapatos y hasta los tomó.
  —¿están... limpios? Sí, los lavé. Lo siento amor.
  —¿cómo te atreves? Tienen una mancha de tu estúpido café.
  —tú sí estás loca—dijo Mingyu.
  —Mingyu por eso no tienes novia—eso me hizo recordar al intento de beso que tuvimos en el carro—en cambio mi Nonnie es...
  —no tengo novia porque ni si quiera me gustan las mujeres.
  —tú eres un asqueroso.
  —pues si yo soy un asqueroso tu novio es medio asqueroso.
  —¡¿cómo te atreves a decir eso de mi Nonnie?!.
  —amor—Vernon la tomó de los hombros y le dio dinero a lo que él rostro de la chica se iluminó—tengo mucha hambre...—la chica dejó de sonreír, tomó el dinero y se fue.
  —¡no le digas eso Mingyu! Me meterás en problemas con mis padres...
  —a la mierda ¿qué es lo peor que te podrían quitar? ¿El Ferrari?—Mingyu es menor que yo y este tipo es aún más chico ¡¿y tiene un Ferrari?!.
Realmente yo estaba muy atrasado para mi edad a comparación de ellos, o quizá yo solo era pobre que era lo más probable.
  —¡Soonyoung! ¡Kwon Soonyoung!—volteé y vi a Seungkwan correr hacia mi pero entonces se cayó en el pasto.
  —creo que es tu amigo—dijo Mingyu.
  —creo que sí—se levantó y se acercó a nosotros.
  —hola ¿estás bien?—preguntó Vernon—vi que te caíste ¿necesitas sentarte?—lo tomó del hombro y lo acercó a la mesa ofreciéndole una silla.
  —gracias guapo pero me caigo todo el tiempo ¿no es así Soonyoung?.
  —Hoshi, d-dime Hoshi...
  —pero dijiste que solo tu p...
  —Boo siempre se cae... quizá sus rodillas aprendieron ya a rebotar. ¿Q-qué haces aquí?.
  —tengo una cita y me dijo "mira ese chico ¿cómo cuánto medirá?" Y dije ¡no puede se, es mi Soonyoung!—sonrió y miró.a Mingyu—¿como cuánto mides?.
  —poco menos de 1.90—contestó Mingyu y saludó a la mesa de donde venía Seungkwan—uno con ochenta y ocho.
  —y siempre usa esas botas de plataforma—dijo Vernon.
  —como uno noventa y algo...—dijo Boo mirando las botas.
No lo había notado pero era cierto, siempre llevaba esas botas que se veían ya viejas, seguramente igual que la medalla de mi padre tenían un significado para él, por su dinero era obvio que se podía comprar unos zapatos mejores.
La novia de Vernon era un dolor de cabeza, ya entendía porqué Mingyu se refería a ella como el "fastidio" de Vernon pues sí era algo fastidiosa. Empezó hablando de lo enojada que estaba porque Vernon compró en turista y no en primera clase, solo pensé en que yo en mi vida había viajado en avión si quiera y tendría que buscar en clase económica en caso de hacerlo.

Me senté al lado de Mingyu quien tenía un cerillo en la boca. Vernon me dijo que seguro estaría en el techo pero no pensé que literalmente en el techo.
  —Vernon me dijo que estarías aquí.
  —sí el... él siempre sabe es curioso pero ¿sabes qué más es curioso? Qué no me hayas alejado pero tampoco me hayas correspondido cuando te besé.
  —¿sabes que otra cosa es curiosa? Que alguien cargue con una prenda siempre... yo cargo con esto—me saqué de la camisa la cadena que me había regalado mi papá—. Una mañana desperté y papá se ofreció a llevarme a la escuela, acepté y en el camino me la dio y me dijo "es para ti, no se la muestres a tu mamá porque te la robará". Fui feliz porque era algo caro pero cuando regresé a casa papá se había... ido. A mi también me gustaría huir de mamá.
  —quieres que te hable de mis botas ¿no?—suspiró—mi papá las usaba todos los días para trabajar, mamá se las mantenía limpias pero un día mamá llegó con los zapatos más lindos del mundo y le dijo que quería que fuera a la fiesta con esos zapatos, papá accedió y me regaló las botas aunque no fuera necesario—se quedó mirando las botas—. Es horrible como un día están aquí y al siguiente tienes a la familia metida en tu casa reclamando dinero cuando se acaba de perder vidas... yo, en esa situación los mandé a la mierda.
  —lo siento tanto.
  —quiero hablar de lo del beso, de verdad Hoshi yo en realidad quiero volverte a besar pero no sé si tú estarías de a cuerdo.
  —puedes volver a hacerlo.
  —¿y corresponderás esta vez?.
  —para saberlo primero debes besarme—puso su mano en mi nuca y se acercó, titubeó pero pegó sus labios a los míos.
Ni si quiera yo estaba seguro de corresponder pero lo hice, mis labios no podían resistirse más. Por más que mi cabeza supiera que eso estaba mal yo no podía quitar mis labios de ahí, solo deseaba con todo mi ser ese beso.
Al llegar a casa y acostarme para dormir no podía borrar esa sonrisa de mis labios, aún en mi cabeza cuando recordaba sus labios sobre los míos en mi estómago se podían sentir mariposas, podía imaginar perfectamente las mariposas volando con tan solo la imagen de Mingyu en mi cabeza pero si yo estaba feliz había una persona que no sería feliz con esto. Mamá.
Siempre odié el pretexto "es que es de una generación diferente" para referirse a una persona que ejercía cualquier tipo de discriminación. Mamá por ejemplo siempre dice que está agradecida con Dios de que yo no tenga ninguna discapacidad porque de haberla tenido ella me habría dado en adopción ya que no está dispuesta a cuidar a un niño discapacitado, tampoco ama ver extrangeros por la calle y sobre las personas gays...
Mamá era una mujer que mandaría a su hijo a misa de saber qué muy probablemente era gay.

Quizá Mingyu y yo nos haríamos adictos a besarnos pues ahí estábamos en el gimnasio vacío "esperando a los chicos" mientras nos besábamos. No podíamos besarnos en lugares llenos de gente ya que la escuela no lo permitiría.
Sentí que alguien nos estaba viendo y me separé aunque Mingyu parecía no querer hacerlo.
  —Lee Chan—me levanté rápidamente y él sonrió ampliamente.
  —Kim ¿no tienes taller?.
  —s-sí, ya me voy—se despidió con la mano y salió del gimnasio a lo que Dino corrió con emoción hacia mi.
  —pensé que eras heterosexual...
  —eh...
  —¡Mingyu no se te quería despegar! Te ligaste al chico zombie ¡ah!.
  —¿cambiaste de personalidad con The8?.
  —oh no no no, The8 no puede saber qué te comes a besos al chico zombie ¡creo que le gusta!.
  —¡¿qué?!.
  —sí, le manda mensajes y todo. Mingyu lo invitó a salir el sábado pero The8 no pudo ir...—él sábado Mingyu me invitó a salir.
No fui la primera persona en quien pensó, él iba a invitar a The8.
  —¡chicos!—Jun entró al gimnasio—¿y The8?.