Tuvieron que hacer cola para entrar al acuario, estaba formada por su sección en el que podían verlo desde el exterior, con espectáculos con algunos mamíferos como las orcas asesinas, Clarke y Aden veían a un lindo "liberad a Willy" sin embargo, Lexa veía a "Orca, la ballena asesina" tremendo valiente era el que sujetaba el pez para que el mamífero se acercase y hacer su acrobacia y recibir el premio mientras la gente ovacionaba y aplaudía, ocurría lo mismo con los delfines y el resto de animales marítimos capaces de adiestrar... suena horrible lo sé, ya vendrán los alienígenas para hacer lo mismo con los humanos... como iba contando, el acuario tenía su parte subterránea donde había pequeños peceras, donde había varios tipos de peces de distintas especies y temperaturas acuáticas distintas, antes de entrar al túnel subterráneo que atravesaba el parque, había que pasar por una sala enorme con puestos que vendían camisetas, peluches y varios tipos de merchandising, decoración de peces y mamíferos gigantes. También había unos cuantos terráqueos con anfibios y reptiles de diferentes especies, Aden se paraba para mirar en cada uno, serpientes, higuanas, eran tan chulos, al menos ahí podía mirar gratis, en cuanto llegó al puesto de merchandising fue mirar el peluche del delfin y quedar hipnotizado, como si hubiesen rociado el peluche con algún tipo de feromonas que ejercían algún tipo de control mental que hacía actuar a la mayoría de los niños casi de la misma forma:
- Quiero el delfin, lo quiero- miró a sus madres que caminaban detrás de él agarradas de la mano- ¿me lo compráis?
La respuesta que dio Clarke:
- No.
- A ver cuánto cuesta.
Dijo Lexa soltándose de la mano de Clarke, si era incapaz de decir no al resto del mundo, imagina tener que decir no a Clarke o a Aden, solo lo hacía en motivos de fuerza mayor y por primera vez dio con esos motivos:
- Uff, demasiado caro- miró a Aden- vamos a otra tienda que vendan peluches de delfines más baratos.
Aden se puso de morros:
- Pero yo quiero ese.
Claro que sí, todos van acaban pidiendo el peluche más grande, más bonito y caro ¿pedir el llavero de 1$? No, que va, lo peor es que ese mismo muñeco costará tres veces más barato en otra tienda fuera del acuario:
- Cariño- dijo Clarke acercándose a Aden, ella había lidiado con momentos así, al ser madre primeriza los primeros años de vida es difícil no consentirle, pero con el paso de los años había aprendido que no siempre había que ceder- tienes muchos peluches que ni tocas.
- Pero yo quiero ese peluche.
Insistió el niño arrugando la frente, Lexa se llevó los dedos al puente de la nariz, lo que faltaba ahora, dos cabezotas discutiendo:
- Seguramente hay otra tienda al otro lado del túnel subterráneo, lo compramos ahí.
Dijo Lexa agarrando la mano de Clarke y tirando de ella:
- ¿qué?
Susurró la rubia mientras se escuchaba un "¡sííí!" por parte de Aden que retomó su camino dando saltitos dirección al túnel:
- Recemos para que no haya más quioscos del demonio.
- Si lo hay serás tú quien le diga que no.
Le dijo claramente mirándola a la cara:
- Vale.
Accedió Lexa, aunque sonaba como cuando les daban razón a los tontos, Clarke paró de caminar y tiró de la mano de Lexa para que la mirara y la tomara en serio, sacando ese carácter que tanto caracterizaba a la rubia:
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Aguas tranquilas
FanfictionClarke vive en California junto a su hijo Aden y su madre Abby. Una noche regresa del trabajo y su madre le confiesa que aceptó una invitación de antiguos alumnos sin su permiso, obligándole a ir a su pueblo natal y desvelar el secreto que lleva gua...