19 de abril de 1810
ESPAÑA
Como siempre, Félix volvió a nacer. Siempre variaban las circunstancias en las que nacía. Había veces en las que nacía como noble, otras como plebeyo y muchas otras ni siquiera ocupaba un puesto en la sociedad. Esta vez le tocó la fortuna de haber nacido como el príncipe heredero del reino.Creció lleno de lujos y comodidades, lo que cualquier persona hubiera querido. Como lo dictaba su "maldición", recordó todo, de nuevo. Esta vez se propuso en terminar con su misión, si mataba al líder del movimiento, acabaría con el movimiento. Eso pensaba, pero primero tenía que coronarse como rey para que su ejército le sirviera fielmente y así, la maldición y todo lo que algún día él había comenzado, terminara para siempre.
Al cumplir los diecisiete se le dio un guardia personal, este chico venía de un puesto noble y era el mejor en combate de su generación.
—Su alteza, el guardia que lo escoltará está aquí— habla una de las criadas del palacio.
—Hazlo pasar— Félix estaba terminando de cambiarse, ayudado por las criadas.
—Su alteza— el guardia se inclina en señal de respeto —¿Está listo para irnos?
—Por supuesto— Félix sale de su habitación y luego el guardia sale detrás suyo. Se dirigieron a la sala del trono, en donde sus padres se encontraban.
—Querido hijo— su madre se acerca a donde él se encuentra.
—Que bueno que llegas, el día de hoy irás con la señorita Rala. Ella es la mejor candidata a convertirse en reina. Ella será tu futura esposa.
—Si padre— el chico no podía negarse, su padre era el rey y el rey hacía lo que le convenía al reino. —Me iré ahora— hace una reverencia y se va.
Al salir del palacio, el carruaje que los llevaría hasta la mansión, ya los estaba esperando. Félix y su guardia subieron y luego el carruaje se fue en dirección a la casa.
—Odio hacer esto— susurra Félix.
—Entonces ¿Por qué lo haces?— pregunta el guardia
—No es de tu incumbencia. Tengo que hacerle caso al rey— responde mirándolo.
—Pronto serás el rey. Tomarás las decisiones por ti mismo y, si la señorita Rala no le gusta, usted podrá desposar a la mujer que elija.
—Como si pudiera desposarme con un hombre— susurra más despacio para que el chico no lo escuchara.
El resto del camino continuaron en silencio y cuando llegaron unas de las criadas de la mansión lo recibieron y lo guiaron hasta el salón en donde se encontraba la chica. Solo tenía que aguantar un par de horas, convivir con ella no iba a ser imposible, pero tampoco le sería fácil. La incomodidad se dejaría ver y tal vez arruinaría el compromiso.
Por suerte todo salió perfecto y no se dejó llevar por su incomodidad. Se había preparado mentalmente antes de llegar y funcionó a la perfección.
Regresaron al palacio y cuando llegaron se percató del aroma a sangre provenir de la alcoba real. Rápidamente fue a ver qué ocurría y al abrir la puerta de la habitación se dio cuenta que sus padres estaban muertos. Ensangrentados, uno al lado de otro. Se acercó a donde se encontraban y se dio cuenta que había una nota escrita al lado de los cuerpos.
"AL FIN TE ENCONTRÉ" eso era lo que decía.
Los recuerdos horribles, volvieron a su mente. No logro contener el llanto ¿Quién era capaz de atormentarlo de esa forma? ¿Por qué le hacían esto?
Después de tomar el trono comenzó con su venganza. Arrastrando a sus soldados a la muerte. Descubrió también que su guardia real, era su mate. Tardo un poco de tiempo en decirle y, después de algunos meses, se atrevió a decirle y contarle todo por lo que había pasado.
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MI OMEGA (En Proceso De Edición)
WerewolfUn chico omega, condenado a ser sacrificado. "SERÁ POR EL BIEN DE LA MANADA" Un chico Alfa, el que todo lo tiene y el que nació para liderar a su manada. "ERES EL ALFA, EL LÍDER DE LA MANADA" Un amor prohibido. "LOS LOBOS NEGROS NO DEVEN MEZCLAR S...