8. Quinto año: Biblioteca y Quidditch.

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El lunes había llegado y estaba los cuatro desayunando mientras Alec inventaba un par de sueños apresuradamente en su cuaderno.

—Pudiste haber hecho eso anoche.—lo regañó Ruby.

—Estuvo ocupado con Alice.—dijo Lorcan burlonamente mientras movía sus cejas.

-¿Alicie? ¿eh?.—dije burlonamente provocando que Alec se sonrojara y Ruby riera.

—Solo la acompañé a la biblioteca a dejar unos libros ya la sala común de Hufflepuff.—dijo mientras metía el cuaderno en su mochila y cuando sonó la campana todo el mundo se levantó para ir a las clases.

Cuando entramos al salón de adivinación tuvimos que dejar los cuadernos de los sueños en el escritorio de la profesora Trelawney antes de ir a sentarnos. Realmente me estaba aburriendo, la profesora estaba hablando de lo importante que eran los sueños en la adivinación, apenas pude tomar notas en mis pergaminos porque estaba más concentrada en aguantar mis bostezos. La profesora nos dejó de tarea toda una redacción detallada sobre los sueños para la próxima semana. Cuando el timbre sonó me despedí de Alec para dirigirme al salón de Aritmancia, entré al salón sentándome en mi asiento junto a Potter en el último banco.

—Estuve revisando sus últimos trabajos y terminé de corregirles el primero que hicieron en dúo.—hablaba el profesor Vector mientras iba repartiendo los pergaminos en el banco.—Quiero que con su compañero de banco lean el primer capítulo de sus libros La nueva teoría de la numerología y hagan una redacción resumiendo el capítulo para el lunes próximo.—genial, más tarea para estresarme y pasar horas en la biblioteca. El profesor dejó nuestra tarea en el banco y sonreí al leer el satisfactorio.

El profesor comenzó a explicar sobre el primer capítulo, tomé un par de notas en el pergamino y antes de que sonora el timbre nos dejó unos cinco minutos de descanso.

—Si te parece bien podimos hacer la tarea el miércoles en la biblioteca o en la sala común antes de la práctica de quidditch.—me dijo James mientras ambos guardamos nuestras cosas en nuestras mochilas.

—Si, por mi está bien.—asientí.—Te veo ahí después del almuerzo.—asintió con su cabeza y cuando el timbre sonó me dirigí a los invernaderos junto a Ruby que me esperaba en el pasillo.


-o-


Ya era martes por la noche y estaba en mi cama leyendo el primer capítulo para poder hacer el trabajo mañana sin problemas, anotando unas ultimas cosas el pergamino.

Cuando desperté al otro día Ruby ya estaba esperándome, me vestí rápido y bajamos a desayunar. No fue un día tan aburrido a excepción de alquimia pero en defensa contra las artes oscuras comenzamos a ver bestias más peligrosas, por suerte el profesor no nos envió ningún deber para hacer para la próxima semana, le agradecí hasta a mis ancestros muertos por eso.
El resto del día y el almuerzo pasaron bastante rápido, una vez que terminé de comer James se me acercó para ir a la biblioteca y me despedí de mis amigos antes de levantarme. Caminamos en silencio y al llegar nos sentamos frente a frente en una de las mesas del frente.


—Leí el capítulo anoche y anoté un par de cosas, más todo lo que explicó el profesor creo que estaremos bien.—dije sacando mis libros, pergaminos y mi pluma.


—También lo leí ayer y anoté todo lo que el profesor decía.—dijo extendiéndome sus pergaminos.—Podríamos juntar todo eso junto a lo tuyo y agregar lo que falta.


—Me parece bien ¿Quién de los dos escribirá?.


—Tienes mejor letra que la mía, puedes ir escribiendo eso y yo buscaré más cosas en mi libro.—asentí y comencé a transcribir todo en un texto en otro pergamino pero no me demoré mucho.


—¿No te asustan los TIMOS?.— preguntó James rompiendo el silencio.


—Si, bastante ¿a ti no?.—levanté mi vista hacia el por unos segundos y luego volví mi mirada hacia el pergamino para verificar que haya copiado todo perfectamente.

Estrellas (James Sirius Potter)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora