ARDENT © [#1]

Sentir. Una por una, sentir.

(With me- Sum 41)

De camino al aeropuerto me vino esa típica oleada de nostalgia y duelo al dejar un buen momento atrás, buena gente, buenas experiencias. Irme de allá me costó mucho más de lo que jamás habría pensado. Aquellos dos desconocidos me habían ayudado a crecer como persona, a soltarme, a... ser más yo. Y los iba a echar muchísimo de menos.

Ola no estaba tan nostálgica, o al menos no se le notaba, pero yo... apoyada en su hombro era un mar de lágrimas. Interiores, claro, no me iba a poner a llorar ahí porque sí.

Archie fue una persona que en dos semanas se ganó un hueco en mi pequeño y frío corazón a pulso, y despedirme de él me dolía, me dolía mucho.

Hunter ganó el partido, sí. Los Bullies ganaron la final.

Me vi todo el partido, enterito. Y lo comenté con mi padre por mensaje. A él no le escribí, ni siquiera para felicitarlo. Pero lo que me alegraba... sabía que lo haría, sabía que lo conseguiría. Era un verdadero prodigio del hockey, y debía aprovecharlo.

-No quiero irme -Murmuré mientras caminábamos hacia nuestra puerta de embarque, aferrada a su brazo.

-Yo tampoco quiero que os vayáis -Dijo él, con una sonrisa, y meneó mi brazo. -Pero oye, así tengo una excusa para ir hasta allá y hacer un viajecito.

-Tienes a Effy -Le dije.

-Y a ti, mi próxima novia. Estoy seguro.

Me ruboricé, me sentí un poco incómoda.

-Lo dices... así, sin más. Como si diese igual.

-Claro, lo digo porque estoy seguro -Dijo con firmeza.

-Pero si probablemente no nos volvamos a ver -Murmuré apenada. Ladeó su cabeza y me miró fijamente.

-Eres muy pesimista, mujer. Tú volverás aquí, es tu ciudad favorita, me lo has dejado claro durante estas semanas. Y yo también volveré a Minnesota, y Calum seguro que no tiene ningún problema en sumarse a ese viaje -Levantó las cejas y sonrió. Bendita sonrisa.

-¿Me lo prometes?

-Te lo juro. En menos de un mes nos tienes allí -Los dos nos sonreímos.

Y llegaba el peor momento. El de las despedidas.

Ola se lanzó a Calum como un koala, pero nada de besos. Me pareció curioso. Él la agarró con fuerza, y ella no lloró, pero sí que se emocionó un poquito. Sé que Calum no le gustaba tanto como lo hacía Drew, pero para ella había sido una persona muy importante, y había muy buena química entre ellos.

Y yo...

Me quedé frente a él, con los ojos tristes, el alma triste, incluso el mundo estaba triste. Pero él sonrió y abrió los brazos, a la espera de ese abrazo que tanto había tardado en darle todo este tiempo y que me moría por hacerlo.

Fui directa como una bala a él, y me aferré como un ancla al fondo del mar.

Archie era una persona muy reciente en mi vida para decir que era de las personas más importantes de mi día a día, pero lo cierto es que lo era. Él me había proporcionado la seguridad, madurez, gracia y soltura que nadie había hecho hasta entonces. Y teníamos tanto en común...

-Voy a echar de menos nuestras excursiones, Archie -Murmuré apoyada en su hombro.

-Y yo nuestras conversaciones y tu risa.

Me separé un poco de él.

-¿Mi risa?

-Sí. Me encanta -Sonrió, y yo me sonrojé.