(Valentine y su dedicatoria a la corona)
Tan hilarante es escuchar cómo su mundo se desmorona a su alrededor. Aunque estoy consciente, guardo silencio; jamás soy escuchada. Después de todo, me encuentro en las profundidades del edificio, como una más en el hotel. Debo mencionar a Amy, pero ese nombre jamás le perteneció a ella. Esa bestia es su madre, lo sé. Wade y yo lo sabemos. Recuerdo perfectamente quién era antes, su rostro y cada detalle de su madre. También quisiera agregar "difunta", pero no está muerta del todo; ahora vive en el cuerpo de su hija como un parásito chupasangre.
Sé perfectamente qué está sucediendo ahora. Ya estaba destinado de todas formas: destrucción y genocidio a otro nivel. Eso es todo el futuro que le veo a este mundo viejo y olvidado; memorias reprimidas de la guerra antigua queriendo renacer para depurar todo este mundo poblado de pecadores. Todos y cada uno, muertos de alguna forma, torturas crueles que condenarán incluso a la propia familia Real.
Los tubos del alcantarillado son mis mensajeros. Cada habitación y sala del hotel tiene al menos uno, por el cual puedo escuchar todo, incluso lo que pasó esa oscura noche cuando mató a Amy.Siempre me encuentro en silencio, anhelando el llamado de Wade, esperando ese mensaje. Aunque esté en las profundidades más ocultas del edificio, también sé que bajo tierra hay más que solo un cadáver; la Reina oculta tantas cosas de su pasado que hasta gran parte de ellas las sé, no solo por el sonar de las tuberías. Yo viví en carne propia la cruda guerra. Ayer pude oír a esa mujer merodear por ahí, un piso más arriba del que yo me encuentro.
Escuché botellas ser desplazadas y moverse de un lado a otro. Pude oler esa mierda, alcohólica, la ginebra, sobra decir que era un olor fuerte, el que percibí. Por sí sola, dicha bebida ya es fuerte al beber, aún más si se excede el consumo. ¿Por qué me recuerda tanto a ella? Recuerdo que el olor se mitigó por un momento y, a la par de varios minutos, escuché jadeos seguidos de inhalaciones y respiraciones agitadas. Gotas de vómito cayeron sobre mi cabeza provenientes de la alcantarilla estrecha de arriba, aumentando ese olor pútrido y nauseabundo que Wade tanto detesta. Muy aparte del hecho de tener cadáveres en descomposición junto a mí y que hago mis necesidades sobre el cuero de anteriores víctimas. Estoy segura de que él hará lo mismo también. Pobre de él. Es obvio que se enojará mucho al ver que no he limpiado este estrecho lugar, pero... ¿cómo podría? Tengo este bozal, como si fuera un perro faldero, aunque tampoco lo culpo; es eso o mutilar a la realeza de una sola.
Apenas si puedo moverme; son tan ridículamente pesadas que este cuerpo no soporta su peso. No tengo otra opción que acurrucarme en el suelo, por más de que mis rancios huesos crujan al moverse y la poca sensibilidad que tengo en las extremidades me haga querer llorar del dolor. Mi garganta está seca y ya no puedo tragar saliva, lo que hace que mi paladar retenido por un seguro logre percibir mis ácidos estomacales.
¡Oh! La gran guerra, ese giro inolvidable que condenó esta nación. ¿Cómo podría olvidarlo si yo misma estuve ahí? Tanta sangre y sufrimiento que conllevó a la abundancia de cadáveres esparcidos por doquier. Las ejecuciones fueron tan fuertes, sin olvidar las torturas a los rebeldes. ¡Oh, desdichada reina impía! Había tantos huérfanos en esas épocas y tenías que elegir la hija con la sangre más impura que la droga misma. Tuviste que sacrificarlos a todos para finalmente saciar tus ansias de venganza en ese día tan fatídico. ¿Acaso no te fue suficiente eso? Oh no, no lo era; tenías que seguir siendo una molestia para todos a tu alrededor. Te esfuerzas tanto por no estar sola que terminas incluso peor de lo que ya estabas; eres idéntica a tu madre.Hasta Wade se siente culpable, pero... no realmente por eso.
Oh Dios, estaba tan ebrio anoche que ni siquiera podía levantarse por sí solo, tambaleaba y decía incoherencias como todo un ebrio. Él la extraña tanto que por poco llora frente a mí. No logré verlo muy bien, pero se veía destrozado. ¡Como sea! Seguramente la diversión comenzará dentro de poco. Ya buscamos lo que queríamos, no estaba así que... nos quedaremos hasta que el desastre termine. Entre tanto licor y variados vinos, negocié con Wade respecto al tema de huir. Por alguna razón, afirmó que quería quedarse un poco más de tiempo. Claramente no me negué. Este lugar es una fuente interminable de comida. Todos los días, alguien muere en las afueras de este reino.
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"Ten piedad, hija mía".
Diversos"Los secretos familiares no pueden ser ocultos por siempre".