Forjando lazos World_Ends: Parte 4

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Asuna se separó de Nicolle y Touma. Tenía que ir a recibir un poco de dolor por parte de Evangeline, pero eso podía esperar, así que pasó a donde estaba ese falso hermano menor suyo: en medio de la selva.

—Mmm... Parece que se entiende bien con esas dos...

Se refería a Mikoto y Melissa. Las chicas, Nagi y Negi estaban teniendo una reunión estratégica de usuarios de electricidad o... ¿algo así?

—¡Te digo que no, son rieles, tú haces «za za za» y debería ser más como «byuun buun pyun»!

—Mikoto-san, así es imposible...

«Tu explicación es horrible...», aunque por su puesto que no le diría eso directamente.

Nagi permanecía de brazos cruzados, con los ojos cerrados y torciendo la boca. Si eso no era llevar su cerebro a un nivel más allá, quién sabe qué lo sería.

—Creo que lo pillo... —caminó hasta un enorme bloque de metal tirado en el suelo—. Primero es «byuun»... —cientos de relámpagos se extendieron desde su cuerpo y buscaron el suelo como patas de araña; el pedazo de metal se elevó en el aire—, luego «buun» —la forma en la que la luz pasaba cerca de él cambió—, «pyun» —bajó su centro de gravedad y con eso los relámpagos desaparecieron—, ¡y por último «tokaaan»!

Golpeó el pedazo de metal en ese momento. Los arcos aparecieron de nuevo, pero esta vez conectaron su brazo y el metal justo al instante en que se tocaron. Entonces un haz purpúreo cruzó el cielo y se perdió más allá de donde la vista era capaz de alcanzar. Algunos segundos después se escuchó una explosión.

—¡Listo, Mikoto-chan! —Levantó su pulgar y caminó hasta Negi—. ¡Lamento que este hijo mío sea tan IDIOTA —le daba algunas palmadas en la espalda—, pero qué se le va a hacer!

—E-e-e-e... —los ojos de la Railgun estaban acuosos—. ¡Es más potente que el mío! ¡También tiene más alcance! —Lo tomó por el cuello de la playera—. ¿¡Por qué puedes hacerlo tan bien si es tu primer railgun!? ¡No es justo, no es justo!

El viejo Nagi comenzó a reír a carcajadas. Las caras de su hijo y Mikoto estaban rojas hasta las orejas del coraje y la frustración.

—Ne-Negi-san... —una extraña aura negra apareció alrededor de Misaka—. ¡Negi-san, ¿qué te parece si usamos «eso»?!

—Parece que es lo único que queda, ¿no? —Una alargada sonrisa se formó con los labios de Negi—. ¡Pelearemos contra mi padre utilizando lo único en lo que le ganamos!

—¡Emplearemos nuestros cerebros!

Chocaron puños, entonces Mikoto sacó el libro favorito de todos los niños de posgrado que tienen que ver algo de electromagnetismo, el Jackson. Negi lo tomó de sus manos y comenzó a leer como loco.

«¿La personalidad de Negi siempre fue así o es porque Nagi se está burlando de él?», pensaba, rascándose la mejilla.

—Divertidos, ¿no?, Asuna-chan —escuchó a un lado.

—Sí, bueno... —cayó en cuenta de que unos segundos atrás no había nadie a su lado—. ¿¡Cuándo llegaste aquí!?

—No lo sé~~ —llevó sus manos a su espalda y se balanceó un poco—. Mejor dime, ¿cómo le está yendo a Nico? No quiere decirme nada de su entrenamiento...

—Ah... Nicolle-san...

"Pero no le digas a Mel", recordó algunas palabras de cuando fue a ver el entrenamiento de Nicolle.

—Bueno... —volteó la vista—, le prometí que no te diría...

—¿¡Eeh!? ¡No es justo que tú también confabules, confabuladora!

To aru Majutsu no Kodomo Kyoushi: Imaginary TomeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora