|41.|

1.9K 145 19
                                    

MARATÓN 1/5.

Amelie Jones de Colón.

El timbre de la casa sonó, me levanté del sofá y me encaminé hacia la puerta Bailey cómo siempre siguiéndome y posicionándose a un lado de la puerta, al momento de abrirla su perfume caro inundó mis fosas nasales una combinación entre vainilla y fresa.

Jade apareció enfrente mío, una sonrisa se dibujo en sus labios rojos perfectamente delineados, un pantalón negro y blusa blanca con escote es lo que lleva puesto, su cabello azabache recogido en media coleta. Siempre se ve tan elegante y pulcra.

— Amelie aquí estoy como prometí, ¿Erick está? Vengo a decirle lo del viaje.

— Sí, pasa.

Me corrí de la puerta para dejarla pasar, Bailey atacó cómo de costumbre de forma amistosa hacia Jade que ella con gusto acarició.

— Pequeña bola de pelos como me caes bien.

— ¿Ángel, quién es?— Erick salió de la cocina y se encamino hacia nosotras.— Jade pasa, bienvenida. — dijo una vez se dio cuenta de su presencia.

— Perdón si interrumpo. — expresó Jade mientras dejaba de acariciar a Bailey y camina para llegar hasta la sala.

— No te preocupes Jade, solo veíamos películas. — dije emitiendo una sonrisa.

— Erick quiero hablar contigo.

— ¿Conmigo? — cuestionó sorprendido. — Dime Jade para que soy bueno.

— Quería saber si dejas ir a Amelie a un viaje que organizo, veremos pinturas será tan solo por cuatro días.

Erick sonrió y después emitió una carcajada, sabía el porque.

— Jade lo siento pero yo no ...

— Erick créeme que es una gran opción, sirve que Amelie se distrae un poco. — Jade lo interrumpió antes de que pudiera terminar lo que quería decir.

— Jade déjame terminar. — sonrió — Yo no soy quien decide eso, Amelie no tiene por qué pedirme permiso, si ella quiere ir está bien, no soy dueño de ella como para tenerla encerrada, además, es injusto que sea yo quién decida cuando soy yo quien me la paso viajando, ¿ Quieres ir ángel mío?

Erick me miró con sus intensos ojos verdes, mientras me dedica una sonrisa de boca cerrada.

— Me encantaría.— la emoción salió acompañada de mi voz.

— Bien pues no se diga más, Jade anota a Amelie que ella va a tu viaje.

— Bien entonces Amelie estás más que anotada, recuerda el viernes por el medio día pasará a buscarte una camioneta yo tendré que adelantarme para arreglar algunas cosas pero allá los recibiré a todos, y Erick no te preocupes que yo me encargo de cuidar muy bien de tu esposa.

— Confío en ti Jade para cuidar a mi angelito.

— No debes preocuparte Erick, cuidaré bien de Amelie.

Erick le dio una sonrisa a Jade.

— Bueno eso era todo lo que tenía que decir, me retiro no quiero darles más molestias.

—Jade no quieres quedarte a cenar.— dije para ella.

— Gracias pero tengo una pequeña reunión con alguien al cual no le gusta la tardanza así que debo irme pero gracias por invitarme.

—¿Segura?¿ Tal vez alguna copa?— en esta ocasión fue Erick quien le sugirió a Jade quedarse.

—Mil gracias pero debo irme, otro día tal vez podamos tomarnos esa copa.

Sexo 𝑠𝑖𝑛 𝐏𝐈𝐄𝐃𝐀𝐃  |Christopher Vélez| +18 ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora