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Christopher Vélez

Es patético, ¿Yo rogarle a una mujer?¿Yo enamorado?, ahora sí que me desconozco, creo que en los años que llevo siendo un casanova, jamás me había vuelto loco por una mujer.

Es estúpido lo sé, pero en esta ocasión con ella es diferente.

Verla es todo un espectáculo visual, sus hermosos ojos marrones, aquellos labios carnosos y rosados que cuando terminamos de darnos un beso largo se vuelven un poco más rojizos, su cabello largo en color castaño, aquella piel tersa y suave la cuál me encanta y enloquece poder  tocar, ver cómo se enrojece cuando la veo detenidamente, su respiración agitada cada vez que me acercó, aquellos gemidos que son melodías en conclusión ya me he hecho adicto a ella, yo solo quería sexo pero ella tiene algo que me ha hechizado.

Decidí poner algo de música para así tratar de despejar un poco mi mente, en la radio comenzó a sonar necio de Romeo Santos, escuchar la canción de cierta forma me hizo sentir tan identificado, en este instante Amelie me pone necio.

El conducir con música fue relajante y me despeje un poco de mis pensamientos, llegué al lugar, aquel edificio donde venía cada vez que tenía un problema, ella siempre encontraba la solución va cualquier cosa, hablar con ella era algo bueno de ves en cuando.

— Señor Vélez— Dijo al momento de verme frente a la puerta de su apartamento, una chica estatura promedio cabello corto en color negro, grandes ojos color oscuro y piel canela apareció ante mí— Pase

Ella se retiró para darme el paso al momento de entrar un aroma a lavanda golpeó mis fosas nasales.

— Supongo que hay un problema, ¿Verdad? — Dijo mirándome con aquellos ojos intensos

— Digamos que sí— Tome asiento en un sofá mientras que ella se sentaba enfrente mío— O tal vez solo quiero hablar

— Señor Vélez es raro que usted solo quiera hablar, así que cuénteme cuál es su problema

— Jade, es complicado de decir o el simple hecho de explicarlo, además ni siquiera yo sé que es lo que pasa

— ¿Se trata de una chica? — Pregunto intrigada

— Digamos que tengo un amigo con un problema

Jade me dedico una mirada burlona para después al fin de tanto que estuvo sin reírse decidió soltar la carcajada, mi cara ahora debe ser igual de fría que siempre. No reflejaba emoción alguna además de no parecerme gracioso que se riera en mi cara.

— Jade, no le veo lo gracioso a lo que he dicho— Dije sonando más frío de lo que quería

— Es la peor escusa que he escuchado de usted, además ya está muy usado lo de tengo un amigo cuando el del problema siempre es uno, pero bueno pienso ayudarlo Señor Vélez con sus problemas amorosos cómo siempre, ¿Quién es la chica?¿La conozco?

— ¿Chica, de que hablas?

— Puede mentirse a usted si quiere pero a mí no, se que se trata de una chica, el gran y reconocido Christopher Vélez enamorado, eso sí nunca me lo imaginé jamás pensé que usted podría enamorarse ya que es todo un casanova, supongo que está confundido

Me sorprendía como es que sabía cada cosa que me pasa con el simple hecho de verme, Jade antes de ser grandes confidentes y amigos, ella y yo tuvimos mil experiencia juntos, éramos grandes amantes y por un momento ella me llamo tanto la atención que decidí alejarme, volví para enterarme que se casaba y sería feliz. Ahora ella es quien me escucha y me da consejos sobre el amor.

— ¿Cómo es que sabes todo eso?

— Lo sé porque tú mismo me lo has dicho, el día que te encontré en el bar hace una semana, haz dicho que estabas destrozado porque el amor de tu vida te había mandando a la mierda, creí que mentías ya que estabas borracho pero veo que cada palabra que dijiste ese día es cierta.

Sexo 𝑠𝑖𝑛 𝐏𝐈𝐄𝐃𝐀𝐃  |Christopher Vélez| +18 ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora