Extra: Báilame.

1.2K 71 127
                                    


Capítulo largo

—Se recomiendo discreción—

—Se recomiendo discreción—

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

C O N T E N I D O  +18.

Christopher Vélez.

Ella es impresionante y sensual.

Desde el umbral de la puerta, observó con devoción a esa mujer radiante que se mueve con elegancia y sensualidad por la habitación con dirección al espejo. Lleva puesto un vestido negro que abraza cada una de sus curvas, resaltando de manera provocadora ese trasero exquisito que en automático siento que me pone duro, el vestido es corto, justo le queda a medio muslo, su silueta se ve excelente y de manera muy provocativa.

Su cabello cae en una cascada sobre sus hombros desnudos, dejando al descubierto más piel, esa piel suave y sedosa con olor exquisito. Sus ojos brillan con una chispa de deseo cuando nuestras miradas se encuentran a través del espejo que tiene enfrente, despertando en mí una fiebre que arde en lo más profundo de mi ser queriendo aventarla contra la cama y hacerla mía, una y otra vez.

— ¿Le gusta lo que mira, señor Vélez?

<<Señorita Jones, usted quiere que mi polla explote.>>

— Sigue en lo tuyo, olvídate de que estoy aquí.

Pero claro que eso no pasó, se acercó a pasos lentos; cada paso que da es como una danza sensual que me deja inmóvil y que hipnotiza todos mis sentidos, dejando mi mirada solo en ella. Su fragancia embriagadora llena la habitación dejándome hechizado con ese olor angelical.

Es imposible resistirse a su encanto, a la tentación que emana en cada gesto, en cada mirada cargada de un deseo incontrolable que comenzó a quemarnos hasta hacernos arder en esto que hoy nos impide separarnos. Mi deseo por ella crece cada segundo que pasa, haciendo que la sangre hierva en mis venas y se concentre en mi polla, y la piel se me erice con anticipación .

Mi deseo por ella nos trajo a esta realidad, donde ese deseo se convirtió en una obsesión enfermiza y ahora ella es mi delirio, la única que puede volverme loco con solo una de esas miradas inocentes pero que se convierte en la peor diabla cuando la someto en la habitación.

<<Es hermosa, es sensual, es mi mujer, solo mía. Vélez vaya que estás jodido. Estoy jodido. >>Ella es mi condena y la mejor si soy honesto. No hay nada en este mundo que pudiera compararse a la pasión que siento por ella.

Su toque lo sentí, sacándome de todos esos pensamientos lujuriosos. Sus manos acarician mi pecho, el calor lo siento atravesar la camisa negra que llevó, su mirada es lasciva, tan ardiente como nuestros cuerpos.

— No deberías provocarme de esta manera — dije con dificultad.

Vaya que Amelie puede hacerme perder la cordura en pocos segundos.

Sexo 𝑠𝑖𝑛 𝐏𝐈𝐄𝐃𝐀𝐃  |Christopher Vélez| +18 ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora