Siempre serás tú

13.

Kate.

Por fin, la junta terminó y de la mejor manera posible, resulta que efectivamente Stark Industries colaboraría con Bishop Security para crear un nuevo sistema de alta seguridad, éste supuestamente será cien por cierto inhackeable superando al mejor sistema de seguridad que tenemos actualmente, en cuanto a los avances en el sistema de reconocimiento para el departamento de policía ya está terminando su fase de pruebas por lo que en menos de un mes entregaremos el software.

Ah y por sí fuera poco tengo de novia a la mujer más hermosa y letal del mundo, por fin hicimos oficial lo nuestro y me alegro porque de verdad me gusta y no pienso fallarle.

— ¡La vida me sonríe Hanna!.— no reprimo mi emoción y la abrazo.

— Oh espera Kate, jefa.— sonrío y la suelto.

— Perdóname Hanna es que gracias a tí ahora tenemos un socio poderoso y además tendremos más trabajo aún.— doy pequeños saltitos sin esconder la mínima gota de alegría.

— No todo el crédito es para mí, Jack también de involucró.— de verdad que me siento mal por haberlo juzgado antes.

— Ésto lo tenemos que celebrar, ¿harás algo hoy por la noche?.— pregunto con la esperanza de que no tenga compromiso hoy

— No, de hecho tengo la noche libre para lo que sea que se venga.—

— Cool, entonces ve a mi departamento, te mando la ubicación, vamos a celebrar.—

— Oh okey ahí estaré.— me dice con su ya característica sonrisa.

— Eso espero Hanna, volveré a la oficina. — me despido agitando mi mano.

— Si yo volveré a mi escritorio.— me dice y salimos de la sala de juntas para dirigirnos a nuestros respectivos puestos.

Abro mi portátil y mi celular comienza a sonar por un momento pienso en que Yelena me puede haber marcado pero no es un número que tengo registrado atiendo la llamada con intriga de quién podría ser.

— Diga.—

— Vas a morir Kate Bishop, ojo por ojo.— al escuchar lo último la persona cuelga y yo me quedo en shock.

Finalmente decido no hacer caso y me pongo a revisar mi trabajo.

...

Horas más tarde.

— Entonces Hanna te veo a las ocho en la dirección que te dí.— le recuerdo.

— Claro que sí, ahí estaré.— me sonríe y sube a un taxi, decido tomar uno para llegar rápido a casa.

— Parece que necesitas que te lleven guapa.— ésa voz con ése acento llaman mi atención y veo a Yelena en una motocicleta.

— Wow Yel, te vez muy sexy en ésa motocicleta.— le digo y sonríe.

— Obvio, yo soy sexy como sea.— me dice con el ego en alto.

— Éso no lo voy a discutir.— le digo y me extiende un casco.

— Sube amor, leí tu mensaje y te felicito, los tienes y es momento de festejar.— me dice con una gran sonrisa y me coloco el casco y subo a la motocicleta.

— Listo, vamos, por cierto invité a Hanna.— le digo y la abrazo por la cintura.

— Genial, la voy a conocer al fin.— me dice y arranca, no había notado que escucho claro su voz y me doy cuenta que el casco debe tener un dispositivo de comunicación así que trataré de no gritar.