El Pecado del Alquimista 12 [+18] (Genshin Impact)

Capítulo 66

Märkit

14 de Abril – 15:06

Inazuma – Tenshukaku – Cercanías Habitación de Kairi y Scaramouche

Se rumoreaba que la sangre azul Kairi había caído en un sueño perpetuo. En su momento, antes de la coronación, aquellos que intentaron marcarla, fueron aplastados por ella. Después, el propio Rey se apoderó de la decisión de su marcaje, pero evitó siempre el tema.

No obstante, tras lo que ocurrió con mi mejor concubina, la rabia me cegó ante aquella apetitosa oportunidad. Acompañado de varios de mis hombres, corrí a los aposentos hasta los aposentos de la sangre azul.

"Una vez que la marque, el Rey no podrá hacerme nada si tanto quiere protegerla", reía internamente, saboreando la futura victoria sobre el mismísimo monarca. ¡Mi venganza por haber tocado a mi mujer!

Di una patada a la puerta de sus aposentos, irrumpiendo en los mismos violentamente.

-Märkit: bien... -sonreí triunfal nada más hacer acto de presencia-. ¿Dónde está mi futura sometida?

Los dos escuálidos jóvenes con los que no había conseguido tener descendencia alguna, me miraron con absoluto pavor. Así debía ser.

***

Scaramouche

14 de Abril – 15:07

Inazuma – Tenshukaku – Habitación de Kairi y Scaramouche

Ni siquiera yo esperaba un ataque tan directo y agresivo. Sabía que el Rey había evitado que vinieran más a intentar marcarla, por lo que deduje que nadie se atrevería a ir en contra de su voluntad... a no ser que consiguieran efectivamente marcarla.

Si lo conseguían... Si lo conseguían... No habría vuelta atrás.

-Scaramouche: ¡gusano, tómala y huye por la ventana! ¡Sé que eres rápido cuando quieres! –ordené, raudo, una décima de segundo después de aquella brusca entrada.

El samurái ni lo pensó. Pese a nuestro mutuo odio, agarró a la dormida Kairi en brazos y saltó por la ventana.

-Märkit: ¡Jajajajaja! –ni siquiera lo tomó como una dificultad. Para él sería como ver la rabieta de un niño inmundo-. Pobre... ¿Crees que eso cambiará algo? –expresó aquel maldito demonio de pelo rubio y corto.

Me concentré, y entonces yo alcé la voz:

-Scaramouche: tendréis que acabar conmigo antes si queréis llegar hasta ella –sentencié, dejando que mi poder electro se fuera haciendo con mi cuerpo.

Un haz morado fue envolviéndome y haciendo brillar mis ojos.

-Märkit: vaya vaya... así que era cierto que tenías parte del poder de la diosa –volvió a reír-. ¡Será más divertido!