CAPÍTULO 57

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POV EVAN

–No podemos ser pequeños toda la vida mamá. – dijo Ethan.

–Lo sé, pero podían ser diez años más. – reímos.

–Por cierto ¿Dónde está la enana? – pregunté.

–Es cierto, aún no llega. – dijo Ethan y miramos a mamá, ella nos sonrió.

–Mamá… – dije.

–No lo sé, se perdió. – dijo mamá con cara de inocente.

–Seguramente con ese amiguito que tiene. – dije.

–Miren par de celosos, ustedes van a ser papás, ya tienen a sus parejas, Ellie también tiene que tener una pareja y tener hijos.

–No, no, ella está pequeña aún. – dijo Ethan.

–Ella sabe lo que hace. – dijo mamá. – Ustedes ya comenzaron su familia, es momento de que ella sola ¿escuchan? SOLA, defina su futuro, no ocupa un par de hermanos y un padre celoso.

–Mamá, la estas apoyando. – le dije.

–Es lo que hago con mis hijos, los estoy apoyando a todos.

–Sí, pero esa es otra situación, Ellie es una niña, no conoce lo malo que pueden llegar a ser los hombres. – le dije.

–¿Y qué son ustedes, gorilas o qué? Ethan y Evan, es momento de que Ellie busque su felicidad, así como ustedes lo han hecho, ya no es una niña, hace mucho tiempo que se convirtió en una mujer, pero ustedes no lo quieren ver, se acabo esta charla sobre la vida amorosa de Ellie, ya es tarde y ustedes no han llevado la comida.

–Mierda. – dije.

–¡Evan! – me reprendió mamá.

–Lo lamento mamá, no quise decir eso.

Llevamos todo al patio y comenzamos a preparar el pollo, cuando todo estuvo listo, nos sentamos a comer, me senté al lado de Alisa y la abracé por la espalda, ella recargó su cabeza en mi hombro.

–Es increíble que hace unos meses la casa se sentía sola sin niños corriendo y ahora tenemos a la pequeña futbolista. – dijo papá – y vienen tres bebés más.

–Abuelito, voy a ser futbolista y doctora. – dijo Emily.

–Bueno Emily, ya que eres una futbolista profesional, tendrás que enseñarles a jugar a tus hermanitos y a tu primito como jugar. – dijo mi hermosa novia.

–Sí tía, yo voy a ser su entrenadora, James, Elliot y Elijah van a ser mis alumnos y les voy a enseñar todo lo que sé, para que sean mejores jugadores que el tío Evan, porque no sabe jugar. – dijo bajito y todos se rieron.

–Claro que sé jugar, te gano.

–Tío cuando corremos, nunca me alcanzas.

–Es que tú tío ya está viejito. – dijo Alisa.

–Yo no estoy viejo. – me quejé.

–Mi amor, estamos de acuerdo en que no tienes la misma energía que Emily, menos la edad. – todos se rieron.

–¿Me estás diciendo viejo?

–Claro que no mi amor, tú sigues joven. – me sonrió Alisa y me besó suavemente y miró a Emily diciéndole que no era cierto, continuamos comiendo, cuando terminamos, limpiamos y nos sentamos nuevamente para pasar tiempo juntos toda la familia.

POV ALISA.

Todos estábamos pasándola muy bien hablando y jugando.

NUESTRO PEQUEÑO SECRETODonde viven las historias. Descúbrelo ahora