C⁵³. Interferencia

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Emma:

Sigo sintiendo el temor, ahora más al ver cómo tomas mi mano y susurras tu amor por mi antes de entrar a la bodega donde nuestro mayor enemigo espera.

-Ey, mírame-el chasquido de tus dedos y el tacto del metal que toca mi piel me despiertan del mareo que quiere rondar sobre mi cabeza-seremos libres y eso es lo único que debe ocupar tu cabeza, no te me vayas antes de acabar con él.

-Algo quiere que vuelva-susurro mirando el piso.

-Pero yo quiero que te quedes, estamos a un paso de ser libres completamente aquí, en este mundo perfecto Emma.

-Es más fuerte que yo-quiero llorar, algo me dice que lo haga tanto como huir y despertar de lo que sea que es esto.

-Nada es más fuerte que nosotros cariño-su cuerpo completo me abraza-somos uno solo, recuérdalo.

*1 flashback fuera de*

-Uno solo-no sé si es mi voz interior o yo, tratando de mover los labios y hablar.

Mis párpados están cerrados, siento el corazón débil como mi cuerpo entero y el mareo, el maldito mareo que no desaparece. Se queda como una cicatriz, no en el pecho, en la mente.

-Pequeña y débil Emma, habría apostado por ti y tu fortaleza, pero ahora veo que eres aún más débil que tu madre o cualquier otra chica en tu mismo lugar.

Ese típico golpe no se siente, pero se de dónde viene y para que lo hace.

-No vuelvas a hacer eso-advierto.

-Te fuiste-me mira-otra vez.

-Hay respuestas en ese lugar Biel.

-¡No las hay Emma!-alza la voz y al ver su error suspira-solo un mundo donde no estoy yo.

-Lo estás, se que lo estás-tomo sus manos y las junto pegando las a mi pecho.

-Es mentira.

-Yo te siento...

Suelta mis manos y mueve su cuello en círculos despacios para después tomar aire y guardar el arma detrás de la gabardina negra que cubre su camisa blanca.

-Tengo miedo-me inquieto sin razón.

No hay respuestas, solo toma mi mano con un poco de fuerza y me ayuda a entrar a la bodega.

Su rostro, es lo primero que veo al entrar y lo último que no quisiera llevar conmigo al salir.

-Siempre dije que eras hermosa-su vaso de licor va a mi dirección-lastima que no sepas elegir.

-Quiero mi libertad-dice con exigencia, entonces veo a Biel confundida.

¿Su libertad?

-Nuestra libertad-corrijo sus palabras sin acierto.

Su cabeza gira hacia mi y ríe mientras niega repetitivas veces.

Fragmentos De Un Amor Incomprendido [LIBERTAD Y CONDENA] © +18 TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora