Capítulo XXXV.

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Muchas gracias por esos 400K y por continuar leyendo esta historia. Nunca creí que llegaría a tanto. ¡Voten y comenten!
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Anastasia POV.

Me acurruco sobre el pecho de Christian mientras él acaricia mi espalda con dulzura. Me siento feliz y a salvo. Hacer el amor con él fue algo que no podría describir. Fue tan dulce, delicado... Me susurró una y otra vez lo hermosa que era mientras me acariciaba y me hizo sentir la mujer más feliz sobre la faz de la tierra.

-Te amo. -Murmuro y siento como el color carmesí se apodera de mis mejillas -Gracias por ser un esposo maravilloso y por ser tan dulce conmigo. -Suspiro con una sonrisa en mis labios.

-No tienes nada que agradecer, Ana. -Besa mi cabello -Te amo y mi misión en la vida es hacerte feliz, ya te lo dije.

-¿De verdad soy hermosa? -Pregunto mientras enredo mis dedos entre los vellos de su pecho.

-Eres la mujer más hermosa del mundo. Me encargaré de que lo veas por ti misma muy pronto. Conseguí una cita con la Dra. Harrison para hoy mismo, ¿Está bien? -Acaricia mi mejilla y escuchamos el sonido de la puerta al abrirse. Christian nos cubre con una sábana rápidamente para ocultar nuestros cuerpos desnudos.

Ruedo hasta quedar sobre mi lado de la cama y me sonrojo escandalosamente al reconocer las pequeñas pisadas de mis hijos.

-¡Mami! -Gritan al unísono antes de abalanzarse sobre mí. Hago una mueca al sentir que mi cuerpo duele un poco.

-Hola, mis amores. ¿Cómo están? -Beso primero la mejilla de Phoebe, quien está colgada a mi cuello y luego la frente de Ted.

-Bien mami. -Ted se aleja de mi lado y escucho cómo saluda a Christian -Papá, llegaremos tarde a la escuela. -Dice con voz confusa.

-¡Ya quiero decirle a mis amigas que mi mami volvió! -Chilla Phoebe y comienza a saltar sobre la cama emocionada mientras aplaude.

-¿Ya se bañaron? -Pregunto con una sonrisa. Esto es algo muy normal, se siente como una verdadera vida familiar.

-No, Sawyer estaba jugando con nosotros a los dragones. -Responde Ted.

-¡A bañarse entonces! -Dice Christian y mis niños me besan antes de salir corriendo fuera de la habitación -Usted también necesita un baño, Sra. Grey. -Murmura contra mi oreja mientras la olisquea. Suspiro suavemente y me acerco a sus labios para besarlo suavemente.

-¿Me ayudará a enjabonarme, Sr. Grey? -Me sonrojo al darme cuenta de que esas palabras salieron de mi boca.

-Estamos para complacer... -Sonrío en grande al escuchar esas palabras.

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Luego de una ducha que duró alrededor de veinte minutos y donde me sentí completamente cómoda junto a Christian, me siento sobre la cama envuelta en una bata de algodón.

-¿Conservaste mi ropa? -Pregunto con voz suave mientras escucho los movimientos de Christian dentro de lo que supongo es un armario.

No responde, pero siento que se acerca a mí lentamente. Mi piel se eriza cuando toma mi mano y sutilmente me ayuda a levantarme de la cama. Lo acompaño hasta lo que es un gran armario y posa su mano sobre la mía para luego acariciar un conjunto de prendas.

-¿Son mis cosas? -Pregunto sorprendida. En casa de Jailene sólo tenía un par de vestidos, dos camisetas y un pantalón de mezclilla.

-Todo es suyo, Sra. Grey. -Poa sus labios sobre los míos y sonrío mientras enredo mis dedos en su cabello y pego mi cuerpo al suyo. Es una respuesta natural de mi cuerpo a su cercanía y no pienso oponerme a ello.

Cincuenta Sombras en el Ayer©.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora