Capítulo 63 - NO.

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Llegamos al ministerio y corrimos hacia los ascensores que nos llevarían al departamento de misterios.

Llevábamos las varitas en la mano cuando llegamos al pasillo de ladrillos negros del departamento de misterios.

Caminamos todos en piña, en silencio, mirando alrededor.

—    Aquí es — dijo Harry.

Avanzamos por el pasillo y al entrar en el departamento vimos estanterias y estanterias de bolas de cristal, como las que había en adivinación.

Iluminábamos con nuestras varitas mientras Harry buscaba el sitio exacto que había visto en sus sueños.

Corrió, alejándose de la formación, y paró en una intersección vacía.

—    Debería estar aquí — dijo Harry.

—    ¿Harry? — dijo Neville — Ahí pone tu nombre.

Harry cogió la pequeña bola de cristal que empezó a iluminarse cuando él se acercó

Harry se quedó absorto mirando la bola, que le iluminaba la cara mientras empezaban a escucharse ruidos en el departamento.

—    ¡Harry! ——llamó Hermione, haciendo que este la mirara.

Delante de nosotros había un hombre, un mortífago con mascara dorada que avanzaba hacia nosotros con paso seguro.

—    ¿Dónde está Sirius? — preguntó Harry.

—    Deberías aprender a ver la diferencia entre los sueños y la realidad — dijo Lucius Malfoy quitándose la máscara. Viste solo lo que el Señor Tenebroso quiso que vieras. Ahora, entrégame la profecía.

—    Asi que maldición imperius ¿eh? — le dije, apuntándole con la varita.

—    Si nos haces algo la romperá — dijo Harry cuando la risa de una mujer resonó desde detrás de Malfoy.

—    Sabe cómo jugar — dijo Bellatrix, mi tia la loca — Mi pequeño bebito... Potter. Y mi sobrinita la traidora a la sangre.

—    Bellatrix Lestrange — dijo Neville, dando un paso al frente.

—    Neville Longbottom, ¿no es así? ¿Qué tal mamá y papá? — preguntó Bellatrix.

—    Mejor ahora que van a ser vengados — dijo Neville levantando su varita a la vez que Bellatrix la suya.

—    Vamos a calmarnos todos — dijo Malfoy — por favor. Lo único que queremos es la profecía.

—    ¿Por qué me necesitaba Voldemort para conseguirla? — preguntó Harry.

—    ¿Te atreves a pronunciar su nombre? — preguntó mi tia — ¡Asqueroso sangre sucia!

—    Tranquila, es solo un chico curioso ¿a que sí? — dijo Lucius Malfoy — Las profecías solo pueden recogerlas aquellos para quienes fueron concebidas. ¡Qué suerte para ti!

Estaban rodeándonos en aquella intersección, Luna y Ron apuntaban a un lado, Hermione y Neville al otro y Ginny y yo hacia atrás.

—    ¿Cuál es la razón de la conexión entre tú y el Señor Tenebroso? — preguntó Malfoy — ¿Por qué fue incapaz de matarte cuando eras solo un infante? ¿No quieres saber el secreto de tu cicatriz? Todas esas respuestas están ahí, Potter... en tu mano. Solo tienes que entregármela después yo te enseñaré todo.

—    He esperado catorce años — dijo Harry.

—    Lo sé — dijo Malfoy.

—    Imagino que puedo esperar un poco más — dijo Harry — ¡Ahora!

Legado de dos rebeldes: Selene [Con Fred Weasley]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora