Un nuevo enemigo

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Peter y Gwen se encontraban dormidos en la cama, juntitos, sin nada que cubra sus cuerpos con salvedad de una sábana. al lado de la cama, había un pequeño paquete gris roto sobre el despertador. La rubia despertó y lo primero que vio fue a su castaño dormido. Gwen sonrió y besó la cabeza del menor. Estaba feliz de despertar con él a su lado todas las mañanas, y esta vez estaba más feliz por la noche mágica que tuvieron.

Gwen vio el despertador; había despertado 10 minutos antes, por lo que regresó su atención a su novio y lo empezó a acariciar delicadamente para no despertarlo.

Gwen: Petey-una sonrisa se dibujó en su rostro mientras acariciaba a Peter-, estoy feliz de haber tenido esa experiencia tan mágica contigo, con el hombre al que amo.

Lo siguió mimando hasta que sonó el despertador; el castaño al parecer tenía el sueño muy pesado, mientras que la rubia apagó el dispositivo, se levantó de la cama, se puso su ropa interior y su pijama, tomó una muda de ropa limpia y fue al baño a ducharse. Una vez bañada y vestida, bajó y dejó su ropa en el lavarropas del sótano y luego fue al comedor, en donde se encontraba May.

Gwen: Buen día, May.

May: Hola, Nancy-puso un vaso con jugo y un plato con frutillas delante de la rubia, y se sentó frente a esta también con sus frutillas y su vaso-. ¿Cómo te fue ayer?

Gwen: Bien. Afortunadamente me fue bien en mi primer día en la heladería-le dio un sorbo a su jugo-. Hacía un poco de frío, pero me fue bien-las dos rieron divertidas.

May: Me alegro mucho-comió unas frutillas-. Y, ¿qué hiciste después? ¿Saliste con Peter?

Gwen: De hecho sí. Fuimos a un club de jazz del barrio.

May: ¿Enserio?-Gwen asintió sonriente-¿Cómo la pasaron?

Gwen: De maravilla-sonrió enamorada-. Bailar con Petey fue tan increíble y tan lindo…Jamás voy a olvidar ese baile, lo voy a atesorar en mi memoria y en mi corazón-May sonrió con ternura, ya que pudo notar el brillo en los ojos de Gwen mientras hablaba de su baile con Peter.

May: Eres oro Nancy.

Gwen: Gracias…-se sonrojó por el halago de su "suegra"-…El que piense eso de mí…me hace muy feliz.

May: Jaja…-vio a su nuera por unos segundos y su semblante cambió a uno de preocupación-¿Qué te pasó en el cuello?

A Gwen se le heló la sangre…Tenía que inventar algo, y rápido…

Gwen: Peter y yo…quisimos cocinar algo antes de ir al club…y…me quemé-May arqueó una ceja.

May: ¿En el cuello?-la rubia asintió, más pálida de lo que ya era-Así que quisieron cocinar, y terminaste con dos quemaduras convenientemente en el cuello…

Gwen: Así es…-esperaba a que May se lo creyera…

May: Nancy, trabajo en un hospital. Las quemaduras en la piel son de color rosada o roja, y no de un color morado.

Gwen:…-una gota de sudor cayó por su sien-Fueron 30 años buenos de vida…Me gradué con honores, viajé a otro universo, y conocí al amor de mi vida. Definitivamente no tuve una vida larga, pero sí buena.

May: Así que ya dieron ese paso-lo descubrió-. Espero que hayan usado protección.

Gwen: S-sí…La usamos.

May: Bien.

Gwen: ¿No está enojada?

May: Claro que no querida. Lo que hicieron ayer es algo que las parejas siempre hacen tarde o temprano. Pero ahora que lo pienso, no obligaste a Peter, ¿o sí?

The Amazing Spider-Man: Eres mi mundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora