Boy or Girl? ¡! ChanJin !¡

28

—¿A quién le dijiste Oppa?—Hizo una mueca confundida.

—Señora, Hwang—Christopher apareció detrás algo apresurado.—Vimos una película de comedia y él me llama así en forma de broma—Rió nervioso.

Hyunjin asintió rápido, sintiendo como su corazón estaba más que acelerado y el sudor le hacía sentir calor.

—Nhm...—Encerró sus ojos.—¿Y qué significan los vestidos en tu cuarto, Hyunjin?—Se cruzó de brazos. Las manos de la chica comenzaron a temblar.

Chris miró el pastel y reaccionó, se acercó y tomó la caja para llevarla a la cocina y evitar que cayera al suelo.

—¿Vestidos...?

—Si, vestidos—En su voz se podía notar la molestia.

—¿No que tú novia te las trajo para que las cuidaras mientras se mudaba de casa?—Interrumpió Chris, la mujeres voltearon a verlo sorprendidas. Pero la menor sonrió agradecida.

—Si, me pidió que las dejara aquí porque en la mudanza podían ensuciarse—Asintió.

—Ya veo...—Suspiró.—Asi que...Tienes novia ¿Cómo se llama?

Y antes de que Hyunjin pudiera contestar, el timbre sonó.

—Oh...

La pelinegra se dio la vuelta y abrió la puerta apenas unos centímetros, encontrando a Sana. Y no pudo estar más agradecida con el universo.

—¡Mamá! Mira, llego mi novia!—Habló fuerte para que todos pudieran escucharle. Sana agrandó sus ojos y frunció su ceño.—Por favor...Finge ser mi novia...—Pidió en un susurro.

La pelirrosa suspiró y asintio.

De todos modos Chris le había comentado que su madre llegó y comenzó a revisar las cosas de la chica,y que es muy cerrada de mente.

—Bien...

Hyunjin abrió totalmente la puerta y dejó pasar a la bonita chica, que tenía puesto un vestido negro el cual llegaba hasta casi sus rodillas, junto con joyería delicada.

—Buenos días, señorita Hwang—Hizo una notable reverencia.—Soy la novia de Hyunjin, es un placer conocerla—Sonrió dulce.

La señora pestañeó varias veces.

—Que linda...

Hyunjin rascó su cuello nerviosa y cerró la puerta.

—Mamá, debo irme con mi novia arriba, quiere ver como están sus vestidos—Sonrió forzosamente y tomó la mano de la mayor.

—Claro...

Y sin más, el par de chicas se fue al cuarto de la menor, y el silencio fue notorio.

—Señora, Hwang ¿Quiere pastel?—Ofreció el niñero amablemente.

—¿Tú le dejaste tener novia?—Lo miró seria.

—¿Qué?

—Hyunjin no tiene permitido tener novia, ni tampoco tenerla dentro de la casa, podría embarazarla—El pelimorado sonrió molesto.

—¿Disculpa? Tiene casi diecisiete, y es bastante maduro para su edad, no la va a embarazar—Rodó sus ojos.—Además ¿Qué clase de reglas son esas? Ni siquiera está en la casa, y tampoco me comento usted nada al respeto

—¿Estás cuestionando mis reglas, en mi casa?—Frunció su ceño. Bang quiso reír.

—No asuma eso, solo digo verdades, usted no me informó que no podía traer parejas a la casa, solo me dijo que nada de fiestas o salidas en la noche, él se ha portado muy bien en cuanto a eso, y casi no invita a sus amigos—Caminó a la cocina y comenzó a cortar el pastel. La mujer lo siguió.

—Estás despedido

—¿Qué?—Levantó la mirada, deteniendo el corte del trozo de pastel a la mitad.

—No estas cuidando como debes a mi hijo—Respondió fría.

—Está cometiendo un grave error—Apoyó el cuchillo en la mesa y tragó saliva.—Hyunjun se siente cómodo conmigo, estuve mucho tiempo para que confiara en mi, si me despide probablemente la próxima persona no le cuide como se debe

—Me importa poco como le cuide, no cumpliste las reglas que mi casa tiene

—Pero no las sabia...

—Todos saben que menos no deben andar metiendo a sus novias en sus cuartos sin vigilancia—Hizo una mueca de asco.—Seguro ahora mismo deben estar haciendo alguna cosa asquerosa

—Maquillas bien—Sonrió encantada, quedándose lo más quieta posible mientras la menor pasaba sombra rosa por su ojo derecho.

—Gracias...Aún estoy aprendiendo a mejorar—Suspiró.—No soy de maquillarme porque no salgo hace tiempo.

—Yo me maquillo hasta para ir a la Universidad—Rió.—Y a veces hasta para ir al Supermercado solamente

—Oh...A mi me encantaría hacerlo...

—Puedes hacerlo, de todos modos los idols masculinos lo hacen—Se encogió de hombros.—No va a haber diferencia si llegas a hacerlo

—Tienes razón...—Sonrió más segura.