¿Es tarde?

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Narradora.

Robin se dirigía a Arkham Asylum, tenía el corazón latiendo al mil, estaba ansioso y nervioso por ver a _______, muchas ideas cruzaban su mente, estaba muy inquieto.

Finalmente estuvo frente al horrible edificio. Una semana que se había sentido como una eternidad por fin se cumplía.

Bajó de su moto y se acercó a la reja del lugar, un guardia joven hacía guardia.

- Nadie me informó que el Chico Maravilla vendría hoy.- habló al acercarse a Robin.

- No solemos avisar.- contestó Dick serio.- Batman me envía.

El guardia solo asintió y abrió la reja. Robin continuó su camino, subió las escaleras para llegar a la entrada y pasó la puerta. Saludó a los guardias y paso por el filtro de seguridad para finalmente del otro lado encontrase con el doctor muerte que había "atendido" a _______.

- Chico Maravilla, una inesperada sorpresa verte aquí.- habló el doctor dejando ver más sorpresa de la esperada.

- Batman me envía.- volvió a explicar Robin- Vengo a darle seguimiento a un caso que trajimos hace poco.

-Si me disculpa joven Maravilla, creo que Batman debería considerar mandar a alguien más.- comenzó el doctor y el nombrado lo miro duramente- Digo, este lugar no es para un chico joven como usted.

-Aprecio su preocupación doc, pero soy capaz de manejar esto.- contestó- Así que le agradecería a dónde ir.

-Claro, sígame- exclamó molesto el doctor.

Ambos caminaron entre los pasillos del asilo, adentrándose en el edificio. Al pasar por algunas celdas Robin lograba escuchar lamentos y gritos, pero no dejaba que eso lo distrajera, se recordaba a sí mismo qué clase de personas acababan ahí.

- Llegamos.- anunció el doctor.- Está de más decir que tenga cuidado, la chica no es una amenaza y si lo fuera estoy seguro que puede manejarlo.

- No se preocupe.

El doctor asintió y abrió la celda lentamente, estaba oscuro por dentro, no se veía nada.

- Adentro se encuentra el apagador de la luz.- indicó el doctor.

- Entendido, puede cerrar, yo le indicaré cuando necesite salir.- dijo Robin.

-Me disculpara pero solo puede permanecer 15 minutos dentro.- dijo el doctor, Dick solo lo miró un momento y entró.

Narra Robin/Dick.

Miré la celda, no pareciera estar alguien adentro, aún así avancé y la puerta no tardó en cerrarse. Prendí la luz y mis ojos se inundaron de lágrimas casi al instante al ver la celda iluminada.
________ se encontraba en el suelo, hecha bolita solo podía verla de espaldas, sin dudarlo un segundo me acerqué a ella.

-______-hablé suavemente mientras la tomaba en mis brazos. Estaba fría y sin señales de movimiento, mi cuerpo entero se tensó y el miedo me invadió. - ¿________?

La tomé para estar cara a cara, le quité el cabello que le cubría su rostro y al verlo solo pude llorar. Su cara estaba golpeada, tenía sangre seca saliendo de su nariz, moretones en mejillas y labios. Además, estaba muy delgada. En todo este tiempo de conocernos nunca la había visto así, tan pequeña, tan frágil.

-¿______? Soy yo, Dick.- hablé nuevamente esperando que abriera los ojos.

Pasaron segundos que se me hicieron eternos y comenzó a moverse. La vida regresó a mí, seguía con nosotros.
Lentamente abrió los ojos, estaban rojos y hundidos. Me observó un momento, me quité el antifaz para que me reconociera mejor.

-¿Dick?- habló confundida.

-Soy yo- respondí con una sonrisa. Ella río un poco y me extrañé ante esto.

-¿En serio muerte?- habló viéndome.- ¿Muero y mi última ilusión en este mundo es Grayson? Si que tienes un sentido del humor jodido.

- ¿De qué hablas?- pregunté. Me miró ilusa.

-¿Qué harás? ¿Jurarme que me sacarás de aquí?- preguntó sarcástica.

Con gestos de dolor se reincorporó para sentarse en la cama de la celda.

-Adelante, lléname de promesas vacías.- cerró los ojos y suspiró.- Al menos dame eso.

-________, no soy una ilusión, soy yo. Estoy aquí frente a ti.- me paré frente a ella.

-Es imposible. El idiota de Grayson no aparecería por aquí.

-Pues créelo, estoy aquí. No pensaba dejarte aquí.- fue hasta ese momento que me dí cuenta que traía una camisa de fuerza que le limitaba el movimiento.
Me acerqué para quitárselo, ella lo dudo un momento pero me dejó ayudarla. Desabroché la camisa pero me detuvo de quitarla.

-No traigo nada abajo.- explicó.

Me sonrojé levemente, pero al instante pensé cómo se la pusieron entonces.

- ______, ellos te ...

-No digas nada, por favor. Lo último que quiero es que sientas pena por mí.

-Traigo una camiseta bajo el traje, déjame dártela, por favor.

-No es necesario.

-Por favor.- insistí.

Ella accedió. Me quité la parte superior del traje, ella me observaba sin embargo no de una manera curiosa, más bien alerta, esperando algún movimiento ajeno o amenazante. Me quité la camiseta y se la ofrecí.

-Gracias, pero aún así necesito ayuda para quitarme la camisa de fuerza.

Nos miramos un momento y me acerqué.

-Cerraré los ojos, ¿está bien?- dije para no hacer un momento incómodo.

-No es nada que no hayas visto Grayson.- respondió.

Aún así me dió la espalda y le ayudé a quitarse la camisa. Por un momento su espalda desnuda estuvo frente a mí y no era para nada la de antes, estaba llena de moretones, heridas frescas y en proceso de cicatrización. Ella se puso rápidamente mi camiseta y se volvió a sentar en la cama.
La observé un momento, el silencio se expandió en el cuarto.

-Vete de aquí Dick- habló algo bajo.

-_______,- me acerqué y me arrodillé frente a ella.- lo siento mucho. Pero hoy sales de aquí.

La miré a los ojos, estos estaban perdidos, abiertos pero sin emoción alguna. Esto me partía por dentro, sabía que en parte era mi culpa, yo se la llevé a Batman, la dejé en su terreno y él no desaprovechó. No fui capaz de controlar la situación.

Me levanté y me acerqué a una pared con una ventana bloqueada, instalé rápidamente el dispositivo que nos ayudaría más tarde y regresé con ella.

-_______-le hablé, se veía más consiente de la situación.- ¿permanecerás en la celda hasta la noche?

-No lo sé.- contestó.- Me sacaran si les apetece. Pero puedo intentar quedarme aquí.

- Okey- mire mi muñeca con el cronómetro que dejé corriendo cuando entré, ya casi se nos acababa el tiempo.- Intenta alejarte de esa pared.- señalé la pared de la ventana.- Por ahí te sacaremos.

-¿Sacaremos?- preguntó.

- Sí, no hay tiempo de explicar pero confía, ¿okey?

Robin O Dick Grayson-Robin & TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora