Robin O Dick Grayson-Robin & Tú

No importa, solo hazlo.

Narra _______

Escuché la puerta abrirse a mis espaldas pero no hice caso, escuchaba voces cerca pero no me importó, ¿qué podía hacer? Estaba débil, era el tercer día que se negaban a darme de comer pero el séptimo que me daban la golpiza de mi vida. El doctor ya no buscaba información, después de todo dejó de hacer preguntas, ahora todo lo hacía por gusto, disfrutaba torturar, golpear y denigrar a todos aquí. Yo era nueva así que se entretenía bastante conmigo.

De pronto sentí que me tomaban, pero no para arrastrarme fuera de la celda, solo me mantenían en unos brazos. Al abrir los ojos me encontré con una mirada familiar, unos ojos azules que me miraban con tristeza y pena. Era Dick o al menos eso piensa mi cabeza.

¿Qué tan jodido te tiene que dejar un lugar para ver a la última persona que quieres ver en este momento? ¿Por qué él? Realmente no esperaba volver a verlo, después de irse pensé que se olvidaría de mí y regresaría a su vida de héroe. Pero aquí estaba, mi mente lo trajo de vuelta.

Después de unos minutos comencé a comprender que no era mi mente, él realmente estaba ahí. Mi cabeza comienzo a dar vueltas, me senté en la cama tratando de aclarar mis ideas.
Dick notó la camisa de fuerza, me ayudó a quitarla y vaya, el liberar mis brazos fue un alivio, sentía que la sangre volvía a circular y respiraba mejor.

Me ofreció su camiseta y una vez que me la puse y lo ví me topé con su pecho desnudo, lo observé un momento mientras se volvía a poner el traje. Nada en él había cambiado, su piel, su forma, seguía igual.

Me hablaba pero no entendía todo lo que decía, mi mente estaba borrosa, apenas estaba volviendo en mí.

-_______-habló.- ¿permanecerás en la celda hasta la noche?

-No lo sé.- contesté un poco más conciente.- Me sacaran si les apetece. Pero puedo intentar quedarme aquí.

Lo había hecho con anterioridad, atacar a los enfermeros o al guardia para no salir, aunque el gusto no dura a mucho y el castigo era duro.

- Okey- miró su muñeca.- Intenta alejarte de esa pared.- señaló la pared con una pequeña ventana.- Por ahí te sacaremos.

-¿Sacaremos?- pregunté al notar el plural en su frase.

- Sí, no hay tiempo de explicar pero confía, ¿okey?

Asentí ligeramente. Se levantó para irse pero lo detuve.

-Tienes que ponerme la camisa otra vez.-hablé- Sino sospecharán y me cambiarán de celda.

El se acercó y me ayudó a ponerme la horrorosa prenda.

-Apriétala bien, se darán cuenta si está floja.- indiqué.

-Pero te lastimaré si lo hago.

-No importa, sólo hazlo.

Él dudo por un momento pero obedeció. Pareciera que justo en tiempo porque la puerta se abrió y el doctor habló indicando que Dick debía irse. Él intercambio algunas palabras con la persona y ambos se fueron cerrando nuevamente la celda.

Volví a la cama y me recosté, "no importa, sólo hazlo" esa frase ha estado presente en toda mi estadía, me la repetía innumerables veces buscando valor para seguir de pie y lo había logrado. Realmente sentía que el tiempo en este lugar se había detenido, sé que ha pasado una semana pero se ha sentido como un año o más, el tiempo aquí es diferente, más lento y doloroso.

¿Cómo había terminado así? Estando en el infierno de Gotham. Me sentía vacía, sin saber o tener idea del qué pasará o haré. Fue entonces que entendí porque mi tío era cómo era, su odio, su valor, su sed de venganza, él había acabado aquí hace tiempo. Lo admiro en ese aspecto, él estuvo más tiempo y sobrevivió, se hizo más fuerte y logró salir de aquí.

Me quedé un momento inundada en el silencio del cuarto, mis ideas iban y venían.

Soy una Cobblepot, tengo el valor y fuerza para aguantar más que esto y lo haré. No dejaré que este lugar acabe conmigo, si él pudo yo también lo haré.

Cerré los ojos, me convenía descansar un rato, antes de que comience el show. Puede que sea una tonta por confiar en las palabras de Grayson, pero está decidido, esta noche salgo de este infierno, con o sin ayuda.

No importa, sólo hazlo.

Narradora

Robin salió sin hacer gesto alguno de Arkham Asylum, subió a su moto y emprendió camino al punto de reunión para ver a Johan y Aspen. Repasarían por última vez el plan.

Una vez en los muelles, cerca de los contenedores. Miró a su alrededor, ellos todavía no llegaban. Se recargó en uno de los contenedores y cerró los ojos un momento, comenzó a repasar en su mente todo lo sucedido en Arkham, de un momento a otro se llenó de odio y rabia, gritó en un intento de desahogarse pero no le fue suficiente. Se dió la vuelta y comenzó a golpear el contenedor metálico.

- ¿Cómo fui tan estúpido?- escupió en medio de su crisis. Poco a poco la intensidad de sus golpes disminuyeron, hasta quedar de rodillas frente al contenedor. Respiraba agitadamente y había dejado salir una cuantas lágrimas. Se calmó a sí mismo, suspirando pesadamente se reincorporó y limpió la cara.

No tardó en escuchar pasos y se puso serio.

-¿Y bien?- habló Aspen llegando.-¿Pudiste entrar?

-Afirmativo.- respondió el del antifaz.

-Perfecto. Podemos proseguir con el plan.- dijo Johan complacido.

Repasaron el plan, asegurando cualquier detalle, pasó un buen rato cuando por fin estuvieron de acuerdo a que todo marchaba bien.

-Eso es todo.- habló Johan.- Te veremos en el punto de reunión.

-De acuerdo.- respondió Robin.

Johan comenzó a caminar, alejándose de él.

- Vámonos.- indicó cuando notó de Aspen no lo seguía.

- Te alcanzo luego.- habló el chico con la mirada en el joven héroe.- Quiero un momento a solas con él.

- Por mí no hay problema, pero si por tu estupidez jodes el plan.- Johan lo miró pesadamente.- Yo mismo le entregaré tu cabeza al Pingüino.

- No pienso hacer nada estúpido.

Johan los miro a ambos, se dio la vuelta y se alejó.