Fate Grand Order: Dragon x Servants

Singularidad C+: La Guerra de 100 Años del Dragón Enloquecido (Capítulo 6)

Un pesado suspiro escapó de entre los labios de Mash cuando otro golem fue finalmente aplastado por su escudo. Contemplando sus alrededores, asintió lentamente. Ya no quedaban soldados humanos en el campo de batalla, y los enemigos que antes lo inundaban habían sido reducidos a un puñado de hombres lagarto y un último golem.

Escuchando pasos detrás suya, la joven giro para ver a un servant que portaba una espada caminando a paso rápido en su dirección, con su arma desenvainada y una expresión seria en su rostro.

"Le agradezco la ayuda a mis tropas para su retirada señorita, sin su ayuda no habrían podido sobrevivir tantos de mis hombres. Le recomiendo descansar ahora, es mi turno de hacerme cargo del frente de batalla."
Las palabras del hombre alcanzaron a la joven escudera, quien únicamente pudo asentir de forma extenuada en respuesta, antes de retroceder un paso. Usando su escudo como punto de apoyo, vio cómo el hombre cargaba en dirección de los últimos enemigos que quedaban.

Moviendo lentamente su mirada, contempló en la distancia a los otros dos servants de su Master. Sus combates no parecían tan cerca de terminar como el suyo.

Secando el sudor de su frente, la joven negó rápidamente con la cabeza mientras que una mirada determinada y firme se reflejaba en sus ojos.

"Saber-san! Iré a ayudar a mis compañeros! Cuando termine, venga por favor!"
Con todas sus fuerzas, la joven escudera gritó aquello al servant, suponiendo su clase por su arma. En respuesta a sus palabras, éste le dedicó un rápido asentimiento mientras que se deslizaba a un lado, dejando pasar a un hombre lagarto a su lado antes de decapitarlo con un tajo rápido.

Viendo eso, la escudera salió corriendo en dirección a su compañero que vio con más problemas.

En un borrón carmesí, la lanza de Cu Chulainn volvió a desviar otro embate del espadachín con quien estaba combatiendo. Sin embargo, antes de que el semidiós pudiese girar su arma para preparar un ataque, se vio obligado a saltar una vez más cuando un rayo de energía verdosa impactó el lugar donde antes estaba de pie.

El espadachín de cabello dorado no dejó pasar la apertura y se deslizó debajo del rayo de energía, saliendo disparado en un borrón de velocidad hacia el servant de cabello azulado. Apretando los dientes en mitad del aire, Cu Chulainn giró su lanza como pudo, golpeando con ella la espada del caballero frente a él y consiguiendo desviar su embate de tal forma que sólo dejó un rasguño superficial en la piel de su torso.

Tirando de su lanza hacia él mientras aterrizaba, el servant se preparó para disparar otra estocada, cuando vio varias flechas de energía verdosa dirigirse en su dirección.

Entonces, un muro negro se alzó, bloqueando las mismas de un momento a otro...

No, el servant pronto notó que no era un muro.

"Entonces terminaste finalmente con las tropas niña?"
Con una sonrisa confiada, el hombre realizó aquella pregunta mientras que su arma finalmente salía disparada.

Como esperaba, el espadachín esquivó la estocada deslizándose a un lado, y rápidamente saltó hacia atrás cuando intentó barrer nuevamente con el arma en su dirección.

D'Eon dirigió una rápida mirada a la escena en el campo de batalla, viendo que efectivamente sus tropas ya no quedaban. Dirigiendo su mirada hacia la mariposa, permaneció en silencio unos segundos, antes de asentir lentamente.

"Seguiré entonces."
El caballero declararía en un tono tranquilo, antes de alzar su arma en una guardia una vez más, volviendo a encarar a sus oponentes.

"Hasta el final, como debe ser."
Manteniendo una sonrisa en su rostro pese a los cortes superficiales, pero sangrantes, que cubrían parte de su cuerpo, Cu Chulainn habló. Su agarre sobre su lanza se reafirmó mientras que tensaba su cuerpo, preparándose para abalanzarse.