Singularidad B+: El Imperio de los Lobos (Capítulo 19)

400 47 11
                                    


Mientras que los servants que actuaban como generales romanos se preparaban para alzar las defensas o iniciar su partida, y mientras que los dos Masters principales de Chaldea se encontraban en en sus respectivas despedidas o reuniones, Vali permanecía en las puertas de la ciudad de Roma.

No tenía nadie de quien despedirse y nadie con quien hablar, y no necesitaba preparar nada. Como tal, decidió simplemente esperar en el punto de partida.  Bikou normalmente le estaría haciendo compañía, pero el yokai quería comer algo antes de partir, y como tal había ido a revisar los almacenes de la ciudad.

"Master, cree que volvamos a encontrarnos con quien usted luchó antes?"
Escuchó la voz de su Servant, y su mirada se movió para encontrarse con Charlotte. Ante su pregunta, se mantuvo en silencio por unos breves instantes... Antes de que una sonrisa se mostrase en su rostro.

"Espero que nos encontremos con él, deseo tener mi revancha. Las cosas no serán iguales."
Vali declaró con seguridad y un tono expectante en su voz. Su mirada se movió en la dirección general donde la ciudad que iban a atacar se encontraba. Había considerado adelantarse e ir el sólo, sin embargo, disfrutaba de las peleas más no era un idiota. Tras experimentar el poder de un sólo Servant en carne propia, sabría que no podría luchar él sólo contra una ciudad defendida por múltiples de ellos.

"Serán diferentes? Cómo está tan seguro Master?"
Su Servant no pudo evitar preguntar, las dudas y la incredulidad llenando su tono y haciendo presente su preocupación.

Entonces, una mano de Vali se movió, apuntando a la Servant con quien hablaba.

"Tengo una idea, y tú me ayudarás a completarla. Eres mi Servant, después de todo, y aunque sea poco, usaré tu poder al máximo de su capacidad."
El híbrido de humano y demonio explicó, causando que la Servant de cabello castaño inclinase levemente su cabeza a un lado con confusión, dudando de las palabras de su Master.

Hasta el momento, si había una palabra para definir el viaje era silencioso. Issei había llegado a esa conclusión. Demasiado silencioso. No es que se quejase, había escuchado que más adelante en la zona de los generales romanos la charla estaba llevándose con fuerza, algo normal cuando personas como Black Star y Nero se juntaban. Vali y Bikou avanzaban en silencio, pero un silencio cómodo, aquel al que amigos de toda una vida llegan tras conocerse por años. Pero entre él y sus servants la cosa era más bien callada.

Jalter y Shyvanna iban cada una por su lado, sin comunicarse con nadie. La primera parecía perdida en sus pensamientos, aunque no pudo evitar notar las ocasionales miradas que le enviaba, aún si no entendía a que se debían. Shyvanna mostraba una expresión neutra en su rostro, sorprendentemente tranquila para alguien perteneciente a la clase Berserker, y matenía una postura recta y firme al avanzar, como un soldado entrenado al marchar. Okita avanzaba cerca suya, pudo notar una sonrisa nostálgica en su expresión y no le costó suponer el motivo, si su historia era semejante a aquella que tenía en su mundo, y no quería interrumpir la visita de su Servant a sus recuerdos. Kagetora parecía feliz, tarareando mientras que avanzaba y expectante por el pronto combate. Y, bueno, Leone...

La mujer de corto cabello rubio estaba pensativa. Se mantenía con su mirada en el suelo y el ceño fruncido mientras avanzaba, siguiendo al grupo, pero perdida en sus pensamientos.

Eso llamó su atención, y decidió que podría darle un intento a hablar con ella.

"Pasa algo? Pareces preocupada Lenoe-neesan."
Issei alzó la voz tras acercarse a ella, esperando poder recibir una respuesta.

"... Uh?"
Pareciendo confundida de que alguien le dirigiese la palabra, la Servant de clase Assassin movió su mirada y sus ojos se encontraron con los de su Master, antes de que éstos emitiesen un suave brillo, en reconocimiento de la pregunta que recibió.

Fate Grand Order: Dragon x ServantsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora