El quinto año estaba a punto de dar comienzo.
Había sido el verano más rápido desde que tengo memoria, y aunque tuve tiempo de compartir momentos con Ron, Hermione y Harry, este último estaba más raro que nunca.
Era de esperar, después de lo ocurrido con él, con El Que No Debe Ser Nombrado.
El expreso a Hogwarts ya estaba listo para salir, y esta vez yo estaba preparada mucho antes que el trío. Desde mi compartimento podía ver como se despedían cálidamente de los Weasley y subían al tren.
-La pequeña Lancaster tan rápida como siempre- exclamó Harry riendo y revolviéndome el cabello.
-¡T/n! ¡Por fin! Parece que hace una eternidad q...- Hermione no pudo terminar, Fred y George se abalanzaron sobre nosotros empujando también a Ron y a Harry y nos abrazamos entre risas, haciendo un sandwich conmigo en medio.
Creo que es así como se siente al estar en casa, de nuevo.
Las aún verdes colinas pasaban a toda velocidad a través del cristal, el viaje siempre se hacía algo largo a pesar de la conversación fluida entre los cuatro.
-¿Y arriesgarme a suspender de nuevo? Ni hablar, o pociones o adivinación, pero las dos no- dijo Ron con humor en una conversación con Hermione.
-No todos somos una posible Trelawney.., ¿no, T/n?- contestó Harry ríendose y dándome un codazo.
Rodé mis ojos y salí del compartimento en dirección al lavabo.
-Pero si es la Gryffindor francesa...
Esa voz. Ese olor. Inconfundible.
-Pero si es el Slytherin insoportable...- contesté dándome la vuelta.
Draco estaba... ¿cómo decirlo? Cambiado. Tanto su voz como su físico, ahora más maduro, pero esa sonrisa irónica y ese talento para molestarme seguían intactos.
-Yo en tu lugar me hablaría mejor, quizás sea Prefecto este año, y teniendo en cuenta lo que te gusta merodear por los pasillos a altas horas...- me miró desde arriba con una sonrisa de suficiencia- tendría que.., ya sabes, castigarte- rió.
-Ahá- rodé mis ojos fingiendo indiferencia- ten buen viaje Malfoy, ah, e ignórame. Gracias.
Era increíble lo que provocaba en mi con solo unas palabras. Pareciera que el verano no me había hecho olvidar del todo.
Continué mi camino girándome una vez más ante otro de sus comentarios:
-Ah, y, Lancaster: estás preciosa.
"Dichoso rubio platino..., espero que no me traiga este año de cabeza".
Quinto curso comenzaba.
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POLOS OPUESTOS: Draco Malfoy y tú.
Romantik"Estaba escrito, como en una profecía: Ella, una Gryffindor diferente. Él, el frío Slytherin por excelencia. La casualidad los hizo coincidir, el destino los hizo enamorarse". Una historia de pasiones prohibidas, de amor contra todo y contra todos...
