Cada día que pasaba suponía un poco más el ascenso de Umbridge, y los edictos que publicaba provocaban que el ambiente fuese cada vez más estricto.
-Harry, ¡no puede ser verdad! Tienes que informar de inmediato a alguien, torturar a alumnos es...- intentó hablar Hermione con un nudo en la garganta.
-Engancharía sus estúpidos cuadros de gatos y les prendería fuego, os lo juro- añadí yo, sufriendo por Harry.
Tenía la mano aún sin cicatrizar; un "No debo decir mentiras" parecía tatuado a cuchillo en su palma.
-Chicos, por favor. Estoy bien- dijo Harry con la mirada perdida- el tema ahora es que Él ha vuelto, y si Umbridge no quiere colaborar, tendremos que prepararnos por nosotros mismos.
En aquel momento nacía nuestra propia Orden del Fénix, nuestro propio ejército de Dumbledore, y tras un breve reclutamiento los entrenamientos estaban por empezar.
-Bien, ¡hola chicos! Ya he traído mis cosas y solo qued... ¿Em, todo bien...?- dije con una sonrisa pero un poco extrañada al ver como Harry, Ron y Hermione me miraban, como si supieran algo que yo no.
-Yo.., T/n, lo siento. No me quedó alternativa. Sé que la otra noche volviste a estar con él y es peligroso que puedas confiarle un secreto como este- dijo Hermione con cierta culpabilidad.
-Si vas a continuar con él, T/n, quizás este no sea lugar para ti...- Harry hablaba sin ser capaz de mirarme a los ojos.
-Esto es.., increíble. Supongo que me veis como una traidora- comenté extrañamente calmada.
-No, T/n confiamos en ti sólo q...
-Basta, Hermione- corté- no voy a dejar esto de lado por Draco. Ni siquiera sentimos nada el uno por el otro. No volveréis a saber nada de el, y ahora empecemos a entrenar, no hay tiempo que perder.
Aún dolida, pasamos una clase entretenida. Por primera vez conjuré un patronus y, curiosamente, era una bonita mariposa. Como la que mi madre conjuró de regalo para mi en mi 15 cumpleaños y aún conservaba.
La vida en Hogwarts seguía su curso, pero no por mucho tiempo.
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POLOS OPUESTOS: Draco Malfoy y tú.
Romance"Estaba escrito, como en una profecía: Ella, una Gryffindor diferente. Él, el frío Slytherin por excelencia. La casualidad los hizo coincidir, el destino los hizo enamorarse". Una historia de pasiones prohibidas, de amor contra todo y contra todos...
