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— ¿Kook? ¿Sucedió algo?

¡T-Tae! ¡¿Dónde estás?! ¡¿A dónde te fuiste?! —. Indagó su pequeño novio desde el otro lado de la llamada. Taehyung suspiró intentando abrir la puerta del ascensor sin botar el plato con pastel que llevaba en las manos. Una vez lo hizo, avanzó por el pasillo en camino hacia su habitación de hotel.

— Bajé un momento, fui a buscar-

Bajaste sin mí...

— Sí cómo estabas durmiendo quis-

¿Por qué no me despertaste Tae?

— ¡P-Porque quis-

— Así hubiera ido contigo. Al menos me hubieras avisado... Aunque pensé que nos ibamos a quedar aquí... ¡Tae sí no querías estar conmigo- —. Taehyung cortó la llamada. Abriendo la puerta del cuarto y dando con un Jungkook de pie a un lado de la cama aún con unas piernas temblorosas, observando el móvil con sorpresa ante su corte.

— Jungkook, bajé a buscar un poco de pastel, tranquilízate —. El castaño habló con seriedad dejando el plato en la única mesita de la habitación. Su menor apartó su mirada hacia el suelo algo afligido. No tenía intención de molestar a su novio. — Estaba durmiendo, así que tuve la idea de traerlo a la cama así que me apuré en bajar y subir rápido, nada más —.

Tomó asiento en una de las sillas de la mesa echando un ligero suspiro algo cansado. Luego lesione su brazo hacia el azabache abriendo y cerrando su mano.

— Ven —. Le pedí que se acercase. No obtuve respuesta. — Amor —. Sus bambis apenas lo miraron en lo que frotaba uno de estos. — Ven tonto —. Le dijo en un tono cariñoso. Acercando a su pequeño novio cuando este finalmente tomó su mano haciendo caso omiso.

Taehyung lo sentó sobre su regazo dejando sus piernas juntas hacia un lado. Jeongguk lo abrazó inmediatamente escondiendo su rostro a la altura de la oreja de su novio. Kim estremeció ligeramente al sentir la respiración de su nariz en esta.

— ¿Te sientes mejor? —. Indagó acariciando el lóbulo de su oreja. El menor dudó un poco antes de responder.

— M-Me arde un poco y me siento algo incómodo Tae...—. Musito a lo bajito. Kim bajó su mano hacia su pierna acariciándola a modo reconfortante.

— ¿Te lavaste ya? —. Asintió con su cabeza en lo que volvía a sentarse eguirdo para ver a su novio a los ojos. Taehyung observó esa adorable carita de bebé que le exigían mimos. Una vez más no pudo evitar pensar que era demasiado para un adolescente que apenas había dejado los dieciséis años. — ¿Y te pusite crema? —. Asintió nuevamente. — Muy bien, deja que te calme entonces... ¿fuí demasiado rudo? —. Esta vez negó.

— No pero... Ya sabe...—. Dijo haciendo un ligero movimiento de cabeza. Kim por supuesto entendió. Y aunque quisiese tomárselo cómo halago, no podía, el hecho de que su miembro fuera algo grande no era tan genial como se planteaba. — ¡¿YY sí me agarra hemorroides?! —. Taehyung negó con su ceño ligeramente fruncido al igual que su nariz. Ciertamente era una posibilidad ante el exceso de sexo anal. Pero en lo que cabe, Kim intentó no perjudicarlo.

— No amor, las veces que te vi no estabas inflamado, solo paspado a los lados por... Bueno, también ya sabes —. Jeongguk sintió el calor aglomerado en sus mejillas ante tal comentario. Lo apenaba demasiado que su novio le viese hasta la vida. Pero lo hacía sentir tranquilo que Kim estaba maduro y no tenía ningún problema con esas cosas. — Igualmente díme siempre como te sientes ¿bien? Ahora ven pastel —.

Mientras cortaba un trozo para llevarla a la boca del menor, el azabache recordaba que Taehyung había bajado sin él. Aún se sintió algo ofendido, pero más que nada preocupó por a quién se pudo haber cruzado... O abrazado... No pudo evitar poner una seria expresión viendo a su novio.

¡¿Justin Oppa?! ~『Taekook』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora