MY BABY BOY

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-¿Que te hicieron mi niño?-. Murmuró Harry acariciando la carita del chico quien acababa de despertar pues después de al menos una hora de llanto y jadeos se quedó dormidito entre los brazos de Harry. -¿Alguien te dijo algo amor?-.

Louis asintió con su cabecita mientras sentia sus ojitos picar de nuevo.

-Shh shh, no llores amorcito, estás conmigo y nadie va a hacerte nada-. Consoló acunando su carita.

Louis emitió un quejido jalando el traje de calabaza amenazando con llorar de nuevo.

-Ya te lo quito nene-. Harry ayudó al chico y le dejó en ropita interior para abrazarlo de nuevo dejando pequeños besitos en su cuello. -Te quiero-. Susurró en su oído sintiendo como Louis poco a poco calmaba los hipidos. -Te amo bebito precioso-.

Cargó al chico y comenzó a arrullarlo por la casa mientras tarareaba una canción y daba pequeños saltitos con el chico entre sus brazos.

-Mhh tengo un Lou pequeñito vestido de azul, con zapatitos blancos y delantal de tul-. Cantó Harry en voz baja mientras balanceaba su torso haciendo que Louis comenzara a cerrar sus ojitos. -Te llevaré a casita mi amor-. Susurró guardando las cosas del niño para regresarlo a su hogar.

-¿Vas a quedarte un ratito conmigo papi?-. Preguntó con vocecita adormilada.

-Claro que si mi niño-. Accedió tomando una de sus largas camisas para cubrir el cuerpo del pequeño.

Al terminar de acomodar las cositas de Louis cruzó la calle y entró al hogar el chico con discreción.

-¿Tú padre está en casa nene?-.

Louis negó mordiendo su dedito.

-Llega en un ratito-. Respondió enderezandose para que Harry pudiera verlo mientras juntaba su dedito pulgar con el índice y columpiaba sus piecitos. -¿Me llevas a mi cuarto?- pidió encajandole su dedito en la cara.

Harry asintió y cerró la puerta antes de subir a la habitación del chico sintiendo la puerta atorarse por algunos peluches que se encontraban detrás de ésta.

Louis se quejó agitando sus piecitos sintiendo a Harry bajarle y corrió a su cama para juguetear con alguno de los juguetes que se encontraban tirados por todos lados. Harry suspiró viendo al pequeño reír y comenzó a limpiar la habitación mientras le escuchaba murmurar cosas y reir entre sus juguetes.

-Muñeco feo-. Murmuró lanzando el juguete al otro lado del cuarto seguido de un peluche y comenzó a reir.

-Lou, no maltrates tus juguetes amor-. Regañó levantando los peluches , viendo una barbie aterrizar en una esquina del cuarto seguido de otra risita. -Louis es en serio bebé, no maltrates tus juguetes no te compraré más-. Repitió en tono autoritario viendo al chico asentir y abrazar el peluche que tenia en las manos.

Harry levantó la muñeca y se sentó en la cama junto al pequeño quien bajó de ésta para abrir una caja de juguetes y voltearla sacando una bolsa con un montón de ropa para la muñeca.

-¡Mira papi!- exclamó metiendo medio cuerpo debajo de su camita. -¡Aquí está Fabián!-. Comentó haciendo reir al mayor.

-Pero mira como tienes a nuestro hijo mi amor-. Comentó tomando el pequeño muñequito para quitar el polvo de su carita. -Seguro el pequeño Fabián extrañó a mamá-. Siguió el juego entregándole el juguete al niño quien rió jalando de debajo de su cama una caja con más juguetes.

Louis rió tomando uno de sus chupones y lo mordió acercando el otro a la cara de Harry.

-A- ordenó intentando meter el plástico a sus labios.