TRES

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Siempre fue algo sobre protector conmigo, pues como salíamos a las fiestas, bares, restaurantes, tiendas, todo lo que se imaginen, la mayoría del tiempo era juntos.

Incluso habíamos estado en la misma secundaria y preparatoria. Esa etapa fue algo rara, pues en ese entonces empezamos a intentar relacionarnos con las demás personas. Funcionó en su tiempo, pero siempre volvíamos a ser sólo nosotros al final del día.

FLASHBACK

Alfredo

- Entonces que te dijo, wey. - preguntó Omar - Si le gustó, ¿O qué?.

Lo miré con desprecio, rodando los ojos.

 Este pendejo ya me tenía harto con el mismo tema. A cada rato me preguntaba si a Emi le había gustado un peluche todo pedorro que le había mandado conmigo, para que yo se lo diera.

- Pues, si se lo di. - dije - Sólo me dijo que gracias, pero ella no estaba interesada.

- ¿Es enserio? - preguntó desanimado. Yo asentí - Pero, ¿Por qué?. 

Era mentira.

Nunca se lo había mencionado, mucho menos enseñado. Lo había tirado a la basura, pero existía una muy buena razón para hacerlo. No iba a permitir que Emi saliera con un pendejo que la pudiera lastimar.

- Pues, no lo sé. Sólo dijo eso. - me alcé de hombros.

Los cuatro estábamos sentados en la bardita del jardín de la escuela. Frente a nosotros, estaba el grupito de amigas de Emi, que al verme me sonrió y saludó a lo lejos. Provocando que el pendejo de Omar hablara.

- Sabes qué... Eso no se queda así. - dijo seguro Omar - Voy hablar con ella.

Se puso de pie apunto de ir con ella. Pero lo detuve.

- ¡No, wey!. Digo... - carraspeé - Es que si hay una razón. 

- ¿Cuál?. - me miró.

Emi, no me vayas a matar.

- Es que... A Emilia... Le gustan las mujeres.  

- ¿Enserio?... - me miró confundido - ¿Le gustan las mujeres?.

Asentí, según yo muy convencido.

- Chale, que desperdicio de morra. - dijo David - Tan buena que está.

Perro coraje que me dio.

- Eh, pendejo. Más respeto. - le reclamé - Te vuelvo a escuchar faltarle al respeto, y te parto tu madre.

David levantó sus manos en defensa.

- Ni modo. Ya habrá otras. - dijo Omar.

- Hay más culos que estrellas - dijo Luis.

Asentí, para que de cierta manera, decirle que era cierto.

...

- ES QUE SI TE PASASTE, JESÚS. - Emi se agarró la cabeza con ambas manos - Ahora todos en la prepa piensan que soy lesbiana.

- Que tiene, no hay nada de malo. - respondí simple.

- No, wey. Pero hay morras que se alejan cuando les hablo. Y weyes que me dicen cosas. 

- No me digas "wey", que siento feo. - la abracé por encima de los hombros - Yaa, perdón chaparra. Pero es que, ese wey es muy mujeriego. No quería que te lastimara.

- Ese ya iba a ser mi problema. - la abracé más fuerte. Escuché que ella rio. - Pero gracias, por siempre protegerme.

Se dio la vuelta, correspondiendo mi abrazo. 

Más que Amigos - JAGSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora