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ELIZABETH

Nuevamente edd y yo nos estamos arreglado, hoy me decido por unos jeans ajustados un top de cuero rojo y la chaqueta de cuero de edd, me duelen los nudillos, hoy se pusieron peor, están terriblemente rojos, morados e inchados, apenas puedo abrir y cerrar la mano, me quejo constantemente del dolor.

-¿quieres que te vende la mano?- dice mientras yo observo mis nudillos con molestia.

-si... Creo que se me infecto- asiente y va a la cocina, regresa con una venda, alchol, algodón y una pomada, yo me siento sobre la cama, y enfrente de mi se arrodilla, toma mi mano y comienza a examinarla.

-en una pelea los anillos siempre se quitan- me miro y yo a el.

-esque quería que le doliera más- se rie.

-¿lo noqueaste?- comienza a mojar una bolita de algodón en alcohol.

-es alto, y estaba como piedra, logre marearlo- apretó la mandíbula y comenzó a restregar la bolita en mis nudillos me queje.

-no te preocupes... Prometo dejarlo en el hospital- siguió limpiando.

-¿te arde?- asiento y lo hace mas suave, observo todo lo que hace. Una vez que termina toma la pomada y la esparce por mis nudillos, para este momento ya no me arden, solo duelen, después toma una venda y comienza a vendar por mi muñeca, mano y nudillos, toma un gancho y lo encaja en el final de la venda para que no se me caiga.

-lista...- su cara se levanta y entonces hacemos contacto visual por unos segundos, sus pupilas se dilatan y su boca se abre ligeramente, apenas y sus labios se separan, el la rompe con la excusa de que ira a guardar el alchol, miro mi vendaje, esta perfecto, dentro de unos días mis nudillos ya estarán cicatrizando.
Subo a la van dónde edd ya esta ahi, aviento mi mochila a la parte de atras, de la guantera saco una cajetilla de cigarrillos, saco uno y lo pongo sobre mis labios, con el encendedor quemo la punta hasta que salga humo, una vez que se enciende tomo una gran calada y la expulso.

-dame uno...- saco otro y lo coloco sobre sus labios, este se inclina para encenderlo, observa todos los movimientos que hago, volvemos a nuestra posición, edd con sus dedos saca el cigarrillo de sus labios para expulsar el humo, yo también lo observo de reojo. Carajo ¿que esta pasandome hoy? Me siento... Extraña, rara, incomoda, edd parece estar igual puesto que no habla en todo el camino. Al bajar de la van este se baja de inmediato y se adelanta, yo también bajo rápido.

-¿a dónde vas?- le digo en voz alta.

-ire a entregar un pedido... ¡Adelantate!- camina hacia el interior de la escuela y yo me quedo parada en mi sitio ¿que mierda fue eso? Nunca habia hecho eso, frunci el ceño, vuelvo a la van para tomar mi mochila cuando un auto último modelo casi choca contra la van en un intento de estacionarse.

-¡heey imbécil!- me acercó hacia el auto y golpeo su ventana, el tipo baja su ventana.

-un arranque mas y chocas contra mi van- le digo, es un tipo bien peinado, guapo... De unos veinte.

-ah... Perdoname, esque mis retrovisores estan volteados- me sonríe y su mirada se desvía a mi mano vendada, pero no dice nada.

-no te preocupes... Pero muévete- se me queda viendo y yo hago un gesto para que hable y después este reacciona.

-ah... Si por supuesto, perdón- asiento, hecha su auto para adelante y ahora si se estaciona sin causar ningún desperfecto, su cara me parece reconocida, no puede ser estudiante, se ve mayor de diecisiete.
Después recorde la inauguración del nuevo gimnasio, dónde iban a hacer un tipo de festival con bailes de las estúpidamente animadoras, y un partido de basquetbol.

¿𝐅𝐫𝐞𝐚𝐤 𝐨𝐫 𝐇𝐞𝐫𝐨?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora